Capítulo 20.

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En silencio, Min Yoongi se aferró a la ropa de su omega, mirando la cama vacía.

Por su vínculo, Yoongi podía sentir que su omega estaba sufriendo, que le pedía ayuda de forma desesperada, pero él no tenía idea de lo que estaba ocurriendo.

Recibiendo una llamada en su teléfono, Yoongi respondió algo confundido, hablando con el compañero de policía de su omega.

—Hola Yoon... —dijo Hobi con un tono más serio de lo habitual— Me imagino que ya te habrás dado cuenta de que Jimin no está.

—¿Dónde está? —preguntó Yoongi sin irse por rodeos.

—Esto no va a gustarte, pero necesito tu ayuda, y que seas muy discreto. Me temo que tu hermano y tu omega están en un grave peligro ahora mismo...

Yoongi cerró los ojos intentando contener su furia, alguien se había atrevido a poner sus sucios dedos sobre su omega y su cachorro, así que él había empezado a enloquecer queriendo venganza.

Yoongi no era un alfa con quien se podía bromear, especialmente cuando se hablaba de su omega y su hijo.

***

Abrió los ojos con mucho temor, se había quedado inconsciente por los golpes que le habían dado, y al despertar Jungkook ya sabía dónde se encontraba... Se había dado cuenta de la terrible realidad.

A duras penas, Jungkook logró sentarse en el piso frío de aquella habitación, sintiendo sus manos detrás de su espalda muy entumecidas, con apretadas cuerdas atando sus extremidades, el omega miró a todos lados muy confundido, observando una pequeña habitación completamente vacía.

—¿Qué es esto? ¿Dónde estoy? —preguntó Jungkook en un susurro, sintiendo el temor recorrer todo su cuerpo— Tae... Taehyung...

Sin poder evitarlo, en medio de su llanto, el omega había buscado a su alfa. Y al intentar tomar fuerzas para ponerse de pie, noto como en su cuello había un apretado collar de cuero unido a una cadena, que lo mantenía sentado en el piso sin poder moverse.

—¡No! ¡Ayuda! —gritó Jungkook, sintiendo que eso era lo último que podía soportar.

Ante sus gritos, una puerta corrediza se abrió de golpe, una mujer beta se acercó al asustado alfa en el suelo, para darle una bofetada, que hizo que Jungkook volviera a encogerse en el piso asustado, sin saber que estaba corriendo.

—¡Cierra la boca! Un solo sonido más y voy a amordazarte —amenazó la furiosa mujer, señalando a Jungkook con un dedo de forma acusadora— ¡Cállate ahora!

Jungkook solo pudo asentir con la cabeza asustado, observando como la mujer le daba una última mirada antes de salir de la habitación. El omega no entendía dónde estaba, pero cuando la mujer estuvo fuera, pudo escucharla murmurar: "avísale al jefe que ya está despierto..."

Cerrando los ojos para calmarse, Jungkook intentó pensar en una forma de escapar. No sabía dónde estaba, pero podía sentir a su alfa a lo lejos por el vínculo, podía sentir su enfado y desesperación. Jungkook por instinto supo que tenía que volver a su lado, así que tocando con sus dedos de forma temblorosa las ataduras en sus muñecas, intentó buscar una forma de liberarse para salir de ahí...

***

—¡Suéltame! ¡Déjame ir ahora! —gritó Jimin furioso, luchando con sus captores.

A pesar de su vulnerable estado, Jimin no había dejado de luchar con sus secuestradores desde el primer momento. Cuando se los habían llevado, Jungkook fue subido en una patrulla distinta, así que Jimin no estaba seguro de que ambos estuvieran en el mismo sitio. De cualquier manera, Jimin pudo ver que lo habían llevado a una vieja casa por un camino secreto cerca de la costa, un lugar que él jamás había visto, pero que no parecía un lugar muy agradable.

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