Pasión Imperial+18 ||Completa|| ✔

||Capítulo 42 ||Joven Y Tonta.

Narra Rommie.

Ya pasaron 3 días ni Ikal ni Amaru han vuelto, no tengo ni un solo mensaje o llamada de él, posiblemente ese hijo sí es de él y decidió quedarse allá.

No ya basta de pensamientos negativos, Amaru me ama... Lo sé sin embargo, el no está tan seguro de mi amor por él. No sé cómo hacerle llegar mis sentimientos la última vez que le entregué mi corazón a alguien lo botó a la basura y me trató como si no valiera. Sí Alexander tan solo alguna vez me hubiera pedido perdón tal vez no lo odiara tanto, siempre demostró sentirse orgulloso de ser un hombre que tenía y usaba a las mujeres que quería, nunca sentiría remordimiento pues él es un mujeriego hasta el final.

—¿Cómo te sientes? —Priscila busca su cepillo y peina mi cabello. Estábamos haciendo prácticas y yo estaba echa un desastre.

—Bien, no tienes que preguntarme a cada rato. —Acomodo mi cabello yo sola mientras esperamos a otra paciente para hacer las pruebas de glucosa.

—Es que no estas muy conversadora hoy, tú siempre andas llorando por todo. —Le di una mirada de odio. Así es mi mejor amiga siempre me hace bullying de todas las formas posibles.

—¡Pensé qué te gustaba escucharme! —La paciente asustada se sienta mirándonos y tomó su dedo y lo pincho con la máquina.

—¡Virgen santísima! No me toque. —Se queja levantándose enojada.

—Señora pero si no duele, quédese quieta solo es un pinchazo. —Le dije y Priscila trato de calmarla.

—Deja que lo hago yo. —se tomó la molestia de atender ella a la señora pues yo trabajo en una clínica y no me gusta cuando hacemos estos trabajos en la facultad la gente es muy grosera.

[...]

Terminamos la primera jornada y tomamos un descanso así que fuimos a almorzar con el resto del grupo.

—Rommie... ¿Tú sabes algo... Del amigo de tú novio? —Preguntó y me quedé helada ¿Por qué preguntaba por Ikal?

—¿Tienes algo con él?

—No, solo quiero saber... Tenía mensajes de él diarios y ahora de la nada parece haber muerto.

—¿Te gusta?

—¿No me estás escuchando? Qué. No. Se. Donde. Esta. —Exclama molesta mientras comía su almuerzo, me gustaba molestarla.

—¿Y tú novia no se pone celosa? —Dije sin aguantarme la curiosidad.

—Eres una enferma.

—Lo siento, lo siento desde que se fue con Amaru no han vuelto... Ni si quiera Ikal... El vuelve cada 3 días de viaje pero no responde mis llamadas. —Confesé tratando de sonar tranquila, no quería imaginar que le había pasado algo ni a él ni a Amaru.

—¿Crees que ese hijo es de Amaru? —Saca a relucir ese tema y dejo a medio comer mi sopa de miso japonés.

—No se, la verdad no lo sé.

—¿Y si sí fuera hijo de él, lo aceptarás? —Me quedo un momento en silencio mirando como los fideos se movían de una lado a otro pero no se pegaban.

—No se.

— ¿Cómo qué no sabes? ¿Eres tonta o que? Estás esperando un hijo de él ¿vas a criarlo sola? Aún te faltan 4 años de carrera y déjame decirte que no te puedes rendir tan cerca. Ya falta muy poco para cumplir nuestros sueños y no deberías complicarte. —Termina de comer y me quita mi bizcocho de canela.