🦄 Capítulo: 41 (Sofi) 🦄

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No puedo creer que esto me esté pasando. Ella tenía razón, Tyler no tiene sentimientos. Traté de luchar contra todos porque estaba ciega, ciega de amor por él.

Deposite toda mi confianza en esa relación, perdí mi empleo por esta semana de "vacaciones", a mi familia y a mi compañera de habitación por alguien que no se lo merece, y lo peor de todo es que también le entregué mi virginidad a ese idiota.

Las lágrimas corren por mi rostro como cascadas, sin fin, incluso cuando pienso que ya he terminado de llorar me sorprendo a mi misma. Estoy devastada, atrapada en mi propio tormento, sin tener cómo salir de esta maldita isla y de este maldito hotel.

Siento sus pasos detrás mío y me apresuro para que no me alcance, pero fallo en el intento, justo cuando cuando iba a entrar en el taxi me detiene.

—No te vallas, tienes que ver esto —me dice y yo no aguanto más este dolor, tengo una lucha interna que no me permite pensar con claridad. Una parte de mí me dice que lo escuche y que todo tendrá solución, pero la parte más sensata me grita que me aleje de él y todo lo que lo rodea.

—Tengo que irme, sino el taxi me cobrará una fortuna —le contesto sin mirarlo, con la vista fijada en el suelo.

—No te preocupes por eso, yo lo pagaré —dice mientras le tiende al taxista un billete de cincuenta y este se retira por la carretera.

—Habla, te doy cinco minutos y luego me voy —acepto por fin al ver que no me queda más remedio.

—Tienes que ver este video, está completo —me dice y le da al play en su teléfono.

Las lágrimas vuelven a brotar por mis ojos al ver la escena que ya antes había visto y que tanto dolor me causa, pero a diferencia del que me envió Ella, este no se detiene cuando caen en la cama, sino que prosigue, y lo que viene a continuación me produce una sensación de alivio y siento como por primera vez desde que vi el mensaje el aire llega a mis pulmones. Tyler detiene a Steph y le lanza su ropa que estaba en el suelo, esta empieza a gritarle un montón de barbaridades y abandona la habitación, donde él se queda con la cabeza entre las manos abrumado.

—¿De dónde lo has sacado? —le pregunto y la curiosidad me carcome por dentro.

—Tengo mis contactos —me dice sin más, analizando mi rostro.

—O me lo dices o ahora mismo me voy —lo amenazo.

—Vale, vale, te lo digo —hace una pequeña pausa y luego prosigue—. Llamé a Adams para explicarle y él consiguió el original y me lo envió.

Ahora lo entiendo todo, mi hermana se confabuló con la perra de Steph para hacerme daño. No entiendo qué es lo que yo le hice a ella para que sea así conmigo, desde pequeñas ha querido arruinar todo lo que hago.

—Esto no cambia las cosas — le digo por fin a Tyler.

—Sofi, tienes que perdonarme, sabes que yo te amo demasiado —me dice y sus palabras hacen que sienta un torbellino de emociones.

—Eso no es lo que parece en el video, a pesar de que no te acostaste con ella la besarte, y eso me duele profundamente —estoy siendo sincera.

—Steph no significa nada para mí, yo solo te quiero a ti —responde y yo lo abrazo, me aferro a su torso como nunca antes, con fuerza y un sentimiento incomparable—. Entremos, la noche está fresca y no te dejaré ir ahora, en la mañana si quieres te vas.

—Vale —digo y salgo caminando detrás de él, observando en silencio su figura iluminada por la luz de la luna.

(...)

—Te perdono —digo y él me mira asombrado, sus ojos le brillan y en sus labios aparece una sonrisa.

—¿Lo dices en serio? —pregunta y yo digo que si con la cabeza—. Te amo mucho.

—Te amo, pero el hecho de que te perdone no quiere decir que las cosas vuelvan a ser como antes —hago una pausa para besar suavemente sus labios—. Ya no confiaré en ti de la misma forma —le confieso.

Él solo espera a que yo termine de hablar y nuestros labios se funden un un tierno beso al comienzo, que va ganando en pasión y terminamos haciendo el amor, de una forma mágica y que me hace sentir la persona más completa del universo. Aunque lo que le he dicho es cierto, no podré confiar en él como antes, siempre quedará esa pequeña espina en mi corazón.

(...)

Cuando despierto Tyler aún duerme, aprovecho esto para levantarme despacio y darme un buen baño y eliminar la tensión acumulada de la noche anterior. Apenas salgo de la ducha decido enviarle un mensaje a Ella para advertirle que no se acerque más a mí, porque no sé cómo pueda reaccionar si vuelve a meterse conmigo, soy muy buena pero cuando me enfado sé defenderme.

—¿Sofi? —escucho a Tyler preguntar desde la cama.

—Estoy en el baño —grito poniéndome el vestido y él no tarda en asomarse a la puerta— Buenos días.

—Buenos días, por un momento pensé que te habías ido —me dice y puedo ver como se refleja el temor en sus ojos.

—Nunca me iría ¿Recuerdas? —le digo y aparece una leve sonrisa en sus labios.

—Te amo —dice antes de juntar sus labios con los míos.

—Te amo —le respondo.

(...)

El resto del día fue bastante agradable, la verdad es que la pasamos genial, hicimos un montón de cosas. Desayunamos en el buffet y luego nos dimos un refrescante baño en la piscina para niños —porque sí, aún no me atrevo a bañarme en una más profunda— y después fuimos a almorzar al ranchón de la playa. La tarde la dedicamos a observar los caballos salvajes que habitan la isla y a decir verdad es todo un espectáculo verlos correr libremente, realmente hermoso. A la hora de la cena nos vestimos lo más elegantes posibles con la ropa que tenemos en nuestras maletas y vamos al restaurante del hotel donde nos esperaba su tío —que recién me entero es el gerente— y sus primos gemelos de 5 años.

—¿Eres la novia de Ty? —me pregunta uno de los pequeños.

—Creo que sí —respondo y él sonríe.

—¿Y no quieres ser mi novia también? —ahora fue el otro gemelo quien habló.

—Lo siento chicos, pero Sofi es totalmente mía —responde Tyler y los niños lo miran con cara de pocos amigos y los adultos estallamos en carcajadas.

Cuando regresamos a la habitación estoy agotada, los pies me duelen y no tengo fuerzas ni para hablar, así que me duermo al instante.

(...)

No sé que hora es, el molesto ruido de mi móvil no cesa y las protestas de Tyler no se hacen esperar, así que abro los ojos despacio y estiro mi mano hasta la mesita de noche para alcanzarlo. Cuando miro la pantalla suelto un suspiro antes de verme obligada a contestar la llamada.

¡¡¡¡Hola mis amores!!!! Estoy feliz de poder compartir este nuevo capítulo y a la vez triste porque ya estamos cerca del final, pero si mis cálculos no fallan aún quedan unas 2 semanas de 360°.

Como siempre hago, les agradezco enormemente por leer la historia y les recuerdo lo muchísimo que los amo, son mi inspiración vuestros comentarios y votos.

360°Onde histórias criam vida. Descubra agora