MI NECESIDAD OSCURA [EN EDICIÓN]

Capitulo 13

Llegamos

Pov Dominic

Me cabrea que no me obedezcan más cuando le conviene a ella, saber que estuvieron buscándome por muchas partes y ella aquí haciendo berrinches como niña, mis enemigos saben la existencia de mi isla eso lo empeora todo. Y no me queda otra que moverme, perdí más de cuarentaiocho horas buscando a Michell por la puta isla, era más que merecido darle un escarmiento por sus acciones, más con el idiota ese que quería quedarse con lo mío, con lo que me pertenece.

Estaba mas que seguro al saber que ella no podía salir de la isla, pero me jodio tenerla lejos de mi protección y cuidado. Una llamada entrante a mi móvil me saca de mi trance lleno de furia por su desobediencia y su maldita manera de negarlo que tenemos los dos y la maldición que portamos ambos.

—Señor —habla Lucas muy seguro mientras en este momento deseo estar ahí para asesinar al idiota que quería a mi mujer.

—Habla... —ordeno sin paciencia.

—Esta vivo, pero falto poco para lo contrario—me informa mientras comienzo a ordenar mis documentos y apagar mi laptop.

—¿Y que con eso?

—Revisamos su habitación y no había ningún tipo de rastros de ella aquí... —guarda silencio y no me agrada nada—Pero en su móvil tiene algunas conversaciones con las amigas de la señorita, donde le pregunta si sabe de su paradero, ya que fueron a buscarla a su departamento.

—¡Mierda! —escupo furioso, lo que menos necesito es esto—Recoge todas sus cosas y llévalas a mi departamento en Compton, deja una carta donde diga que se fue de viaje y otras mierdas. No tengo tiempo para estas cosas—demando colgando la llamada. Salgo a la entrada de la casa, todos mis hombres esperan mis ordenes atentos a mi voz.

—Partan a Londres, necesito listo absolutamente todo—ordeno y asienten a unísono—Solo mi piloto y dos de mis mejores hombres irán conmigo.

—Señor... —llaman a mi espalda cuando volteo me encuentro a la sirvienta temblando—La señorita esta casi lista, necesito a alguien que baje todas las maletas. —pide intimidada por mi mirada.

—Deja todo—ordeno y su rostro muestra sorpresa—Le comprare todo el guarda ropa de nuevo en Londres, quiero que este hermosa y con el estómago lleno.

Desaparezco entrando de nuevo al estudio donde mi cierro con mi comando de voz, mi cabeza sigue pensando en cómo resolver este problema de mierda. El maldito que la jodio tiene que pagar por todo lo que la hizo pasar y a mí también.

—Dominic... —me llama uno de mis hombres en otra llamada entrante.

—Julián, ¿qué pasa? —pregunta ya que el solo llama por emergencia.

—El Coronel cerro el caso de Novosibirsk, esta mañana decidió que es muy resgoso ir detrás de ellos... —me informa y era lo que temía al estar lejos de Londres.

—¿El ministro que decidió? —pregunto tratando de no ir y matar a mi superior por su cobardía.

—Lo apoyo, casi de inmediato

—¿Los tres?

—Si amigo, intente abogar para que te diesen más tiempo, pero...

—No importa, sabré como hacerlo—lo interrumpo seguro, no me interesa si ellos decidieron tal mierda. Yo puedo solo, con el imbécil que jodio todos mis malditos planes.

—Dominic hermano, no hagas una locura.

—Ellos se adelantaron—cuelgo adentrándome en mi habitación para ducharme y marcharme lo mas pronto posible a mi territorio. Necesito estar cerca de mi enemigo para poder prevenir cualquier movimiento de él, ya sea enfrente o detrás mío, como ahora mismo...