EL REGRESO. [Draco Malfoy]

50: Actos heróicos.

La clase termino y nos dirigimos a lo que vendría a ser nuestra próxima clase, adivinación.

—De verdad necesito mas fiestas—Bufo Blaise. —Extraño estar con Theo.

—Agsh yo también. —Me miró mal —La parte de las fiestas, Zabini.

—Mas te valía, chiquita. ¿Como has estado despues de todo? Te contaron que Potter le contó a todos sobre tus actos heróic-

—Si, lo hicieron. Y no fue nada, detesto que ahora me miren con compasión por el padre que tengo, quiero decir ajá, súper triste, soy conciente, pero YA PASARON QUINCE AÑOS ¿NO CREEN?.

Zabini carcajeó —Lo se, pero son nuevos en todo esto, solo mira hacia otro lado y si se te quedan mirando recuerda que es porque estas hermosa, chiquita.

—Lo sé, lo sé. Hablando de gente hermosa, Malfoy se estuvo portando excelente este tiempo.

—Realmente se estuvo esforzando por tí.—Nos sentamos juntos en unos bancos de adivinación —Nunca vi a Malfoy tenerle tanto apego a alguien, me atrevo a decir que lo enamoraste.

—Que puedo decir, dones Riddle.

—Tu padre no tiene nariz.

—¡OYE! ¡YO SI! Y hablaba de dones que comparto con Mat.

—De que estan hablando tan juntos?— Draco apareció sentandose en el medio de nosotros dos.

—De que el papá de Emy no tiene nariz.

—ZABINI BASTA!

—Buenos días alumnos!

—Buenos dias.-Hablamos todos sin ganas.

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—Hey! Emily!

Me gire en mis talones, viendo como se acercaba corriendo la figura de Harry.

—C-Como e-est-as E-emily —Estaba tratando de recuperar el aliento.

—Bien, Harry. Ven, sientate y recupera el aire.

Una vez que se calmó, retomé la conversación.

—Pues bien. Mucho mejor de lo que creí, de hecho. ¿Paso algo?

—No no, es solo que queria agradecert-

—No tienes nada que agradecerme, ni tu ni nadie. Siempre me ha nacido lo empática, y Mattheo no lo demuestra pero sé que también.

—Lo sé, hasta el sombrero seleccionador te lo dijo con la empatía.

—¿Recuerdas? Que pequeños eramos...no teníamos nada de que preocuparnos en lo absoluto.

—Si teniamos, el wingardium leviosa solo le salía a Her, esas eran verdaderas preocupaciones.

Me reí con su respuesta. —Oh si, hablando de eso, ¿como está ella? Estaba mal con Ronald la ultima vez que la vi, llorando en el baile.

—Ahora estan bien nuevamente, sacando que se ke cayó café en sus libros, siempre lo están. Me dejan a mi metido en el medio tooooodo el tiempo—Dijo alargando la "o". —Pero los amo, ¿sabes? No podría vivir ni un dia sin su presencia.

—Comparto el sentimiento con mis amigos, no se que haría sin ellos. —Ni comenté nada acerca de los libros arruinados.

—Ems, se que te va a sonar raro pero como esta Malfoy, ya sabes con-

—Alejate de aquí, Potter. Nadie te llamó.—Me di la vuelta y allí estaba Draco.

—Ems hab-

—Como te dijo?

—Harry —Me tape la cara con las manos. —Draco, cariño, solo estabamos hablando, y hasta me estaba preguntando por ti.

—Pues te respondo yo, mejor que nunca. Lucius era un ser despreciable. Ahora por favor, retirate, tengo que hablar con Ems y NI SE TE OCURRA volver a llamarla asi, Potter. Para ti es Emily, y en todo caso es EMY.

—Que histérico, nos vemos EMILY y me alegro de que esten bien ambos.—Harry se dirigió a sus dos amigos que lo estaban esperando en el patio sentados sobre una manta.

—¿Y bien? ¿Que fue eso Draco?

—Eres mía.

—Eso quisieras, y aunque lo fuera no puedo evitar hablar con una especie llamada VARONES los cuales habitan toda la maldita escuela.

—Como sea.—El sabe que no puede pelear conmigo, le doy miedo enojada, soy conciente. Fue por eso que acto seguido, cambió de tema.—Vamos a la proxima clase.

—¿Cual es?

—Defensa contra las artes oscuras.

—Genial, es de las clases mas divertidas.

—¿Te llevo el bolso?

—No hace falta, Draco, yo puedo.

—Insisto —me lo sacó de encima y lo agarró.

Pude ver sus anillos rodeando sus manos, se veían tan bien. Quisiera que me ahorquen.

Oh no, Emily Riddle tu no pensaste eso.

Pero lo hice.

Lo hice.

Mierda.

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El día terminó y llegó la hora de cenar.

—Emy, me pasas la salsa? —No podia creer lo que Rose me estaba diciendo.

—Claro que si, aquí tienes.

—Gracias. Dumbledore me habló hoy.

—¿De veras? ¿y que te dijo?

—Me mando con una nutricionista y luego con una ¿psicóloga? ¿puede ser? no lo se, solo tuve que platicar con ellas dos y me dieron varios tips para bajar de peso de forma saludable si así lo deseaba, ademas me trataron super bonito y me explicaron muchas cosas.

—No tienes una idea de la felicidad que nos estas causando al decirnos todo esto, hermosa. —Me apoyé sobre su hombro.

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Después de la cena me estaba por ir a dormir cuando tocaron la puerta.

—¡Madison, abre tu! le dije mientras me bañaba.

—Estoy yendo!

Pronto no escuché más sonidos, supuse que las chcias ya se habían acostado.

Me cambié, me cepillé los dientes y me peine.

Al salir de mi habitación me encontre con él, mirandome.

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