Pride & Prejudice (Adrinette)

XLIII

Jueves 25 de Diciembre

Nunca hubiera pensado, cuando celebraba la Navidad con Georgiana en Londres el año pasado, que la siguiente vez que la celebrará estaría casado. Pemberley se ve muy festivo. Vegetación esta entrelazada en las barandillas, mientras acebo, grueso con bayas rojas, adornan los retratos y muérdago cuelga de los candelabros.

Nos despertamos con un olor a comida, y después del desayuno, fuimos a la iglesia. El clima era tan bueno que Marinette, Chloé y Luka y yo decidimos caminar a la iglesia mientras que el resto del grupo fue llevado en carruaje.

—Esto me recuerda a las caminatas que tomábamos cuando Chloé y yo estábamos recién comprometidos— dijo Luka, mientras crujía la escarcha bajo nuestros pies. —Aunque no hacia tanto frio.

—Tú y Chloé estaban en la feliz situación de ser reconocidos como pareja. Ustedes podían pasar el tiempo hablando entre ustedes e ignorando al resto, mientras que Marinette y yo no podíamos ni sentarnos juntos.

—Pero se las arreglaron para perderse en las veredas del campo siempre que estábamos afuera de la casa— dijo Luka con una sonrisa.

—Las veredas fueron muy útiles— dijo Marinette.

—Y nuestra madre los ayudo sobremanera, al insistir que mantuvieras ocupado a ese hombre— dijo Chloé.

—Nunca en mi vida he estado tan mortificado— dijo Marinette, pero estaba riendo al decirlo.

Llegamos a la iglesia y entramos. Nuestros invitados ya estaban reunidos, y tan pronto tomamos nuestros lugares, el servicio comenzó. Fue vivaz e interesante, lleno de buen ánimo para la ocasión. Lady Catherine se quejó de los himnos, el sermón, las velas y el libro de oraciones, pero estoy persuadido de que todos los demás fueron animados por el servicio.

Tuvimos una espléndida cena, y después de ella jugamos charadas. Caroline eligió al Coronel Le Chien Kim como su pareja, pero Marinette frustró sus tentativas de llamar su atención más tarde en la noche al invitarlo a abrir el baile junto con Anne. Hicieron una muy vivaz pareja desmintiendo las advertencias de Lady Catherine sobre Anne sufriendo un ataque de toz.

Alix bailo con Mr Hurst, e incluso Rose fue convencida de pasar a la pista, aunque protesto diciendo que el baile no era una actividad racional y declaro que preferiría sobre manera leer un libro.

Cuando todos nuestros invitados se habían retirado, nos dirigimos arriba.

—¿Cansada?— pregunté.

Como respuesta, ella levanto su mano sobre su cabeza, y vi que estaba sosteniendo una rama de muérdago.

Lunes 29 de Diciembre

Nuestro grupo se separó esta mañana. Lady Catherine y Anne fueron las primeras en irse, acompañadas del Coronel Le Chien Kim. Marinette esperaba escuchar sobre su compromiso, pero aunque Le Chien Kim y Anne habían pasado gran parte del tiempo en compañía del otro, nada había sido dicho.

Los Dupains fueron los siguientes. Por último fueron Chloé y Luka.

—Deben de venir y visitarnos en Netherfield— dijo Chloé. —Y traigan a Georgiana — dijo Luka.

Prometimos ir y verlos dentro de poco.

Al fin teníamos nuestra casa para nosotros.

—Es muy placentero tener invitados— dije, mientras el ultimo carruaje se alejaba. —Pero es mucho mejor el verlos partir.

Regresamos a la sala de estar. Georgiana y Marinette pronto iniciaron a revivir la visita, hablando sobre quienes habían visto. Georgiana se aventuró a hacer un comentario chistoso acerca de Lady Catherine, y después me miro para ver si había sido ofendido. Al ver mi cara, la suya se relajó. Había perdido ya mucha de su timidez, y estaba en camino de convertirse en una joven dama segura y confiada. Por esto, y por muchas otras cosas, tenía que agradecerle a Marinette.