EL REGRESO. [Draco Malfoy]

36: Astoria, la zorra.

—Te escucho.

—Bien, empecemos por el hecho de que me llamas zorra delante de todo el mundo, cuando todos sabemos perfectamente que aquí la zorra eres tu, estuviste con Draco sabiendo que estaba conmigo, pero eso lo podemos omitir, verdad? No eramos nada oficial, pero tu querida hermanita me estuvo contando TANTAS cosas sobre ti, por que no seguimos con el hecho de que estando con Malfoy te sigues follando a tu ex pareja, a Sebastian?

Nadie dijo nada, solo se escuchaban murmullos de la multitud que se había armado a  nuestro alrededor.

—Penoso, querida. Oh, pero no te vayas hermosa, todavía no termino. También me enteré que una vez estando con uno gemiste el nombre del otro, la culpa debió de haberte estado comiendo... Tal vez saliendo del grupo de porristas creíste que ibas a librarte de que te llamen exactamente como me estuviste llamando a mi todo este tiempo. Pero lamento informarte, o bueno, INFORMARLES—grité hacia la multitud— que ser una zorra no depende de estar en un maldito equipo de porristas, van a encontrar de estas por todos lados y he aquí la prueba.

Pude ver como empezaba a ponerse roja, no sabía si era de la vergüenza o del el enojo.

Automáticamente subí a las habitaciones, sin ganas de soportar ni una palabra mas de ella y me encontré con las chicas.

Les conté todo, desde lo del grupo de porristas hasta lo de Astoria.

—BIEN DICHO PERRA! HAZTE RESPETAR, NO TE PUEDE LLAMAR ASÍ.—Rose me aplaudió orgullosa.—Y MUCHAS FELICITACIONES POR LO DEL EQUIPO DE PORRISTAS NENA!

—Tal vez me pasé un poquito... ¿no crees?, y gracias por lo del equipo, Rose.

—Si te sientes mal pídele perdón, pero estuvo, supuestamente hablando mal de ti mucho tiempo. Se lo merecía.—Dijo Mads.—Y también muchas felicidades por entrar al equipo, te lo mereces.

—Si, tienen razón. De todas formas no quiero ir a la fiesta de Gryffindor, prefiero quedarme aquí, mañana a la mañana me cuentan, si?

—PERO EMY-

—Carls, no insistas. Estoy demasiado cansada, además son casi las 9 y todavía ni me bañé.

—Bien, pero si decides venir a la fiesta, estaremos esperándote.

—Claro Y ESTAN HERMOSISIMAS, diviertanse mucho, las adoro, mis preciosas.

-

Apenas me dejaron sola, fui hacia la ducha, estaba muy transpirada por el entrenamiento.

Prendí el jacuzzi el cual no utilizaba hacía muchísimo tiempo.

Me quedé máximo treinta minutos y salí.

El reloj indicaba que eran las 10, tal vez fue mas del tiempo que creí.

Tenía hambre, por lo que me dirigí al gran comedor a buscar bocadillos. Solo se encontraban alumnos de grados menores, por lo que agarré tres pedazos de pizza y me dirigí a mi habitación de nuevo.

Al llegar a mi cuarto, pude escuchar griterío en el cuarto de al lado.

Eran Astoria y Draco.

—como pudiste hacerme esto Astoria, lo nuestro termina aquí.

—No Draco, no puedes. Me peleé con Pansy por estar contigo, no puedes romperme ahora Draco.

—Astoria, lo que sea que tengamos, se terminó.

—Es por ella verdad? Por Emily.

—obvio que es por ella, idiota. La dejé ir por estúpido y me metí contigo solo para olvidarme de ella, por despecho, como lo hice también con Pansy en el tercer año. Solo no vuelvas a aparecer en mi vida.

—ella no te ama Draco. Eres un imbécil, fuera de mi vista.

—con muchisimo gusto Greengrass.

Esto de verdad estaba pasando?

Escuché a draco irse dando un portazo, sabía que se dirigía a la torre de astronomía.

Sabía que simplemente no debía, pero lo hice.

Me vestí con una falda corta y un buzo, camisa debajo.

-

—Hola

—Que haces aquí, Emily? Necesitas algo?

—Quería saber como estabas

—Mal

—Bien.. tienes ganas de hab-

—No

—Te molesta si me quedo?

—No...—se dio la vuelta y miró mis piernas descubiertas—bájate esa falda Riddle.

—Es en serio?

—Muy

—Me voy, cura tu depresión sol-me agarró del brazo.

—No te vayas, por favor.

—Vuelve a mencionar mi falda y estás muerto Malfoy. Como sea, como estás con lo de Astoria?

—Da igual, pero antes de hablar de ella, quería ofrecerte unas disculpas por como te llamé, perdóname Ems.

—Pues si quieres que te perdone, demuestra que cambiaste. No volveré a ti cada vez que te sientas solo o arrepentido de algo. PIENSA antes de actuar, lastimas mucho. Si estoy aquí es por el hecho de que soy jodidamente empática, pero no quiere decir que te perdone todo.

Ambos nos quedamos en silencio.

—Intentaré cambiar, pero solo si me dices que haciendo esto podría recuperarte.

—No te lo mereces.

—Pero me adoras.

—Una cosa no quita la otra.

—Esta bien, solo...intentemos ser amigos mientras tanto. Así te demostraré que estoy cambiando.

—Espero que si.—mire a sus ojos grises, estaban tan hermosos como siempre.-Vamos a la sala común?

—No habrá gente, que haríamos si no puedo besarte?

—Los chicos deben estar jugando juegos con bebidas, idiota.