Capitulo 36

3.5K 210 1
                                    

Verdad...

Pov Michell

Hoy por la mañana Dominic se fue temprano a cosas del trabajo supongo, claro siendo el, antes de irse me dio mi follada matutina la cual ya no me toma por sorpresa. La verdad no se quien está más dependiente del otro, nuestra obsesión es mutua, estoy consciente de que tengo una obsesión hacia él y como me hace sentir cada vez que estamos juntos. El tiempo se detiene cuando estoy en sus brazos, me trata como si fuese lo único en su vida. No puedo ocultarlo, tampoco que todo el tiempo queremos estar cogiendo a cada nada y no separar nuestros cuerpos nunca del otro, no puedo dejar de fantasear con el cada vez que está lejos y el no deja de follarme cada vez que me tiene cerca demostrando que me necesita siempre a su lado. Ya sea en la cama, balcón, en la ducha y en cualquier parte. Él no se mide para hacerme sentir mujer con salvajismo para follar y sus repitentes palabras sobre que le pertenezco.

Pero necesito encontrar respuestas o señales sobre como todos actúan tan normales en este lugar, sé que Dominic es el jefe de todos en este castillo, pero nadie se hace pregunta en ningún momento porque estoy aquí. Preguntarse por qué Dominic me encierra en la alcoba por días, o tal vez porque no tengo teléfono ni hablo de mis familiares y muchas más preguntas que yo haría si pudiera ver mi situación desde otra perspectiva.

Así que decido salir de mi alcoba para ir al campo a entrenar con los chicos, me ducho y cuando estoy haciendo mis necesidades, me percato que ya hace un punto rojo en el inodoro y, eso me da aviso que Dominic estará de peor humor. Ya que cuando me toca estos días él siempre se pone de mal humor por no poder follarme como quiere y, termina fastidiando todo el día a los demás aquí.

Sin ponerle más atención a como se podrá mi verdugo, salgo y los soldados vuelven a impedir que salga de la habitación sin autorización de mi secuestrador. Tienen que esperar que Dominic dé el visto bueno, así que mandan a llamar a la única de los empleados que tiene conexión con él y esa es Alice.

—Señor, la señorita quiere salir de la habitación— dice el soldado más grande por el móvil, me acomoda en la cama para esperar la respuesta que intuyo cual será y, desde aquí escucho el grito de Dominic, hace una cara de poco amigos el soldado y me ofrece el móvil para que conteste.

¿A dónde vas? — nunca deja de ser mi secuestrador por lo visto y, cuando se trata de cualquier cosa es directo todo el tiempo.

—Quería ir a correr— trato que mi voz salga lo más seria, aunque este mintiendo, pero necesito encontrar respuestas.

¿Con quién? — pregunta y hago una mueca de fastidio al saber lo que el responderá si menciono a Luis.

—¿Puedo correr con alguien más? — le pregunto con ironía y escucho su suspiro de fastidio

—No— contesta molesto y sobre todo controlador.

—Entonces sola—sigo sonado seria y enojada a la vez ya que no puedo mostrarme nerviosa o sospechara algo y, detesto cuando me hace sentir como un trapo que solo él puede usar. Me dice que le pase al soldado y este asiente mientras todavía tiene el ovil en la oreja.

—Bien señorita, pero nosotros estaremos cerca—asiento y me pongo de pie para poder salir de la habitación, siento algunos dolores por mis días, pero quiero conseguir algo útil y lo necesito de verdad. Estas visiones no me dejan dormir y él me puede dar una respuesta o una señal de explicación que me sirva.

Me voy directo al campo con los soldados atrás mío a su debida distancia, busco con la mirada a mi objetivo y, lo encuentro con otros soldados haciendo planos en una mesa con una carpa. Así que dispongo ir sutilmente hacia él, cuando nuestras miradas se conectan me regala una sonrisa que correspondo con cariño ante su mirada dulce de mirarme.

MI NECESIDAD OSCURA [EN EDICIÓN]Where stories live. Discover now