Capítulo 14: Festival

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Los preparativos de fin de año estaban haciendo que Yoo Jonghyuk estuviera más ocupado. Como si su trabajo anterior no fuera suficiente, tuvo que encargarse de los preparativos para el banquete de disfraces anual el primer día del año.

Al contemplarlo, el príncipe heredero quiso pedir ayuda a su prima, ya que ella era bastante buena para hacer el trabajo. Pensando en ello por un momento, Yoo Jonghyuk hizo un gesto hacia Hyunsung mientras sostenía los papeles que contenían los preparativos del banquete.

"Envía esto a Lady Yoo Sangah." No necesitaba pensarlo mucho, ya que esa dama probablemente siempre estaba libre. Las personas de la familia que no fueran los jefes siempre eran libres, si no consideraba las fiestas del té como un trabajo.

"Entendido ¿Vas a visitar al Príncipe de nuevo hoy?" Preguntó Hyunsung con un poco de curiosidad.

"No, no creo que lo haga. Tendré que dejarlo en manos de los niños y Jung Heewon." En las últimas semanas, Yoo Jonghyuk vio que los niños y Yoo Mia se estaban llevando bastante bien.

A menudo se entrenaban entre ellos y, sorprendentemente, los dos sirvientes estaban a la par de Yoo Mia en términos de habilidad.

"Ya veo. Le llevaré esto a Lady Yoo Sangah entonces." Dijo Hyunsung con una leve sonrisa, mientras salía de la oficina del príncipe heredero.

La habitación se quedó en silencio, no se escuchó nada más que los rasguños de la pluma contra el papel y los ruidos del sello real al presionar un papel.

Por más aburrido que fuera, Yoo Jonghyuk no tenía otra opción. Con su pobre excusa de padres y la falta de parientes mayores además de la familia del Marques Yoo, solo podía hacer la mayor parte del trabajo por sí mismo.

Una semana antes del festival, lo único que había que hacer era el banquete de disfraces. Yoo Jonghyuk estaba seguro de que Yoo Sangah haría todo bien.

'Espero que el príncipe se despierte a tiempo para el festival.' Si bien la condición del Príncipe mejoraba a medida que el Gran Sabio le había infundido su maná, era difícil verlo despertar antes o justo a tiempo para el festival.

Yoo Jonghyuk no quería preocuparse más por eso. Si bien sería mejor que se despertara a tiempo para el festival, ya era suficientemente bueno que estuviera mejorando.





Estaba oscuro. Tan oscuro. Kim Dokja no podía ver ni sentir nada.

'Miedo. Tengo miedo.' Quería llorar, pero estaba completamente oscuro.

'Madre... Padre...'

El joven príncipe intentó gritar, pero no pudo escuchar su propia voz. Su visión comenzaba a iluminarse, pero en lugar de esperanza, le dio una sensación de pavor.

Era su casa. No, era el lugar del que huyó. Todos los que estaban allí lo miraron con recelo, entonces, ¿Cómo no podía odiar ese lugar?

Una vez más, los niños de su edad se negaron a acostarse con él, y solo se rieron cuando lo golpearon con piedras y palos, convirtiéndolo en un juguete títere solo para su uso.

Luego, estaba la pareja de humano y elfo. Ellos también eran como él, ¿no es cierto? Condenado al ostracismo y odiado por todo el mundo.

Pero, incluso en esas circunstancias, jamás podría olvidarlo. El toque de una recién nacida que posiblemente podría crecer como él, una niña pequeña como él, que no conocía nada del mundo y se mantuvo puro e inocente, a diferencia de él, que se vio obligado a crecer y madurar.

Cómo reescribir una novelaWaar verhalen tot leven komen. Ontdek het nu