Hinchazón.

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por obvias razones el trabajo de ayer no pudo terminarlo, no quiso llevarlo a casa pues sabía que no iba a descansar absolutamente nada si lo hacía, de todos modos esta mañana también obtuvo la ayuda de Mónica, aunque sólo fuera para llevarse las ...

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por obvias razones el trabajo de ayer no pudo terminarlo, no quiso llevarlo a casa pues sabía que no iba a descansar absolutamente nada si lo hacía, de todos modos esta mañana también obtuvo la ayuda de Mónica, aunque sólo fuera para llevarse las carpetas que ya había revisado y firmado, era realmente alentador no tenerlas sobre su escritorio, entrego los miles de papeles también, obvio todo caía sobre Tania pero al menos no tenía que estarle llamado cada tanto para que se llevará todo lo que estaba listo, a pesar de que el embarazo ya era bastante notorio.

Se aventuro en usar traje esta vez, tendría que verse más formal por las reuniones que le tocaban hoy, como ya lo había mencionado antes, se la pasaba en sus pantuflas, hoy se las puso ni bien llegó a su oficina, después de estar toda la mañana ahí fue a su junta sin percatarse de que no se había cambiado a los tacones, toda la empresa la vio pasearse con sus pantuflas rosa felpudas e incluso los socios, Mónica estaba presente en esa junta pero no alcanzó a decirle la verdad, dado que ella ingreso hablando ya sobre el tema de la reunión, justamente en esta le tocaba estar parada para demostrar las gráficas y el índice de crecimiento.

No entendía porque la miraban tanto ¿Tal vez era por que no estaban enterados del embarazo? ¿O no podían creer lo bien que les estaba yendo? En fin, ella hizo su parte dejando de lado lo mucho que la estaban viendo, no fue hasta que se le cayó el bolígrafo puntero de la mesa que se percato de sus pantuflas, en ese mismo momento deseo que hubiera una de esas falsas alarmas de temblores para poder zafar de este gran oso que acababa de darse cuenta estaba viviendo, pero como el universo no conspiró a su favor le tocó superarlo sobre la marcha, como buena mujer empoderada que acababa de ponerse en ridículo.




– Ahora que la junta terminó, probablemente cuando haga mi típica pregunta de: "¿Tienen alguna duda?" Mencionen mis pantuflas, antes de que eso suceda la responderé.

– Perfecto porque creo que todos tenemos esa duda — bromeo uno de los socios

– Vengo de una recuperación donde tenía el tobillo quebrado, producto de un accidente en una de nuestras obras como ya saben — toma aire para poner una de sus más falsas sonrisas — Cómo mi presencia es necesaria en la empresa, la mejor solución para mi son las pantuflas y es todo lo que diré sobre el tema

– ¿Por qué rosa?

– Porque quería combinar con mi blusa ¿Algo más?



Después de eso todos se retiraron y ella encaró a Mónica en busca de una explicación pero lo único que obtuvo fue una risa descomunal.



– ¡Lo siento! Pero en mi defensa...

– No hay defensa que te justifique

– ¡Mamá! Intente decírtelo pero entraste enfocada en la reunión, ni siquiera pude acercarme a ti para decírtelo discretamente

– Carajo, no me molesta que las vean los empleados pero ellos ¿Por qué justamente ellos?

– Alguna maldad estuviste haciendo y el universo te lo cobro — vuelve a reír

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