Capítulo 36

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RETOS PESADOS:

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RETOS PESADOS:

Tal vez soy demasiado sensible, pero tu indiferencia es como una herida con sal. Tal vez soy demasiado sensible o tal vez nunca te importé en lo absoluto. Bueno, bien por ti, te ves sano y feliz. Yo no lo estoy, por si alguna vez quisiste preguntármelo. Bien por ti, te esta yendo muy bien sin mí, cariño, como un maldito sociópata.


Bitácora del progreso de una porrista con el corazón roto: puede ser peligrosa.

Con el transcurrir de los días los lamentos, tristezas y lágrimas habían quedado en el pasado, siendo sustituidos por una rabia cruel y visceral que me mantenía cabreada con el mundo la mayoría del tiempo.

Entre todo y todos estaba la constante negativa de Aiden de acercarse a mí, por un lado quería darle su espacio, dejarlo meditar la situación y acostumbrarme al hecho de que nuestra separación era temporal, algo pasajero y del momento, pero por otro me aturdía la idea de que no fuera algo momentáneo y que las cosas se mantuvieran rotas para siempre entre nosotros.

Por días intenté acercarme a él en clases y su respuesta había sido la misma, alejarse sin permitirme siquiera decir palabra. También estaba el factor Amanda, el regreso de las interminables pesadillas, la muerte sin resolver de Stacy y el asesinato de Miranda.

Mi cabeza seguía dándole vueltas a sus palabras de la última noche. Darme aquello que tanto deseaba, aquello que cortaría mis cadenas y que me haría libre para siempre, pero la jodida perra había terminado muerta y desangrada.

—¿Crees que tiene razón? —Murmuró Sidney a mi lado, sin despegar la vista de la pantalla de su celular, sacándome del revoltijo emocional que estaba viviendo en mis pensamientos.

El entrenamiento siempre era una mierda, pero se sentía aún peor cuando tenías a una muy cabreada Samantha gritando órdenes y debías sonreírle para evitar mandarla a la mierda. Esa tarde todas nos encontrábamos sentadas en los palcos, discutiendo con la típica charla matutina del concurso de fin de año de la belleza del campus y de las futuras actividades de la competencia estatal de animación para finales de la temporada. Era muy fácil creerte la jefa cuando la reina de la colmena estaba lesionada y sentada como las otras obreras con un gesto de aburrimiento y la mirada perdida en su teléfono.

—¿Ah? —Articulé confundida, no sabiendo a qué se estaba refiriendo ella.

—A las eliminatorias, Kira. La competencia estatal, ¿recuerdas? —La voz de Hannah sonó detrás de mí, haciendo que me girara para verla, esta tenía una expresión vehemente en el rostro, tal vez se debía a mi falta de atención.

Tenía la cabeza en otro lado y no podía conectarme con el mundo exterior, por lo que simplemente negué con la cabeza y dirigí la vista hacia Samantha, quien se encontraba de pie parloteando en medio del gimnasio, cuando hicimos contacto visual, una de sus cejas oscuras se elevó en mi dirección y en un segundo después estaba dejando de hablar para darse cuenta de lo que estaba pasando entre nosotras en los palcos y añadir:

Mátame Sanamente Where stories live. Discover now