Capítulo 7

17 8 0
                                    

-¿Qué hace él aquí? -murmuro para mí
-¿Quién? -Miro a mi lado y veo Alexa
-Kenneth -Ella sabe quién de quien hablo porque le hice la historia de nuestro primer y segundo encuentro.
-Oh en serio, donde está quiero verlo
-En la barra del bar, mira disimuladamente que te conozco -Vuelvo mi vista hacia donde se encontraba hace un momento pero ya no está
-Amiga acaso pediste el gusto, dime que no es ese -dice señalando a un señor que nos mira porque Alexa no es nada discreta cuando la señala -bajo su brazo con el que apuntaba y la volteo por los hombros hacia mí -para ser sincera su mirada me provocó escalofríos-dice risueña -tenías razón sí que tiene una mirada intensa
-Estás loca, ahora ese tipo va a pensar cosas que no son, no seas boba ese no es, no sé a dónde fue -le digo
-Es una lástima, quería ver si realmente era un bombón como decías
-¿Buscas a alguien Abigail? -dice una dulce en mi oído, oh no, dios de la vergüenza ven y llévame contigo, trágame tierra, miro a un lado y está el ahí con una sonrisa gigante donde se le marcan los hoyuelos, haciéndolo ver aún más hermoso, si antes era bello, así es perfecto, es que no se cansa de verse radiante. Porta un traje como siempre, la diferencia es que no lleva corbata y su camisa tiene par de botones abiertos, eso lo hace ver sexy.
-Entonces, ¿Quién es ese bombón del que hablan? Me hacen sentir un poco celoso -No, porque tuvo que oír eso, qué vergüenza siento, imagino mi rostro rojo como un tomate, algo muy difícil de conseguir en mí, pero que él logra demasiado.
-Eh... nadie -consigo decir, él me mira y se ríe.
-Hablábamos de un chocolate, delicioso y sabroso que nos apetece comer, pero no sé si venderán eso en la barra -Estoy atónita ante la respuesta descarada de mi amiga, que imagino sepa quién es el caramelito que tenemos en frente
-Alexa, Abigail este es mi amigo Kenneth, les dije que estaba en la barra-interviene Martin, colocándose junto a Ale, veo como sus manos se unen y ella sonríe como niña pequeña cuando lo ve
-Mucho gusto Kenneth, he escuchado mucho de ti -dice Alexa, la atravieso con la mirada pero me ignora
-Lo mismo digo y feliz cumpleaños-Saca una pequeña cajita de uno de los bolsillos de su pantalón y se lo entrega
-Gracias, no tenías que molestarte -Abre la caja y dentro hay unos diminutos pero bellos pendientes, mi amiga voltea la caja hacia mí
-Este chico tiene muy gusto -dice riéndose y agradeciéndole una vez más pero solo yo entendí que no se refería a los aretes solamente con su frase.
-Ella es mi mejor amiga -dice la muy descarada como si no supiera que nos conocemos, mi amiga es muy buena actriz-Bueno ya Martin te dijo su nombre
-La conozco, trabajamos juntos.
-Oh en serio no sabía nunca ha hablado de ti -Creo que se está pasando con su actuación de no te conozco, no tengo idea de quién eres
-Amor ¿Quieres ir a bailar? -Le dice Martin a Alexa, y yo me sorprendo por como la llamó
-Pensé que nunca lo pedirías -Le contesta entre risas, veo como se marchan a la pista y nos dejan solos, Clark también está en la pista con una chica que acaba de conocer son muy claras las intenciones de Martin y las de su novia.
Me doy la vuelta y me dirijo a la mesa donde hay una botella, tomo un vaso le añado hielo y me sirvo whisky me doy un trago y trato de contener una mueca por lo fuerte que está la bebida, no sé ni porque acabo de hacer esto si yo odio el whisky, creo que es mi necesidad de huir de su lado y de su intensa mirada.El me imita, se sirve su whisky y me mira en todo el proceso.
-Bueno y por qué brindamos -me dice
-No lo sé, dime tú-respondo sin más porque realmente no me interesa hacer un brindis
-Brindo por -Se queda pensativo pero a pesar de eso me mira con mucha diversión, disfruta hacerme sentir así, incómoda, ponerme contra la pared -. Brindo por ti y por mí-Nuestros vasos chocan y tomo el líquido ámbar de una sentada-Aunque me gustaría más si nos incluyera juntos
No soy tonta sé que le gusto de una forma que no quiero gustarle a nadie. Estoy muy clara en mi posición de cero relación pero tampoco puedo negar esto que me hace sentir esa tensión que siempre hay a nuestro alrededor. Pero tengo miedo a caer y a quemarme, no me gusta jugar con fuego, porque siempre hace daño.
Doy un largo suspiro -¿Qué pasa si yo no quiero eso? -le digo muy seria
-Sabes que si quieres, pero soy un caballero y seguiré fingiendo que no sé qué provoco estragos en ti, te dejaré brindar por lo que desees
-Por ti por mí, bien lejos el uno del otro -digo mientras me sirvo y doy un sorbo de mi trago, el hace lo mismo pero no llega a tomar del vaso, solo me mira con una risa en los labios
-No me gusta, porque así no sea -Choca nuestros vasos y luego bebe, yo me volteo y antes que él pueda hablar decido salir de aquí
-Iré con Alexa -digo y me encamino a las escaleras que me llevan a la primera planta sin darle oportunidad de hablar
Alexa ya no está en la pista de baile la busco y la veo al final de la barra
-Hola perra mentirosa -me dice cuando me ve
-Hola a ti descarada -le contesto divertida
-Olvidaste mencionar que el bizcocho estaba extremadamente bueno -ruedo los ojos y la ignoro
-¿Dónde está Martin?
-Fue al baño y como no quería interrumpirte con tu bombón decidí esperar aquí
-No es mío, deja de hablar de la gente como si fueran objetos -Sigo sin entender su necesidad de ponerle un dueño a las personas -además no hay nada que interrumpir
-Te hacían fueguitos artificiales los ojos
-Por favor dime que es broma -digo riendo
-Claro q no, pero tranquila él se veía tan feliz como tú.
-¿Quieres tomar algo?
-Sí lo mismo que tú quieras -Pido dos tequilas y dos Cosmopolitan
-Niña es que me quieres emborrachar -dice riéndose
-No pero el tequila es para aquí y ahora lo otro es para ahorrarme el trabajo de caerle a tras al camarero y poder irnos a bailar
-Entiendo, don bombón te puso nerviosa y vas ahogar los nervios con el alcohol, borracha
-No es cierto, bueno un poco si, brindó por nosotros juntos, es que está loco, ni siquiera me conoce
-Pero tú si quieres eso, solo que te niegas aceptarlo por tu historia de que no quieres nada con nadie y bla, bla, bla, me lo sé de memoria y es mi cumpleaños, así que solo por hoy vas a ir y olvidar todo eso y vas divertirte, no quieres nada serio pero un poco de acción no está mal, te van a salir telarañas allá abajo.
-Qué exagerada eres -digo riendo pero sé que tiene razón en todo lo que dijo.
-Dime cuándo fue la última vez que tuviste sexo
-El tiempo no es relevante, no pienso hacerlo con un desconocido o una mierda de persona
-Pues qué suerte, porque a Kenneth lo conoces, ah y adivina por lo que sé de él es un encanto de persona-Llegan nuestros tequilas y los tomamos rápidamente, cogemos nuestras copas y nos dirigimos a nuestra mesa
-No te justifiques solo disfruta el momento por una vez en tu vida-no le respondo, ella va hacia Martin y se sienta a su lado
-Pensé que ya no estarías aquí -Le digo a Clark mientras me siento a su lado y tomo de mi trago.
-La muy zorra tenía novio y se le restregó a mi hermano mientras él iba por unas bebidas
-¿Qué? -digo con sorpresa
-Como lo oyes -dice Clark. Doy un sorbo de mi trago y recuerdo que hace un momento Kenneth estaba aquí pero ya no está, pero como si lo llamara con el pensamiento llega riendo con un desconocido que luego de darle la mano se marcha.
-Traje una botella de champán para la cumpleañera
-Lo mejor para mi chica -dice su amigo que se levanta a abrirla, Alexa se levanta y se lanza a sus labios por un beso.
Kenneth se sienta a mi lado y en el proceso me guiña un ojo, siento una rabia enorme por un gesto tan simple. Le doy otro sorbo a mi trago personal, al final decido tomar todo lo que queda en él, me recuerdo que debo para o pronto terminaré arrestándome por borracha. Siento un calor que me abraza y recorre cada centímetro de mi cuerpo, no sé si son las mezclas que hecho hasta ahora o simplemente es por tener tan cerca a este bizcocho, pero yo prefiero creer que es el alcohol.
Alexa me llama y me da una copa con el champán, me alegra tanto verla feliz. Ella tenía razón, Martin si es el indicado ambos se ven felices y aunque no lo conozco parece que es buena persona y se interesa por ella en cada instante, la mira distinto a como suelen hacer las citas que frecuenta tener.
-¿Por qué brindamos? -pregunta Martin
-Por mi cumpleaños -Le sonríe y asiente y como un hermoso grupo alzamos las copas para chocarlas y bebemos.
De repente empieza a sonar Girl in theDress, amo esa canción, es de mi banda favorita, así que tomo de la mano a Clark y le pregunto si quiere bailar conmigo, me dice que no le apetece ir ahora porque está mareado, así que anuncio que me iré a bailar y como tengo afán en llegar a la pista rápidamente empiezo a caminar pero siento como me toman el brazo por acto reflejo jalo de él para alejar el toque de la persona que sea, siento como me vuelven a alar y miro hacia atrás y ahí está el hombre de la barra que me provoca escalofríos y no precisamente por algo bueno, me mira de un modo asqueroso y tira de mi tan fuerte que me es imposible liberarme, una mano me cubre por la cadera, aunque al principio me asusto finalmente veo un rostro que aunque vea poco conozco muy bien.
-Todo bien cariño -dice Kenneth mirando muy serio y fijo al hombre que al verlo me suelta, miro mi muñeca y tengo sus dedos marcados de lo fuerte que me presionó
-Disculpa creo que te confundí con alguien más
-Si ese es el caso ya puedes largarte -El hombre lo atraviesa con la mirada y desaparece entre la multitud
-Gracias
-¿Estás bien?
-Sí, solo un poco asustada pero ya pasó
-Tranquila, me encargaré de que no se te acerque nuevamente
-Gracias ¿Quieres bailar? -Sonríe y asiente, como realmente quiero bailar esta canción lo tomo por la mano y lo llevo hasta la pista de baile.
Aún suena mi canción, así que muevo mis caderas al ritmo de esta, es una canción sucia, alegre y con mucho doble sentido. Kenneth baila realmente bien, pone su mano en mi cintura y me atrae aún más hacia él, nuestros cuerpos se mueven muy coordinados, cada parte de mí se va calentando y la adrenalina que aparece con su presencia viene a míuna vez más. Al estar tan pegados, siento su perfume y es realmente delicioso entre sus ojos y ese exquisito olor podría perderme sin poder detenerme.
La canción acaba y ponen una totalmente distinta, esta vez la música es suave y delicada. Me detengo por un momento al no saber qué hacer pero siento una mano a cada lado de mi cintura y me voltea provocando que termine frente a él que me sonríe y empuja sobre sí, coloco los brazos alrededor de su cuello y me digo que por nada del mundo puedo mirarlo.
Me saca un buen tramo, sigue siendo más alto que yo aunque lleve zapatos de tacón.
Nos movemos al ritmo de la música, en un principio estoy muy tensa, él parece darse cuenta y una de sus manos empieza recorrer muy suavemente mi espalda es un simple gesto pero milagrosamente consigue que quede más tranquila. La música acaba y no lo noto al estar tan metida en mis pensamientos.
-Vamos por un trago -dice muy pegado a mi oído.
-Si vamos -Estoy dispuesta a alejarme para empezar a caminar pero él me toma la mano y nos guía a la barra.
-¿Qué te gustaría beber? -me pregunta
-No lo sé, algo dulce -Pide un whisky para él y otro Cosmopolitan para mí, pronto debo parar de beber ya siento como el alcohol empieza su efecto y no quiero ser la borracha de la fiesta o hacer alguna locura, mucho menos cuando tengo a alguien tan bueno y guapo cerca de mí.
-Toma -me dice mientras me ofrece el trago lo pruebo, es realmente exquisito -. Esta vez ¿Por qué brindamos?
-Hay que brindar cada vez que tome un trago -doy un sorbo a mi bebida mientras lo miro, él igual tiene su mirada en mí y pasa la lengua por sus labios, es un gesto tan simple pero provoca tanto, creo que todo lo que este hombre haga lo hará ver sumamente sexy, desvío la mirada a otra parte que no sea sus labios.
-Me gusta ponerte en apuros -me dice acercando su rostro al mío
-¿Quién dice que lo estoy? -digo colocando mi copa en mis labios y se ríe
-Lo estás siempre que estoy cerca, del mismo modo en que lo estoy yo cuando te veo.
-Mejor vamos a bailar -le digo mientras le tomo de la mano y arrastro hasta pista de baile.
A mitad del camino él se detiene y me ala sobre él, nuestras miradas se encuentran, es la primera vez que decido por decisión propia posar mi vista ahí en sus ojos y me arrepiento al momento.
-Lo siento mucho Abi -me dice
- ¿Por qué? -pregunto
-Por esto -Una mano va a mi cuello y la otra a mi espalda baja y sus labios van a los míos en un principio solo es un suave roce, luego el ala de mi labio inferior y por instinto abro mi boca, le sigo el beso como no hacerlo cuando me encanta este hombre, el mordisquea mi labio y luego su lengua juega con la mía. Siento su sabor a whisky y para nada me desagrada, me besa lentamente como si quiera conocer cada detalle de mi boca, lentamente voy subiendo una mano por su pecho hasta llegar a su cuello y lo atraigo más a mí, esta vez el beso es más profundo, con más pasión hasta que no me queda de otra que dejarlo ir porque necesito aire para respirar, nuestras frentes se juntas.
-Lo siento preciosa pero explotó
Yo no contesto simplemente me giro y comienzo a bailar, él hace lo mismo pero a cada rato una de sus manos recorre mi cintura o me besa suavemente el cuello, eso provoca estragos en mi parte baja, esto es lo que trato de evitar.
Al rato le digo de ir por una bebida, pero me acompaña y no se separa de mi ni un instante, quisiera decir que me molesta pero no es verdad, me gusta sentir como se centra en mí, a medida que pasa el tiempo más libre me voy sintiendo, nos besamos hasta el punto que no nos podemos despegar, bailamos y con cada rato que pasa más vueltas da mi mundo, pero sé que él se siente justamente como yo, porque entre risas me lo dice, estoy a punto de perderme entre tanto alcohol y esta dulce tentación que no me suelta ni un instante, me olvido de todo y por primera vez en mucho tiempo me dejo llevar.
⊱✿⊰
Tengo un dolor de cabeza horrible, me duele todo mi cuerpo abro mis ojos lentamente y automáticamente los cierro por una luz que me molesta necesito varios intentos para poder abrirlos bien.
Miro a mi alrededor pero no reconozco donde me encuentro, trato de recordar cómo llegue aquí pero nada viene a mi mente.
Hago un repaso de la noche en mi mente, cumpleaños de Alexa, en un club estábamos Martin, Clark y... oh dios y Kenneth, cierto, él también estaba ahí. Recuerdo que hablamos, bailamos, bebimos y.... nos besamos una vez... no, tacha eso, varias veces... pero ya hasta ahí llegan mis recuerdos.
Estoy muy confundida, miro a un lado y hay un hombre muy musculoso. Mi primer pensamiento es que hecho, no sé quién es este no le veo el rostro por la almohada que se lo cubre y la mayor parte de su cuerpo está cubierto por una sábana, lo miro tratando de reconocer algún detalle y noto que en un brazo tiene un tatuaje son dos pequeñas letras, sigo sin recordar y sin entender quién es la persona que está a mi lado, tampoco pienso despertarlo para preguntarle.
Decido pararme y me alegro al ver que no estoy completamente desnuda llevo mi sujetador de encaje y mis bragas a juego.
Sin hacer el más mínimo ruido o movimiento brusco me levanto de la cama y me pongo rápidamente mi ropa que para mímala suerte está esparcida por el piso.
Decido que debo huir rápidamente, no sé quién es este tipo, no lo conozco de nada y tampoco quiero hacerlo, no deseo pasar la vergüenza de que me pregunte algo y note que no recuerdo nada y creo que en cierto modo es mejor así. Una vez vestida, tomo mi bolso y reviso que todo esté en él, tomo los zapatos y salgo de la habitación del hotel.
Al salir me coloco mis zapatos, busco mi celular tengo treinta llamadas de Alexa y veinte mensajes preguntándome donde estoy.
Por un momento pensé que ella sabría darme respuesta de quién es la persona con la que pasé la noche, pero el hecho que ella no sepa me provoca un escalofrío.
Mil preguntas pasan por mi cabeza pero mis alarmas suenan cuándo ni siquiera sé si usé o no protección con esa persona, estoy aceptando que hubo sexo por como amanecí casi sin ropa y por el hecho de que me encuentro en un hotel.
Me dispongo a salir de aquí e ir directo a una farmacia a comprar la pastilla del día después, tengo tan mala suerte que hasta podría ocurrir lo improbable y terminar con un hijo que no deseo y de un desconocido. Luego sacaré turno para hacerme análisis, no quiero ni pensar en las miles de enfermedades que existen. Ahora solo pido y espero que aunque haya tenido sexo con un desconocido mi yo borracha se haya preocupado por no contraer una enfermedad. Maldigo para mis adentros, muy Alexa objetivo conseguido, ya tengo una vagina desempolvada y sin telarañas. Camino a la recepción para llamar a un taxi.
Demasiados problemas para una mañana, y mi dolor de cabeza cada vez se pone peor.

Lluvia de BesosWhere stories live. Discover now