EL REGRESO. [Draco Malfoy]

19: EL REGRESO.

EMILY GRACE RIDDLE.

—Ems, ¿estas segura que quieres ir a Beauxbatons? Queda muy lejos de casa.

-Hermanito, con lo que pasó el año pasado no quiero estar mas en Hogwarts, no con la aparición de voldemort. Y tu? Estas seguro de que quieres ir a Durmstrang?

—Me siento igual de incómodo que tu. Creo que esto será lo mejor.

—Enviemos una carta a nuestros amigos, a Draco, principalmente. Creo que es lo mejor.

—Bien, escribela y mandala tú. Odio las despedidas.

Asentí y me dirigí a mi habitación, ahí empecé a escribir.

Draco:

Mattheo y yo no asistiremos a la escuela de Hogwarts gracias a la aparición de voldemort el año pasado.

Estamos más que aterrados.

Yo iré a la escuela Beauxbatons mientras que mattheo irá a Durmstrang.

Coméntale esto a todos, por favor.

Mándale saludos a todos y especiales a Carla. Dile que la extrañaré muchísimo.

Al igual que a ti.

Espero la vida nos vuelva a encontrar,

Ems.

Cerré y envié la carta a Draco.

Empacamos las cosas Mattheo y yo. No sabía como me iba a ir los próximos años,

O más bien no sabía cómo iba a cargar tantas valijas, este año eran 5.

-

1994.

DRACO MALFOY.

El profesor Dumbledore anunció hoy que vendrán los alumnos de las escuelas en las que estaban inscritos Mattheo y Emily.

Y maldita sea, no puedo extrañarla más.

Pasaron dos años y la sigo extrañando como a nadie.

Para llenar mi vacío emocional, le pedí a Pasny de ser mi novia en el segundo año.

No podía creer la idiotez que había hecho, pero mi papá estaba orgulloso. Además, debuté con ella.

Lo que lo hizo todavía mas feliz, claro está.

—Draco, me alcanzas la mermelada? _pregunto Pansy con su voz chillona haciéndome bajar de mi nube con Emily.

—Cl-claro Pans, aquí tienes.

—Estas raro hoy, Malfoy. —dijo Carla.—No estas emocionado de ver a Mattheo y a Emily? Llegan mañana.

—Si. —Nervioso. Nervioso es la palabra.

Pansy me miró como si me quisiera matar con la mirada.

Para calmarla, le di un pequeño beso en la mejilla.

El día paso jodidamente lento, estaba desesperado por ver a Emily.

Desesperaba saber como estaba.

Si ya tenía pareja (lo cual odiaría, pero era una realidad).

O como estaba después de no verme tanto tiempo.

En la noche me acosté con Pansy por despecho, realmente no podía dormir.

Después de eso, mi sueño resurgió, finalmente pude conciliar el sueño.

Me desperté a las 9 en punto al otro día, eso me daba 30 minutos antes de que llegaran todos.

Desperté a Pansy para que se vaya de la habitación.

Me di una ducha rápido, me puse perfume y salí hacia el gran salón.

—Draco, te perdiste ver como llegaban los alumnos de las otras escuelas.

—Y para que querría ver eso?

—Amigo, literalmente salieron del cielo y otros aparecieron desde abajo del lago, ¿te parece pequeño acto?

Me quedé callado y agarré una manzana verde.

—Alumnos. —anunció Dumbledore.—le damos la bienvenida a los alumnas de la escuela Beauxbatons.—Todos aplaudieron.

Rapidamente pudimos ver a unas señoritas vestidas de azul acercarse a el fondo del salón mientras bailaban, eran del 6to año.

Luego aparecieron las del 5to año, también bailando.

Finalmente las del 4to, todas bailando.

Y allí estaba.

Ella regresó.

El regreso que esperé desde que se fue en el primer año.

EMILY GRACE RIDDLE.

Estaba entrando al salón que extrañaba mientras seguíamos la coreografía armada.

De pronto sentí unos ojos mirándome fijamente, sabía que era Draco.

No se por qué, ni cómo, simplemente yo lo sabía.

Finalmente, me dirigí hacia Dumbledore haciendo una referencia quedando en el centro de todo el salón.

Pronto el salón se llenó de aplausos.

-

—Emy, ven aquí! —Me dijo Madison.

Las chicas se estaban sentando en Ravenclaw.

—Oh no, yo no soy de esta casa, pertenezco a otra.—dije mirando hacia la mesa de Slytherin, orgullosa.

—Bien, ve hacia allá a saludar a tus amigos y a ese tal "Draco" del que tanto me hablaste.

Le sonreí y me dirigí hacia Carla, la cual estaba de espaldas.

—Señorita Parkinson, no me parece adecuada la manera en la que esta sentada, más derecha por favor.

—Oh s-si, lo siento. Estab- ella se dio la vuelta.

Ambas empezamos a gritar como dos adolescentes que somos mientras estaban entrando los alumnos de Durmstrang, gracias al ruido que hicieron, no aturdimos a todo el salón, pero si a el grupo de amigos que se encontraba allí.

—NO PUEDO CREER QUE ESTÉS AQUÍ— Dijo eufórica Carla, abrazándome con fuerzas.

—¡YO TAMPOCO LO PUEDO CREER!

—MALDITA SEAS EMILY, ¡TE EXTRAÑE MUCHÍSIMO!

—¡YO A TI, IDIOTA

—Uf, veo que han cambiado tu vocabulario en esa escuela tan fina.

Nos abrazamos fuerte y pude ver a través del abrazo como Pansy estaba agarrada de la mano de Draco. 

Y el notó lo que yo había visto y se soltó de ella, fue como automático.

Rápidamente me senté al lado de Carla para terminar de ver la llegada de Mattheo.

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AL FIIINN EL REGRESOOOOO, espero les haya gustadoooo 

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