360°

🦄Capítulo: 1 (Sofi)🦄

De pequeña soñaba con ir a la Universidad. Mis padres se esforzaron mucho para que tenga una buena educación, aunque yo también puse muchísimo de mi parte, tanto así que conseguí una beca en la Universidad Estatal de Whashington (WSU) y mañana mis padres nos llevarán a Ella y a mí al campus de Pullman.

Ella es mi hermana mayor, tiene 20 años, su piel siempre está bronceada, su cabello es rubio y contrasta muy bien con sus ojos verdeazules, tiene varios tatuajes y un piercing en la nariz. Cursa el segundo año en la Facultad de Ciencias y Arte de la WSU. Vive con su novio Adams en una de esas fraternidades dentro del campus.
Ella y yo nos queremos muchísimo, pero somos muy distintas, por eso no he aceptado su invitación de vivir juntas y he optado por una residencia estudiantil. Sinceramente tengo mucho miedo, nunca antes he estado lejos de casa y tampoco he compartido habitación con nadie, ni quiera con mi hermana, y el hecho de que mi nueva compañera es una desconocida tampoco me ayuda a calmarme. Soy muy tímida por lo que no se me da bien eso de hacer amigos, prefiero pasar el tiempo encerrada en mi habitación leyendo y estudiando. Según mis padres, mi mayor prioridad no es hacer amigos, sino estudiar y esforzarme mucho, el resto surgirá con el tiempo.
Estudiaré en la Facultad de negocios Carson, lo que es un honor teniendo en cuenta mis posibilidades económicas y como tengo una beca debo trabajar el doble que el resto.

Miro el reloj que tengo en la muñeca izquierda, es bastante tarde y como mañana tengo que levantarme temprano apago la luz y me acuesto a dormir en mi pequeña habitación.

(...)

La noche pasa muy rápido, cuando suena la alarma me cuesta levantarme.

—¿Sofi, te falta mucho? —pregunta mi madre desde el salón.

—No mamá, ya casi estoy lista —grito.

Tomo un baño, me seco el pelo y me lo aliso bien, no me maquillo mucho pero como hoy es un día especial decido ponerme un poco de rímel y de labial rosa. Uso un vestido de mangas color crema que me llega por las rodillas y mis clásicas Adidas.

Cuando llego al salón de casa mi mejor amiga Eva me está esperando para despedirse, irá a España a visitar a sus padres mientras decide qué hacer con su vida. Ambas lloramos un poco por tener que separarnos, pero prometemos llamarnos de vez en cuando.

Una vez que Ella está lista entramos al coche y nos ponemos en marcha. Mi madre está feliz y mi padre no lo sé, nunca dice lo que siente. Todo el camino estuve durmiendo.

Al llegar a mi residencia me encontré una pequeña habitación, con las paredes blancas un poco manchadas de humedad y la madera del suelo desgastada, el techo alto y pintado también de blanco. Amueblada solamente por dos pequeñas camas, una a cada lado separadas por un armario casi minúsculo donde se supone debemos guardar las cosas, un escritorio pequeño debajo de la ventana de al lado de la puerta de entrada con una silla de madera y en una esquina, colgado de la pared se encuentra la televisión, del tamaño de una caja de fósforos.

Sobre el escritorio había una nota de mi compañera:
"Hola, si lees esto debes ser Sofía. Mi nombre es Adriana. He salido a buscar unas cosas que necesito y regreso en la noche. La cama de la derecha es la mía, aunque si lo prefieres es tuya. El armario es compartido, tengo muchas cosas, así que si necesitas más espacio puedes sacar algo y ponerlo en mi cama."

Papá dejó mis maletas encima de la cama y las cajas con el resto de mis cosas en el suelo. Mamá y Ella me ayudaron a organizar un poco todo. Una hora más tarde mis padres se despidieron de nosotras. Ella se queda hasta la noche.

—Hermanita, tengo que irme, he quedado con Adams y los chicos de la fraternidad para cenar. ¿Quieres ir con nosotros? —pregunta Ella entusiasmada.

—No, gracias Ella, no me apetece, estoy agotada y no tengo hambre —respondí sinceramente— además, aún no conozco a mi compañera.

—Vale, entonces me voy. —dijo abrazándome— mañana te paso a buscar a la hora de comer y así me cuentas.

—Ok, gracias por todo. Hasta mañana— me despido.

—Hasta mañana —dijo cerrando la puerta.

Termino de colocar los libros en el estante y voy a darme una ducha. Por suerte, cerca de la habitación hay un baño. Al regresar noto que la puerta está abierta y por un instante me asusto, pero luego supongo que es Adriana.

—Hola —digo apenas diviso una chica asomada por la pequeña ventana que da a la calle.

—Hola —dice nada más verme— ¿Qué tal? Debes ser Sofía. Mucho gusto. Yo soy Adriana pero mis amigos me llaman Adri. Encantada, de verdad. Eres muy guapa —dispara por su boca como si fuese una ametralladora al tiempo que me abrazaba.

—Mucho gusto Adriana —le devuelvo el abrazo.

Nos pusimos a conversar durante más de una hora. Es una chica majísima, de mi edad, nació en Canadá pero a los seis años vino para Washington, luego su padre murió y su madre decidió que se mudaron a Inglaterra. Este es su primer año en la WSU, estudia medicina veterinaria. Su novio se queda en otra residencia dentro del campus a solo unas manzanas.

—Adriana, me voy a dormir, estoy exhausta, hoy a sido un día muy largo —digo mientras me recuesto en mi cama.

—Yo también, llevo todo el día en la calle y tengo sueño. Hasta mañana —responde poniéndose su pijama.

Hola!!!!! Quisiera saber qué les ha parecido el primer capítulo??????? Un besote❤❤❤