Capítulo 4.

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—No... —respondió Taehyung finalmente.

Tomando a Jungkook por sorpresa, Taehyung bruscamente lo sujetó del cuello, y se subió sobre él en la cama, ocasionando que el omega soltara un suave gemido de temor, y se removiera asustado.

—¿Por qué? —preguntó Jungkook en un susurro— ¿Por qué no quieres liberarme? No huiré, no podría escapar de ti jamás, así que por favor...

—Porque me gusta verte así, tan indefenso —susurró Taehyung, cortando las súplicas de su omega—. Verte tan asustado, en mi propia cama, solamente pudiendo depender de mí para todo lo que quieras hacer, incluso respirar... ¿No es acaso algo excitante?

La verdad era... Que Taehyung no creía eso por completo.

Si le daba un gran placer tener a su omega retenido de esa forma, había buscado a su destinado por un tiempo largo, y temía que él escapara ahora que finalmente podía tenerlo en sus brazos. Taehyung no dudaba del amor del omega de Jungkook por su alfa, pero Jungkook no era solo su omega, también era un extraño, una persona que Taehyung apenas había conocido hace unas horas, y él era muy precavido con los extraños...

Taehyung aún no sabía si podía confiar en ese omega, y aunque no dudaba de su amor, si dudaba de la velocidad de sus piernas para correr lejos de él. Ya no le importaban las órdenes de esos mafiosos que secuestraron a Jungkook, pero Taehyung no estaba dispuesto a dejarlo huir, ataría a su omega a su lado para siempre.

Sintiendo como las manos de Taehyung se aferraban a su cuello, quitándole ligeramente el aire, Jungkook sonrió con suavidad, creyendo completamente en sus palabras.

—Si... Está bien —susurró el omega con la voz ligeramente ronca por la falta del aire— ¿Pero por lo menos puedo ver tu rostro un momento?

—Ese es un beneficio que tendrás que ganar... Si te portas bien y me complaces este día, en la noche probablemente, dejaré que veas mi rostro por primera vez. Mientras tanto, tú solo deberás seguir mis órdenes, sin dudar.

Al escuchar esas palabras, Jungkook rápidamente asintió con la cabeza, ya que estaba dispuesto a aguantar cualquier tipo de cosa, solo por su alfa.

—De acuerdo, vamos a tomar un baño —dijo Taehyung con todos los asuntos finalizados.

Levantándose del cuerpo de su omega en la cama, Taehyung lo giró con suavidad, para alcanzar sus muñecas en su espalda.

—No te muevas —pidió amablemente, para luego hablar con su voz de alfa—. Estoy hablando en serio, Jungkook, no te muevas...

—No lo haré alfa, lo prometo...

Tomando las correas de cuero que ataban las muñecas del menor, Taehyung suavemente las soltó, para poder quitarle la camiseta sucia que él llevaba, desnudándolo completamente para bañarlo.

—Alfa, podrías... ¿Atar mis manos en mi abdomen? —preguntó Jungkook de pronto— No tienes que liberarme, solo... Quiero abrazarte...

Aquella petición era arriesgada, pero Taehyung todavía sentía temor en su omega, quien seguramente estaba asustado por la situación en la que se encontraba. Así que tras considerarlo un segundo, el alfa respondió:

—Solo mientras estás tomando tu baño.

Siguiendo las peticiones de su omega, Taehyung ató las manos del menor en su abdomen con las mismas correas de cuero, y luego lo tomó en sus brazos, para llevarlo al baño de su casa. Observando de reojo el sonriente rostro de Jungkook, quien no dudó en aferrarse a su ropa, apoyándose en su pecho con confianza.

Llegando al baño de su hogar, Taehyung cuidadosamente dejó el cuerpo de su omega en el agua de la bañera, la cual estaba tibia y había preparado antes de ir a despertarlo. Sintiendo que su alfa lo dejaba en el agua, Jungkook rápidamente lo abrazó por el cuello, aferrándose a él con fuerza, como si temiera que lo abandonara.

—No debes asustarte, no te haré daño —susurró Taehyung.

—No tengo miedo de eso... Solo... No quiero que me dejes...

—No me iré, lo prometo.

—Aun si te alejas de mi lado un minuto, eso es dejarme, no quiero que te separes de mí —suplicó el omega dulcemente—. Por favor, báñate conmigo, no me dejes.

—Jungkook... —susurró Taehyung sin saber cómo negarse.

—Por favor, mi alfa... Quiero que me ames de nuevo, ten sexo conmigo de nuevo, por favor... —suplicó el omega, aferrándose a él con mucha más fuerza.

Taehyung pensativo se preguntó si el supresor aún no había hecho efecto en el menor, y aunque eso le preocupaba, su alfa nuevamente le estaba ordenando tomar a su omega en esa bañera, confundiendo sus pensamientos, ya que Taehyung no quería volver a abusar de su omega de esa forma.

—Por favor... Hazme el amor de nuevo —suplicó Jungkook, terminando así con las ultimas dudas que había en la culpable mente de Taehyung.

A pesar de que se había prometido a sí mismo que no iba a ceder de nuevo y no iba a abusar de su omega, Taehyung no pudo resistirse ante las peticiones desesperadas de su omega, quien de forma suplicante le pedía tomarlo.

Como un alfa, Taehyung no podía rehusarse.

Separándose de Jungkook, Taehyung se quitó la ropa que tenía en ese instante, para luego subirse sobre el suave cuerpo de su omega en aquella bañera, escuchando como el agua caía al piso con su peso sobre el menor, y como Jungkook nuevamente lo abrazaba.

—Te separaste de mí, me dejaste... —se quejó el omega en un susurro.

—¿Estás enfadado? —preguntó Taehyung roncamente por la excitación.

—Solo no vuelvas a dejarme...

Volviendo a abrazar al alfa por el cuello, pasando sus delgados brazos por el cuello del mayor, Jungkook buscó los labios de su amado, buscando calmar el calor que ahora se extendía en su interior.

Sin perder el tiempo, dándole un cariñoso beso a su omega, Taehyung llevó una de sus manos a las nalgas del omega, presionando con uno de sus dedos su sensible entrada. Siendo muy cuidadoso, Taehyung finalmente introdujo dos de sus dedos en el interior de Jungkook, escuchando como él gemía mientras lo abrazaba con más fuerza.

—¿Sabías que en esta posición puedo hacer que entre agua de la bañera en tu estrecho agujero? —preguntó Taehyung con una sonrisa ligeramente libidinosa— Solo tengo que abrir mis dedos de esta forma, y el agua entrará...

Muy sorprendido, Jungkook sintió como el alfa abría sus dos dedos en su interior, dilatando su entrada, por la cual comenzó a entrar un poco de agua.

—¡Alfa! —dijo Jungkook muy asustado— Detente...

—¿No te gusta? Es tan erótico...

—Se siente extraño...

Jadeando y gimiendo con mucha incomodidad, Jungkook sintió como su alfa continuaba moviendo sus dedos en su interior, abriéndose y cerrándose suavemente, dejando que el agua entrara en su interior en medio de las embestidas. Y aunque esto causaba en él un extraño sentimiento de incomodidad, pronto Jungkook sintió como su miembro despertaba, endureciéndose con cada embestida que él le daba.

—Alfa... Mételo ya... —suplicó Jungkook, sin poder soportar más ese juego previo.

—¿Estás seguro? Pareces estar disfrutando mucho todo esto... —dijo Taehyung sin perder su sonrisa.

—Ya no puedo... Por favor, te quiero a ti, no quiero tus dedos...

—De acuerdo —dijo Taehyung rindiéndose una vez más, admirando la apariencia tan dulce y suplicante de su amado omega—, voy a continuar.

Era muy arriesgado, pero Taehyung quería confiar en su omega y las promesas que él había hecho. Así que sacando sus dedos del interior del menor, el alfa desató los tobillos del omega con cuidado, para poder abrirle las piernas, acomodándose de mejor manera sobre su cuerpo para poder penetrarlo.

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