MI NECESIDAD OSCURA [EN EDICIÓN]

Capitulo 9

Quiero

Michell

Después de escuchar con su propia voz ronca en mi oído que iba a ser suya, sus sucias palabras me excitaron, pero no puedo evitar sentir miedo combinado con deseo lujurioso, aunque mi cuerpo lo pide más mientras mis bragas se humedecen, él se empeña a besarme con deseo y lujuria que me vuelve adicta. «Le encanta verme a los ojos» eso hace tener escalofríos en la piel y se me eriza todo el cuerpo con su tacto...sencillamente esto muy mal, no debo sentir esta atracción por él, pero como no sentirla después de tantas fantasías sexuales y tantos escenarios que pasaron por mi cabeza asimilando que este hombre me hacía suya.

Comienza haciendo un baile demandante con su lengua en mi boca para después desplazarse lentamente por mi cuello, no evito la sensación escalofriante y comienzo a gemir muy suave ya que es mi punto débil, siempre lo ha sido, pero con él, esto es otro nivel. Como si ya cocinera cada parte de mi ser y cada cosa que me gusta en la cama y mi cuerpo no lo deja de mentiroso. Esta sensación sobre pasa todas mis fantasías, nunca me imaginé sentirme tan sensible y dispuesta con el aun en estas circunstancias, mi cerebro no capta que es mi secuestrador que me está dando placer, más se empeña en recordar que esta perfección de hombre me está haciendo gemir como nadie más lo había logrado.

—Música para mis oídos nena— susurra agitado en mi cuello mientras deja una marca donde chupa con fuerza, comienzo a sentir nuevamente la humedad en mis bragas debido a como baja su mano enorme y escurridiza por mi vagina, no tiene miedo de tomarla más solo disfruta de sentir como estoy de mojada deseando de él. Su gruñido me incita a disfrutar aún más, muerde en mi cuello de nuevo al sentir sus manos bañadas por mis líquidos de excitación.

Lo cual me ínsita a gemir más ya que su mano comienza a mover mis pliegues húmedos haciendo unos movimientos que logran ponerme con la respiración pesada. Mientras me hace círculos en mi clítoris me besa desenfrenadamente con lo cual arqueo mi espalda buscando más del placer que me está haciendo sentir, su mano libre llega a mi cuello tomándolo con una fuerza jodidamente excitante.

—Quiero que te corras para mí—ordena mientras muerde mi labio inferior gruñendo y mi corazón se paraliza al escuchar como desea todo de mí.

—Dios...—susurro gimiendo por los movimientos diabólicos que hace en mi clítoris.

Al escuchar mis gemidos arremete nuevamente metiendo dos dedos en mi entrada con fuerza disfrutando de mi humedad excesiva para luego sacarlos y disfrutar de su sabor mientras los chupa enfrente mío, lo cual eriza mi cuerpo cuando mis ojos se encuentran en los suyos, su vista café es aún más brillante que en mis sueños y sus de sus ojos brotan de deseo ardiente y lujuria dispuesta a ser entregada.

—Deliciosa, sabes muy rico gatita...— susurra mientras sigue chupando sus dos dedos que están bañados de mi líquido, no entiendo por qué no siento asco, de hecho, me gusta demasiado su seguridad y morbosidad, nunca he sido recatada en mi sexualidad siempre he sido de mente abierta y me encantas serlo, el poder que tiene sobre mi comportamiento es único en él, solamente él me ha hecho sentir así con una calor interna infernal y una excitación desbordable por todo mi cuerpo. Siento arden mucho más su cuerpo encima mío, su enorme erección se restriega en mi pierna causando inimaginables escenarios donde me hace suya y haciéndome sentir aún más excitada y ansiosa. Al ver sus ojos cafés llenos de deseo y lujuria se conectan con los míos de nuevo dejándome caliente y helada ante su mirada llena de poder y locura por mí, arqueo la espalda al sentir como sus dedos intentan entrar en mi entrada húmeda, pero sin apartar la escena morbosa y excitante que tengo al verlo meter de nuevo en mis paredes y sacar más líquido para saborear mi sabor.