◖ 𝘚𝘐𝘕𝘕𝘌𝘙 ◗ - 𝙉𝙖𝙣𝙖𝙩𝙨𝙪 𝙉𝙤 𝙏𝙖𝙞𝙯𝙖𝙞 -

◖74◗

７４　—
Ｅｌ　Ｒｅｙ　Ａｒｔｈｕｒ　Ｐｅｎｄｒａｇóｎ　
Ｙ
Sｕｓ　ｓｅｎｔｉｍｉｅｎｔｏｓ　ｐｏｒ Ｅｌｌａ　
な英たら演
衛鉛鋭ヤ威

"Salía todas las noches
Y, nena, está bien
Te dije que no importa lo que hicieras
Estaría a tu lado."

( Aclaró que los sucesos narrados en estes Capítulos transcurrirán entre los Capítulos 62 y 80 del Manga original, contando todos aquellos por medio, ya que algunas partes serán saltadas por cambios de vista a otros personajes y su historia en ellos.
Por si a alguien le interesa dar un pequeño repaso a todo lo que pasa por esos capítulos para enterarse mejor :).)

Sin más, lamentando la tardanza y este aviso,
𝕮𝖔𝖓𝖙𝖎𝖓𝖚𝖊𝖒𝖔𝖘 𝖈𝖔𝖓 𝖑𝖆 𝖑𝖊𝖈𝖙𝖚𝖗𝖆.

Hubo un segundo de silencio, donde lo único que sonó fue el leve tintineo del metal al chocar entre si.

Y luego, todo sonó a la vez.

Una gran ola de poder casi irreconocible, un gran rugido con la palabra Maldición en ella y el fuerte portazo de la puerta principal de la taberna cuando Meliodas salió de esta mas rápido que un rayo con su nueva espada envainada entre las manos.
Copiando a su Capitan, los demás Pecados también salieron por la puerta abierta de par en par, aún con el sentimiento de ese extraño poder emitido del rubio chocar contra sus cuerpos. Ese poder que ya habían sentido una vez, no hacía tanto, y que no había aventurado nada bueno para ninguno de ellos.

— ¿¡Esa bastarda era un Caballero Sagrado!?— Soltó Ban tan pronto pasaron la puerta, con sus manos en los bolsillos pero su ceño profundamente fruncido. Vaya que si estaba fruncido, no estaba contento, nada nada contento.

— No estoy seguro.— Contesto monótonamente Gowther, al lado del albino, con su rostro totalmente limpio de cualquier expresión.— Sin embargo, esa fue una técnica de tele-transportación de alto nivel. . . El usuario apareció y desapareció en el lugar preciso.—

Por otra parte, Diane ante todo el barullo presentado en un momento, se acerco preocupada, con sus cejas fruncidas. Sus pasos hicieron temblar el suelo bajo si misma.— ¿¡Que paso!?—

King, claramente fue el primero en acercarse a ella, con un rostro pálido.— ¡Némesis y Elizabeth fueron raptadas!—

La gigante puso una de sus manos sobre su boca, incrédula, sus violetacios ojos expandiéndose de la sorpresa — ¡No puede ser! ¿¡A donde las llevaron!?—

Esta vez fue Meliodas quien contesto en un profundo exclamo, con su rostro fruncido en molestia y preocupación.— ¡Al reino! ¡Iré a rescatar a Elizabeth y a Némesis inmediatamente!— A pesar de tener la molestia en su rostro, sus hombros ancheados ante la tensión y el fuerte agarre que tenia sobre la vaina de la espada de Liz, en su mente se repetía una y otra y otra vez que ambas estaban bien, que estarían bien e iban a estar bien. . . En serio quería pensar en eso y no en lo que realmente atentaba sus pensamientos.

— ¿¡QUE!?— Soltó King detrás de él, alzando las manos— ¡Estamos a cuarenta millas del Reino!—

Sin embargo, ante eso, Meliodas solo se giro para encarar a Diane.— ¡Diane!— Llamó, recibiendo inmediatamente su atención.— ¡Cuento contigo!— Ella respondió con un confuso ¿Que? Y una insegura asistencia con la cabeza, sin entender del todo que pasaba por la mente de su Capitán en estos momento, pero asegurada a ayudar con todo lo que pueda.