XXXVIII

134 18 1
                                    

Miércoles 8 de Octubre.

—Mr Luka— dijo Mrs Dupain, jugueteando mientras lo saludaba. Volteo hacia mí, y vi a Marinette ponerse tensa. Pero su madre simplemente me miro con asombro y dijo: —Mr Adrien.

No había frialdad en su tono. En realidad parecía sorprendida. Le hice una reverencia y me dirigí al lado de Marinette.

La mañana paso tranquila. Mrs Dupain llevo a las jóvenes arriba con ella mediante cualquier pretexto, y Marinette y yo nos vimos libres de hablar. Cuando el almuerzo fue servido, Mrs Dupain se sentó a un lado mío, y Marinette en el otro.

—¿Un poco de salsa holandesa, Mr Adrien?— dijo Mrs Dupain. —Tengo entendido que le gustan las salsas.

Pase mi mirada por la mesa, y vi nada más que seis salseras. Estaba por rechazar la salsa holandesa cuando vi la expresión mortificada de Marinette y me decidí a devolver la nueva civilidad de Mrs Dupain con civilidad de mi parte.

—Gracias.

Tome un poco de salsa holandesa.

—Y barnaise? La mande hacer especialmente para usted.

Dude un poco, pero puse un poco de salsa barnaise junto a la salsa holandesa.

—¿Y un poco de salsa de vino de Oporto?— dijo. —Espero que pruebe un poco. El cocinero la hizo especialmente.

Me serví un poco de salsa de vino de Oporto y mire mi plato en consternación. Mire a Marinette y la atrape riendo. Me serví un poco de salsa de bchamel, salsa de mostaza y salsa de crema también, y después me dispuse a comer mi extraña merienda.

—¿Está disfrutando su almuerzo?— preguntó Mrs Dupain solícitamente.

—Si, gracias.

—No es a lo que está usted acostumbrado, supongo.— Podía decir honestamente que no lo era.

—¿Tendrá usted dos o tres cocineros franceses, me supongo?

—No, solo tengo una cocinera, y ella es inglesa.

—¿Es su cocinera en Pemberley?

—Si, lo es.

—Pemberley,— dijo Mrs Dupain. —Que imponente suena. Me alegra que Mari haya rechazado a Mr Lahiffe, pues una casa parroquial no es nada comparada con Pemberley. Imagino que la chimenea será aún más grande que la de Rosings. ¿Cuánto ha costado, Mr Adrien?

—No estoy seguro.

—Seguramente mil libras o más.

—Debe ser difícil mantenerlo— dijo Mr Dupain. —Incluso en Longbourn, es difícil sustentar todos los mantenimientos.

Nos adentramos en una discusión acerca de las propiedades, y encontré que Mr Dupain es un hombre sensato. Puede ser negligente en lo que concierne a su familia, pero sus deberes en otras áreas son llevados a cabo responsablemente.

Debo de perdonar su presente negligencia, pues gracias a ella Marinette es como es. Su vivacidad y energía habrían sido aplastadas bajo una crianza ordinaria.

He decidido que Georgiana debe de tener un tiempo sin una institutriz o acompañante, para que pueda desarrollar su propia personalidad. Estoy segura que Marinette estará de acuerdo.

Viernes 10 de Octubre.

Marinette me ha preguntado cómo me había enamorado de ella.

—¿Cómo pudo haber iniciado?— preguntó- —puedo entender como fue avanzando encantadoramente una vez comenzado; pero ¿Qué pudo haberte inclinado hacia ello?

Pride & Prejudice  (Adrinette)Où les histoires vivent. Découvrez maintenant