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Luego de haber almorzado, José Luís tuvo que presentarse a una video conferencia en el estudio de Altagracia, no iba a tardar más de una además ella no estaba sola, tenía a Mónica y a la pequeña Aliyah. Subió con ambas al cuarto pues debía bañar al bebé, el pañal que le había puesto su papá... Pues no fue bien colocado, el pipí se le traspasó, de hecho hasta Altagracia sufrió el percance; no fue mucho por lo que bastaría con cambiarse la blusa del pijama, cargaron el lavabo de nuevo con agua tibia, dejo caer unas gotitas del jabón especial para recién nacidos e hizo un poco de espuma.
Manu estaba ya desnudito recostado sobre el sink, abajo suyo había una toalla para que no sintiera el frío del mármol, Mónica supervisaba que no se volteara mientras que su madre preparaba todo para comenzar con el baño, Aliyah por supuesto estaba jugando con la toalla de ositos que era del bebé.
– Ahora sí, vente mi cielo — lo levanta sosteniendo su cabecita en todo momento — Uy si, a ti te gusta el agua y más si está tan agradable
– ¡Quiero ver! — se quejó
– Ya te cargo... ¿Mamá te ayudo con algo antes?
– Estoy bien, ya logré acomodarlo, mejor subela antes de que se nos enoje
– Ven aquí princesita — la levanta — Y listo ¿Cómoda?
– Sipi, gracias Moni
– De nada, oye pero que agusto se ve ahí — ríe
– Bueno es que ha estado en agua todo este tiempo — le sonríe mientras comienza a limpiarlo — Digamos que está en su elemento
– Sumando que nació en la tina, déjame lavarle la cabecita, porfis
– Con ese jabón de ahí, supuestamente es anti lágrimas pero por si acaso no dejes que le caiga en los ojos
– Seré cuidadosa ¿Me quieres ayudar Aliyah?
– ¿Si puedo mami?
– Puedes pero despacito
Entre las tres terminaron de darle el baño, Aliyah lo había disfrutado mucho ya que por fin estaba entrando en el roll de hermana mayor, Mónica también pues no le había tocado vivir esto con su hermanita; incluso Altagracia le había permitido enrollarlo en la toalla y llevarlo a la cama donde lo secarian bien antes de ponerle el pañal y vestirlo.
– Ponle el pañal mientras busco un cambio para mí, voy aprovechar que se la está pasando bomba con sus hermanas para darme una ducha
– Tardate todo lo que quieras, nosotras lo cuidaremos bien ¿Verdad Aliyah?
– ¡Sipi!
– No tardes mucho en vestirlo ¿Si? Ahí sobre la cama separe su ropita
– Mamá ve a buscar tu ropa y ve a bañarte, ya te dije que nos encargamos — ríe
