Ⓑ Hyungs Ⓢ

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Namjoon dio pasos cuidadosos por la sala, porque era bastante tarde y no quería despertar a ninguno de los otros seis. Tomó una de las mantas que había en el suelo y la usó para cubrir a Taehyung y Jungkook, quienes dormían acurrucados en uno de los sofás, sorprendentemente quietos para tratarse de ellos.

Hoseok, Yoongi y Jimin (en ese orden) estaban dormidos, uno sobre el otro como un domino caído, de modo que Namjoon acomodó mejor la cabeza del menor con una almohada, para evitarle un dolor muscular intenso al despertar, y tan sigiloso como pudo ser, tomó el control remoto para apagar la televisión, pero entonces oyó un quejido adormilado proveniente del lugar de Seokjin (que ocupaba un sillón individual) y lo vio abrir sus ojos perezosamente.

— Namjoon, — musitó, y su voz estaba un poco ronca a causa del sueño. — ¿qué sucede?

— No quise despertarte. — habló bajo, casi susurrando, mientras optó por bajar el brillo del televisor en lugar de apagarlo. — Vuelve a dormir.

Y, asumiendo que Seokjin volvería a dormirse en cuestión de nada, Namjoon regresó a la cocina, donde la cafetera y las luces estaban encendidas, y se sirvió una taza de café antes de sentarse en la barra, tomando su bolígrafo para seguir escribiendo un poco.

En pocos segundos escuchó algunos pasos, y vio a Seokjin entrar, frotando uno de sus ojos y caminando directo hacia la cafetera, sacando una taza de la alacena en movimiento algo lentos y un poco torpes.

— ¿Trabajas en algo? — preguntó sentándose junto a él, una vez que tuvo su café hecho.

— Estoy estrenando el obsequio de Hoseok. — respondió bajo. — Sólo estaba algo aburrido y pensé...

— ¿Puedo? — preguntó extendiendo una mano hacia el cuaderno, y Namjoon pareció dudar un poco, pero finalmente se lo pasó. Jin cerró sus ojos fuertemente y los abrió en cuestión de un segundo, sólo para lograr leer sin que la nubosidad del sueño se interpusiera. Entonces comenzó a leer. — De alguna manera, caminé y llegué al mar, desde este mar miro hacia la playa. Hay incontables granos de arena y fuertes vientos... — sus cejas se juntaron levemente con algo de interés, y dejó de leer en voz alta, siguiendo la lectura en silencio, y volvió la vista hacia él. — Namjoon, esto...

— Sólo estaba aburrido.

— ¿Es en serio? Quisiera poder hacer algo como esto estando aburrido. — se aseguró de no alzar tanto la voz pese a realmente necesitarlo, porque no quería despertar a los muchachos. — No sé si estoy sintiendo las olas en este momento o no, no sé si todavía soy perseguido por la tormenta de arena o no. ¿Cómo se te ocurrió hacer algo así? Es... bastante poético.

— No lo veo como una poesía. — murmuró una vez que tuvo el cuaderno de regreso. — No soy muy bueno con eso, ya te lo dije.

— ¿Es un diario?

— Es un anotador de ideas. — corrigió, sintiéndolo como la mejor descripción. — Sólo... intento expresar lo que pienso o siento de una manera simple.

— Estoy no es sólo simple, es precioso. — lo animó. — Eres bueno con las palabras.

— ¿Tú crees?

— Estoy seguro. — asintió, casi sonriendo. — Yo generalmente soy malo para expresarme con palabras, soy más de actuar, ya sabes.

— Sí, lo sé. — musitó, y ambos recordaron el beso en la habitación, cosa que hizo que el ambiente se tornara un poco extraño.

— Bueno... A veces suelo ser muy impulsivo, especialmente si estoy estresado. — intentó a explicarse.

— ¿Es por eso que...? — comenzó a preguntar, pero carraspeó. — ¿Yo te generé estrés?

𝙏𝘩𝘦 𝘵𝘩𝘪𝘯𝘨𝘴 𝘵𝘩𝘢𝘵 𝘐 𝘭𝘰𝘷𝘦 «ᴛᴀᴇᴋᴏᴏᴋ» • 𝐂𝐎𝐑𝐑𝐈𝐆𝐈𝐄𝐍𝐃𝐎 •Where stories live. Discover now