CAPÍTULO 26

5K 533 300
                                    

Asher Faith:

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Asher Faith:

— Jade, ábreme. — dije golpeando nuevamente la ventana de su habitación mientras rezaba por no caer desde estas alturas hacia el jardín — Sé que la cague pero vamos, está vez también fue tu culpa. —

Sabía que estaba enojada por la manera en la que había reaccionado cuando me dijo que iría a estudiar al otro puto lado del mundo.

Podía comprender un poco la situación, después de todo no era ninguna mentira que nuestros futuros estaban escritos desde antes de nacer. Teníamos todo planeado para ser los mejores herederos del imperio familiar, como todos aquellos veranos que fui enviado a un estúpido campamento en Suiza solo porque a un estúpido antepasado se le había ocurrido hacerlo una tradición. Pero lo de Jade había sido de un día para otro.

Su abuela era una perra, seguramente alguien había ido con el chisme de que nos iríamos a vivir juntos, que éramos novios y quería sabotear todo.

— Jade, no puedes culparme por todo, — dije después de un rato — no puedes decirme que hay que buscar departamentos y después que te largas a miles de kilómetros de mi. —

» Sé que tal vez actué muy pendejo pero es solo porque me da miedo perderte, este tiempo en que hemos sido algo... Algo formal ha sido increíble y no quería cagarla... Perdón. — añadí desesperado mientras intentaba hacer que me abriera — Mira si me perdonas te juro que voy a hacer lo que quieras... Bueno todo menos algo relacionado con tu dedo en mi culo. —

El silencio hacía que cada segundo se volviera una tortura eterna, me resultaba patético que después de todo el daño que le había ocasionado hubiera terminado conmigo solo porque me enoje un poco.

«Tal vez fue lo último que soportó, se dio cuenta de que jamás dejaría de ser la misma mierda y se cansó de esperar a que me convirtiera en el hombre perfecto para ella.» Dijo una pequeña voz en algún rincón de mi cabeza.

¿Sería mi conciencia?

— Jade por favor, no quise arruinarlo de nuevo. — dije, esta vez con la voz un poco entrecortada y las lágrimas arremolinadas en mis ojos — Haré lo que quieres, no importa si es el dedo en el culo o... ¡Ya sé! — exclame mientras la única bombilla en mi cabeza se encendía — ¡Nos iremos juntos a la universidad, no importa si está al otro lado del mundo! Seremos tu y yo rodeada de gente con acentos que los hacen sonar con clase y viviremos en un hermoso lugar... Conoceremos la ciudad todos los días. —

¿En qué momento había dejado de ser el chico que temía a aceptar sus sentimientos a proponer irme al otro lado del mundo solo con tal de seguir teniendo a mi chica?

Creo que después de todo me había quedado con ganas de más de aquellos días en donde presente a Jade como mi novia, la tomaba de la mano en la calle, la besaba cuando quería y donde quería, podía decirle que era la mujer más hermosa del mundo mientras íbamos a comprar ropa o irme en medio de las fiestas con ella tomada de mi brazo.

RAMÉ ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora