Pasión Imperial+18 ||Completa|| ✔

||Capítulo 36||Cosas Ocultas. ||Concurso||

Narra Rommie.

Abrí los ojos lentamente y me vi en emergencias, todo era muy frío, mi cabeza estaba en blanco por lo sucedido.

Aún sentía el olor a humo en mi garganta, ¿y Stella?

—¿Rommie? Despertaste. —Amaru sostiene mi mano alegre, tenía ojeras y se veía bastante desgastado, Pobrecito.

—Amaru...—Extendí su nombre con ternura, agradecía mucho que estuviera a mi lado.

—Tranquila no intentes levantarte. —Me abraza y sentí su cálido cuerpo, estaba muy preocupado por mi, lo entiendo perfectamente para él todo esto era nuevo, y aveces las personas estábamos tan ocupadas que nos olvidabamos de ser amables con los demás.

—Perdón. —Susurre acariciando su oreja mientras me miraba lloroso y vulnerable. —Perdón por todo, perdón por haberte ocultado lo de Alexander, Amaru.

Sollozo sin poder contenerme, no quería que el tuviera una mala idea de mi, no quería que pensará que era una de esas mujeres fáciles que estaba con varios hombres a la vez. 

—¿Porqué nunca me dijiste nada? —Trato de acomodar su cabello mientras me escuchaba.

—Alexander me había amenazado varias veces con hacerte daño y no sabía cómo hablarte de eso sin sacar a reducir mi pasado con él, Amaru te juro que nunca te fui in—Me interrumpió con sutileza.

—Lo sé Rommie, no es necesario que me lo digas.

—¿Qué? ¿Cómo lo sabes? —Me desconcentra su seguridad y me levanto adolorida, estaba siendo muy comprensivo  y eso me hacía sentir culpable, o era que yo era tan tóxica que esperaba que Amaru reaccionara de otra manera.

—Cuándo te conocí me dejaste muy en claro que no estabas buscando alguien que te hiciera sufrir, estabas buscando alguien que te hiciera feliz y Alexander no es esa persona según mi criterio. —Lo abrazo y paso mis manos sobre su cabello, inhalando su olor varonil.

—¿Lo dices enserio?— Susurro mientras el me abraza de la misma manera, siento algo en mi vientre y me reviso.

—Sí pero estoy algo celoso.

—¿Porqué? —Puedo notar unas cintas en mi pancita y el dolor de algunas inyecciones en la parte de atrás.

—Yo nunca podre darte los mismos lujos que él, soy solo un hombre insignificante. —Nuestras miradas chocaron por mi momento, su voz cerca de la mía, y sus ojos brillantes.

—¿De qué hablas Amaru? Yo te quiero tal y como estás no hace falta cambiarte nada. —La sala se puso altamente romántica con mis palabras. ¿Porqué le digo esas cosas? Va a pensar qué me tiene en sus manos.

—¿Te puedo besar? —Sonrió coqueto.

—No, cuando me cepille los dientes. —Cubrí mi boca con mis manos, y solo deposito en beso en mi frente, debía preguntarle algo yo también me sentía insegura.

—Rommie... —Hizo una pausa y siguió. —Quiero decirte... Quiero decirte qué quiero saber más de ti, no quiero volver a pasar por una experiencia como esta creí que te iba a perder, una parte de mi se sintió mal por dudar unos momentos de ti cuando Alexander me dijo un millón de cosas, no quiero que vuelva a pasar... Solo quiero hacerte feliz.

Le estaba costando mucho decir todo eso, y es que estos meses que hemos estado juntos Amaru y yo solo nos dedicábamos a hablar sobre cómo eran las cosas aquí, nos dábamos un poco de cariño e inmediatamente estábamos en la cama, siento vergüenza de mi misma he pervertido a Amaru inconscientemente.