La hija de Steve Mcgarrett

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Stacey pov

El siempre sabía darme las mejores noches de mi vida, sin embargo era hora de volver a la realidad.

Me dolió decirle a cada uno de mis amigos que no los volvería a ver por un tiempo y que tal vez, se convierta en mucho.

Me dolió volver a sentir cosas por Pratt, después de mucho tiempo, era difícil aceptar que el destino nunca nos uniría aún cuando encajabamos tan bien.

Pero todo sea para demostrar que también sé hacer las cosas bien y correctas, si tal vez pueda que me meta en muchos problemas en eso Danno tenía la razón, pero si estudiaba las causas todas tenían que ver con que daría mi vida por la gente que amo.

Mi maleta estaba hecha, mi nuevo outfit estaba listo y mi nueva vida en otro lugar empezaría en unas horas.

Miré por última vez mi habitación y cerré los ojos respirando el aire que ambientaba la misma, esto para recordar mi espacio más personal en toda mi vida.

Bajé las escaleras e iba de salida, pero alguien al que yo creí trabajando estaba en medio de la puerta con los brazos cruzados.

- ¡puedes darme el permiso! -dije de buena forma.

- ¡No hasta que me expliques que tramas!.

- No tramo nada, ni que fuera un truco y yo fuera maga, simplemente voy a cumplir con los requerimientos que me pidieron en la escuela, iré a terminar mis estudios para ser una Licenciada en Ciencias políticas y trabajar en un puesto donde pueda ayudar a la comunidad. - Le expliqué.

- ¡Ajá!, ¿por qué el cambio de la noche a la mañana? - me volvió a preguntar Steve.

- Porque me cansé de muchas cosas. -dije con el corazón algo roto.

- ¿Cómo cuáles? - preguntó preocupado.

- No quiero hablar de eso, si me permites debo irme ya. - dije sin mirarlo.

- Si fue por lo de Danno, yo... - iba a seguir hablando pero lo detuve

- No, no tiene que ver con eso. - le expliqué.

- ¿Quieres al menos que te lleve?

- No, gracias, prefiero ir sola, así dolerá menos despedirme de tí. - dije abrazándolo, lo quería con mi alma. - te amo, pórtate bien en mi ausencia. -le dije besándolo.

- A veces no entiendo tus decisiones, pero puedo apoyarte siempre, solo explícame antes de irte, ¿de qué trata todo esto?.

- No me obligues a decirte, por favor. -dije mirándolo con ojos tristes.

- Stacey, entiendo que hayas firmado todo porque eres adulta, pero aún así quiero saber a dónde vas y el motivo por el cual lo haces. - me explicaba. - Hace algunas semanas atrás estabas muy negada con el tema, incluso con graduarte, luego me llama tu ex líder y me dice que renunciaste al voluntariado y ni siquiera supo darme un motivo. - dijo de brazos cruzados. - No quiero presionarte, solo dame una explicación justa.

- voy a perder mi vuelo, permiso. - exclame para tratar de evadir su pregunta.

- No vamos a perder el vuelo, si el problema es ese pues vamos al aeropuerto y allá me explicas, ¿no creerás que te dejaria ir sola sin más, cierto? - preguntó mirándome con una ceja alzada.

- ¡Demonios! - exclame e iba continuar hablando pero alguien tocó la puerta y fuí a abrir y me encontré con Pratt. - ¿Qué haces aquí? - pregunté sorprendida.

- Stacey, tengo algo que decirte, ¿podrías salir unos minutos? - dijo mirando a alguien más adentro.

- ¡Claro! - respondí aún sorprendida. -
¿Qué sucede?.

- Yooo -dijo de forma nerviosa y luego continuó hablando - reconozco que tal vez iniciamos de la forma equivocada, que establecimos varios puntos que se supone no íbamos a cruzar, pero luego de lo que pasó en nuestro último encuentro y la forma en la que me tratabas en el voluntariado o de ver la manera en la darías tu vida por otra persona que amas, me hicieron darme cuenta de que yo también te amo y que yo también daría mi vida por tí. - dijo nervioso.

- ¿por qué me lo dices ahora? - dije llorando.

- Porque sé lo que intentas, estás cansada de luchar por personas y al final te sientes triste porque crees que no lucharian por tí, pero estoy dispuesto a tomar el riesgo, tal vez sí es cierto, lo nuestro iba a ser solo sexo, pero por alguna extraña razón yo quiero que sea más que eso, además. - se acercó a mí. - Le prometí a Ashton cuidarte y que lo visitariamos pronto, sé donde está y sé lo bien que te haría verlo.

- ¡Gracias Pratt! - dije abrazándolo.

- Si nunca busqué a alguien más aún cuando tú y yo no eramos nada, es porque quería que fueras tú, pero nunca te dije nada porque me avergonzaba decirte lo que sentía, pensaba que te burlarias de mí y lo callé durante mucho tiempo, queria convencerme a mí mismo que eran solo emociones y engañaba a mi mente pero eso no funcionaba con el corazón, espero que no sea tarde. - dijo tomando mis manos.

- Pratt, me has dejado con la boca abierta. - dije sonriendo con lagrimas en los ojos. - Me alegra saber que no hago las cosas tan mal como muchos piensan y gracias por demostrar tus sentimientos hacia mí, estamos el uno para el otro y gracias por correr el riesgo conmigo. - dije besándolo de manera delicada.

- Se que te vas, pero dame unos días y nos encontraremos para lo de Ash. - dijo y luego se marchó, no sin antes volver a besarme y abrazarme.

Limpié rápidamente mis lágrimas y volví a entrar casa para tomar mi maleta e irme, pero olvidé que papá aún seguía ahí.

- ¿Me dirás que fue eso? - preguntó algo serio

- ¿Qué cosa? - pregunté sin entender.

- Ese chico llegó de repente y luego se besan como si no hubiese mañana, tu ni siquiera lo esperabas.

- ¿Alguna vez pasaste de tener únicamente relaciones sexuales con una persona a enamorarte de la misma? - Le pregunté ahora con curiosidad.

- Tal vez, pero nunca se lo dije y creo que se me hizo tarde.

- Bueno, pues a él no se le hizo tarde. - respondí. - No quiero que tomes prejuicios apresurados, en el avión te cuento "nuestra historia".

- Stacey, ¿por qué a veces siento que tienes una vida oculta?

- No, no tengo ninguna vida oculta, es solo que no me gusta compartir mucho mis cosas, eso no es novedad.

- que bueno que el viaje es largo, tenemos muchos temas que hablar. - dijo mirándome y sabía que sí  o sí debía contarle la verdad.

...