Ⓣ Deseos Ⓚ

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Taehyung sabía que despertar a Jungkook a altas horas de la madrugada era casi una misión imposible. Si por él fuera, probablemente se habría quedado allí con él, recostados en el sofá con comodidad. El menor se había dormido, con su cabeza reposada en el hombro de Taehyung, mientras él lo rodeaba con uno de sus brazos (porque Taehyung no podía dormir sin abrazar algo) y brindaba pequeñas caricias en su espalda, sin haber dormido siquiera un poco, pero ambos debían regresar a la casa antes de las tres, porque eso le había prometido a Seokjin hyung.

¿Por qué? Ya ni siquiera podía recordar.

El primer paso para llevar a cabo la misión era poder separarse del agarre del menor, si bien estaba cálido y Taehyung realmente preferiría poder quedarse allí y abrazarlo el resto de la noche, pero luego de un minuto (y casi rezongando) pudo levantarse con cuidado.

El segundo paso consistía en guardar las cosas que habían llevado: comenzó con su cámara, dejándola en el bolsillo grande de la mochila, y también tomó el frasco. El problema fue cuando tuvo que tomar la manta, porque Jungkook, medio dormido, frunció el entrecejo al sentir frío y la tomó también, tirando de ella para cubrirse y que no se la llevara.

— Jungkook, dame la manta. — dijo Taehyung inútilmente, porque el menor pretendía cubrirse hasta la cabeza, hacerse una oruga y seguir durmiendo cómodamente.

Al menos, hasta que la manta le fue arrancada de un tirón que casi lo tira del sofá, de no ser porque tenía buenos reflejos y logró sostenerse del respaldo. Se sentó lentamente, aun medio dormido, mientras Taehyung doblaba la manta con cuidado para meterla en la mochila, y permaneció mirando al suelo, mientras su cabeza borraba la nubosidad del sueño.

Miró a Taehyung, sin entender porqué comenzaba a acomodar todo cuando ni siquiera era de día aún.

— Tengo que llevarte a casa. — explicó, y Jungkook hizo una mueca, dejándose caer de lado y acurrucándose junto al sillón otra vez. Él no quería irse, quería dormir. — Jungkook, levántate, puedes dormir en el auto.

El menor bufó, volviendo a sentarse, frotando sus ojos y bostezando a la vez, antes de levantarse y quedarse de pie junto al sofá, sin saber bien qué hacer. Taehyung dejó escapar una risa ligera, tomando el frasco y acercándose para entregárselo, a lo que el menor lo tomó entre ambos brazos, mirando alrededor con gesto somnoliento. No era bueno para funcionar a horas de la madrugada.

— Tampoco quería levantarme, pero tenemos que regresar. — Taehyung sonrió, y lo tomó del mentón para plantarle un beso corto en los labios que el menor no tuvo tiempo de responder. — Ya, vámonos.

Entrelazó su mano con la del menor, y con la otra sujetó la mochila, colgándosela al hombro y comenzando a guiarlo a la salida, no sin antes apagar las luces y cerrar el lugar con llave. Por fortuna no hacía tanto frío y el auto no estaba lejos. Jungkook se percató mejor de que estaban en un parque no muy grande, y el invernadero se veía aún más bonito desde afuera.

No se durmió en el auto, como Taehyung dijo, si no que se quedó observando las calles, intentando recordar en qué momento exacto se había dormido. Sin darse cuenta, llevó una mano hacia su boca, tocando su labio inferior con sus dedos, y entonces notó que Taehyung lo miraba, casi sonriendo. Se sintió un poco avergonzado al recordar y apartó la mirada.

Tardaron quizás veinte minutos en llegar a la casa. A Taehyung le preocupó la posibilidad de que quizás Seokjin hyung y Jimin hyung estuvieran dormidos, pero Jungkook no pareció preocupado y no sólo tocó el timbre una vez, sino siete veces seguidas sólo por apresurarlos, porque quería entrar cuanto antes.

La puerta tardó menos tiempo en abrirse del que ambos esperaban, y vieron a Seokjin (muy despierto y viéndose fresco como una lechuga) asomándose antes de sonreírles y abrir la puerta por completo, llevando su dedo índice a sus labios a señal de que debían guardar silencio, antes de que ambos menores entraran.

𝙏𝘩𝘦 𝘵𝘩𝘪𝘯𝘨𝘴 𝘵𝘩𝘢𝘵 𝘐 𝘭𝘰𝘷𝘦 «ᴛᴀᴇᴋᴏᴏᴋ» • 𝐂𝐎𝐑𝐑𝐈𝐆𝐈𝐄𝐍𝐃𝐎 •Where stories live. Discover now