◖ 𝘚𝘐𝘕𝘕𝘌𝘙 ◗ - 𝙉𝙖𝙣𝙖𝙩𝙨𝙪 𝙉𝙤 𝙏𝙖𝙞𝙯𝙖𝙞 -

◖56◗

56—
Ａｎｉｑｕｉｌａｃｉóｎ．　
往宛永

"Si te dijera lo que soy
¿Me darías la espalda?
Aún si pareciera peligroso
¿Tendrías miedo?
Me da la sensación, sólo porque todo lo que toco no es lo suficientemente oscuro que el problema se encuentra en mi."

Jadeo, sus manos comenzaron a temblar con fuerza.

Sus ojos estaban abiertos de par en par, y tan pronto como el rubio despareció de su vista, cayó al suelo de rodillas, segundos después de conseguir ponerse de pie correctamente. Su cuerpo comenzó a temblar con fuerza sintiendo la necesidad de comenzar a vomitar tan solo por los roces de su propia piel.

No era miedo, su cuerpo temblaba, simplemente, por que no sabía que hacer para poder sentirse bien.

Jadeo de nuevo, sentía su garganta apretada, la bilis subiendo, y su vista difusa. Oxidadas agujas de recuerdos comenzaron a arañar sus pulmones y corazón.

– Ah...– Salió un leve quejido de su boca, sus uñas comenzaron a rascar su cuello de forma agresiva, dejando lascivas marcar rojas por donde estas no paraban de pasar, una y otra y otra vez.– Me toco...– Comenzando a susurrar incoherencias, marcas rojizas de sus uñas comenzaron a aparecer en su pálido cuello, compitiendo con la rojez del mordisco que Meliodas había dejado allí.– Me tocó... que asco.– Dejando su cuello, su cuerpo comenzó a balancearse de forma suave, rascando y pellizcando de forma bruta sus brazos al sentir su cuello hincharse por las rozaduras y completamente rojo– Que asco...que asco, que asco, que asco.– Aún sin siquiera pestañear, sus ojos estaban fijos en sus pies, totalmente enturbiados y rojizos. Sentía la extraña necesidad de hacerse daño, de sentirse ella misma, de sentir que su cuerpo era suyo en verdad, solo podía observar la inexistente sangre en cada pequeño poro de su piel.

Murmullos apagados, completamente fuera de si, uñas rojizas por la piel arrancada.

–...sucia, sucia, sucia...– Llevando sus manos a su cabello, su cuerpo comenzó a moverse de manera más rígida y ladeante, inclinándose hacia adelante y atrás con fuerza– Estoy sucia.–

Su cuerpo comenzó a reaccionar disiociativamente, siendo esto un mecanismo de defensa, para luego, un ardiente deseo de destrozar todo y a todos con ella misma incluida comenzaron a reptar por su pecho, dirigiéndose directamente a su maltratado e insano cerebro.

La ira inundó cada pequeño lugar de su cerebro, era eso, o el llanto desenfrenado que había dejado de lado cuando era más joven, siendo ese sentimiento autodestructivo lo único que la salvaba. Su cabeza comenzaba a reaccionar solamente a base de estrés, de ira, de trauma, no era capaz de controlarse en esos momentos.

Una pequeña cuchilla comenzó a levitar fuera de su vacío estuche, donde se debería encontrar su daga pero no estaba.

– Ah, estoy sucia.–

◖ ѕ ι η η є я ◗

– ¿Estas...asustada de mi?– Sus ojos mostraban miedo en estado puro, miedo a que la joven chiquilla entre sus fuertes brazos se escapara, que su mano alcanzara el pomo de la puerta– Dijiste que era especial...No me puedes hacer esto.–

No
No
No
No...

No me puedo alejar de él.

– No te separes de mi... por favor, quédate conmigo.– Sus largos y grandes dedos apretaban cada vez con más fuerza su pequeña cadera y su otro brazo todo su pecho al tener su brazo cruzado en este.