La hija de Steve Mcgarrett

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Steve pov

Dejé a Stace dormida en mi despacho y fuí al de Danny, para hacer algunas llamadas a sus tíos y darle la autorización de que los visite algunos días, pues tal vez le sirva de terapia y este mejor.

Ella los ama bastante y creo que un cambio de aires le vendría bien, solo me preocupa que venga haciendo otras de las malas costumbres de su madre, pero debo dar gracias a Dios que solo fuma cigarros y no otras cosas.

Marqué el número correspondiente y el teléfono comenzó a sonar y solo espero que Erick quien es el mayor de sus tíos me conteste.

- ¡Hola!, ¿con quién tengo el gusto? - respondió una mujer al otro lado.

- Hola, habla el capitán de fragata Steve Mcgarrett, ¿este es el número de Luke? -pregunté pensando que había colocado algún dígito incorrecto.

- ¿Steve? - preguntó la misma mujer al otro lado de la línea.

- Soy Eleanor, ¿no me recuerdas? -dijo la madre de mi hija.

- Ah, ¿Cómo has estado? - pregunté por cortesía, no hablaba con ella hace muchos años y tampoco tenía planes de volver hacerlo.

- Estoy bien, gracias por preguntar, ¿tú que tal?, ¿Qué tal Stace? - me preguntó con algo de euforia y no entiendo el porqué.

- Ambos estamos bien, agradecemos tu preocupación, ¿puedes decirle a Luke que me llame?. - dije, para culminar la conversación.

- No te preocupes, ya viene y se lo paso.

- De acuerdo, gracias. - y escuché decirle algunas a cosas a Luke y luego él al parecer tomó el teléfono.

- ¿Qué hay Mcgarrett? - dijo el tio de mi hija emocionado, con ellos si me llevo bien, ellos si cuidaron bien a mi hija y velan siempre por ella.

- De lujo, ¿Cómo te va a tí? -dije ahora sonriendo

- Excelente, no puedo quejarme. - dijo feliz. - Por cierto, es raro que me llames, disculpa la poca cortesía pero ¿a qué se debe la llamada del gran Mc? - me preguntó dudoso y le doy la razón, no suelo llamarlos y le pregunto a Stace por ellos y les mando saludos.

- Me alegra, pues veras hace algunos días Stace tuvo un pequeño percance en la escuela y está en proceso de recuperación, físicamente se encuentra casi recuperada, pero mentalmente no va ni por la mitad.

- ¿Adivino? - dijo interrumpiendome. - ¿quieres pedirme permiso para dejar a Stace unos días aquí? - dijo muy feliz.

- Efectivamente, ¿Cómo supiste? - le pregunté al extrañado.

- Mcgarrett te conozco más de lo que crees. - dijo riéndose. - no llamas muy seguido y cuando lo haces tiene que ver con Stace, solo es cuestión de análisis y atar cabos.

- ¡Como  digas! - dije riendo igualmente y justo en ese momento entró Danny. - por tu emoción asumire que dijiste que sí.

- ¡Claro!, en el próximo vuelo di deseas, es mi sobrina y jamás le diría que no y no me llames para pedirme permiso, tu preguntas ofenden. - dijo en tono recto, pero sabía que era broma.

- jajajaja, ¡como quieras!, compraré el vuelo y te dejaré saber y no le digas, le diré más tarde para que sea sorpresa.

- Gracias por tomarnos en cuenta Steve, envíame la información, le diré a su otro tío para que vayamos planeando las actividades.

- Gracias a ustedes por la oportunidad. - dije muy agradecido. - voy a colgar cuando tenga todo listo te aviso.

- Bueno!. - Le devolví la despida y colgué.

Danny me miraba con una cara extraña y yo sólo hice un gesto con los hombros.

- ¿Qué hiciste en mi ausencia? Y ¿por que estas en mi despacho? - pregunto con su típico sarcasmo.

- Stace se durmió, así que vine a tu despacho para llamar a su tío y cumplir su sueño.

- ¿De qué diablos hablas Steven?

- Bueno, hablé con ella me dijo como se sentía y rechazó la idea de ir a terapias,  pero me dijo que quería ir al continente a visitar a sus tíos y recuperarse allá. -dije poniendo cara de "obvio".

- ¿Estás seguro de enviarlo con ellos? - me preguntó, pero sabía que no lo hacía por ellos, sino por ella.

- Bueno, no puedo impedírselo toda la vida, además Stace me dijo que su madre le dijo algunas cosas que aún yo no logro superar y a Stace parecen no afectarle, aunque gracias a ella fuma, pero no negaré que me da miedo enviar a mi hija y que luego adquiera una maña nueva impuesta por su madre.

- Debo admitir, que no estaba de acuerdo en que lo hicieras pero esto va más allá de lo que yo quiera, solo espero que Stace realmente se mejore y si tu confías en ellos, pues yo también confío, pero si algo le pasa a mi sobrina estando con ellos les partiré la cara con malasadas guardas de cinco días. -dijo bromeando. - Por cierto, ¿llevaras a Stace a la cena con Denning o no?

- La estaba olvidando. -dije resoplando. - pero creo que si iremos un rato, no creo que Stace quiera durar mucho

- Yo creo que le hace bien, ha estado mucho en casa además puede distraer su mente y se vestirá elegante y como siempre desatará el caso robando miradas, entonces eso le sube la autoestima porque muy en el fondo sabemos que le incomoda que miren su cicatriz.

- Lo sé, me lo dijo, ya ni quiere usar shorts, quiero ayudarla a que esté bien, ya no se que hacer, espero que enviarla al continente funcione.

- Tranquilo fiera, relájate estará bien, solo debes comprenderla es un cambio brusco para ella, pero es solo mientras tenga las muletas ya verás, ahora para tu trasero de mi asiento y ve a comprarle de comer a tu hija para cuando despierte. - dijo prácticamente votandome de su silla.

- Como quieras Danno, lleva a Grace esta noche a la cena. - le dije al salir.

- Pensaba hacerlo aunque no me dijeras, yo siempre llevo a mi hija a los eventos. - dijo y aunque fue en broma me dolió.

- Golpe bajo. - dije dejándolo en Claro.

- Si, si, si, ¡ya vete Steven, tu hija tendrá hambre!

Y mientras bajaba le envié un mensaje a Kamekonas para decirle que me vaya preparando la comida favorita de Stace para ir a buscarla.

...