Capítulo 21.

212 20 0
                                    


Sintiéndose muy desesperado, Jungkook trató de liberarse de sus ataduras, pero antes de poder conseguir cualquier avance, aquella pequeña habitación abrió sus puertas y un par de hombres se acercaron a él sin decir ni una palabra.

—¿Qué hacen? ¡No! —gritó Jungkook desesperado, ya que esos hombres lo tomaron de los brazos y lo obligaron a ponerse de pie, tomando también la cadena que ataba su cuello y liberándolo de ella— ¿A dónde me llevan? ¡Suéltenme!

—Cállate —dijo uno de esos hombres tirando del collar en el cuello de Jungkook con fuerza para castigarlo por sus gritos—, lo diré solo una vez, tiraré con fuerza de la cadena si gritas o intentas correr, no hagas nada estúpido.

Jungkook tosió desesperado, sintiendo un gran dolor en su cuello, pero sin poder resistirse. Todos esos hombres eran muy fuertes, y no iban a dudar en lastimarlo si seguía intentando luchar. Así que de forma inteligente, Jungkook decidió cooperar por ahora, solo hasta que volvieran a dejarlo solo para liberar sus ataduras.

Sollozando por el dolor de sus heridas, Jungkook caminó de forma temblorosa junto a esos hombres, que lo llevaron por serpenteantes pasillos obscuros sin un rumbo fijo. Hasta que al llegar a un pasillo en específico, pudo ver por un momento a Jimin al otro lado, sintiéndose muy preocupado por su cuñado, ya que él también estaba herido por varios golpes y se veía muy asustado.

—¡Jimin! —gritó Jungkook muy asustado, escuchando como su cuñado también gritaba su nombre.

Sin embargo su encuentro fue breve, ya que pronto Jimin desapareció por ese mismo pasillo, y Jungkook fue obligado a avanzar hasta entrar en una habitación iluminada.

—¡Jimin! —siguió gritando Jungkook, intentando resistirse a esos hombres.

Sin embargo y sin importar sus intentos, Jungkook fue finalmente llevado al interior de esa habitación, donde fue obligado a arrodillarse frente a dos hombres desconocidos, que lo miraron fijamente.

—Así que eres tú... Es un placer conocerte, Jeon Jungkook, mi supuesta "novia" —dijo Wang Xing, con una sonrisa macabra asomándose en sus labios.

Sintiéndose muy confundido, Jungkook solo pudo mirar en silencio a ese hombre que se encontraba frente a él. Por su aroma, Jungkook pudo identificar que se trataba de un alfa, pero nunca antes lo había visto, y se sentía extrañado de que él aparentemente lo conociera.

—¿Tienes una marca en la nuca? Vaya, así que un alfa estableció un vínculo contigo, el menor de los hermanos Kim me imagino, que tristeza... —dijo Wang Xing con una sonrisa en su rostro, aparentemente divertido— Mi plan funcionó después de todo.

—¿Tu plan? —preguntó Jungkook asustado.

—No creerás que te envié con Kim Taehyung por accidente. Mis hermanos querían que yo te convirtiera en mi omega, que pusiera un cachorro en tu vientre, y que te llevará a china conmigo como mi esposa —dijo Wang con un tono burlón—. ¿Pero hacer eso con un omega como tú? Eres desagradable, con todos eso tatuajes y perforaciones, preferiría morir antes de tener a alguien como tú en mi cama...

Al escuchar esas palabras, Jungkook se mordió los labios con furia. Odiaba a ese alfa, y quería gritarle para defenderse, pero recordaba su situación y su plan para escapar de ahí, así que no quería arruinarlo haciendo algo tonto.

—Así que hice lo más sensato, te induje el celo con una medicina especial y te llevé con un alfa soltero, después de todo solo necesitamos un cachorro tuyo para someter a toda tu familia, lo que te pase después de eso... Es algo que no tiene importancia —explicó Wang con una sonrisa.

Jungkook se quedó en silencio, muy pensativo. Apenas si recordaba lo que ocurrió durante sus primeros días de secuestro, pero no le parecía imposible pensar que le habían inyectado alguna droga para despertar su celo antes de conocer a Taehyung. Gracias a eso se dio cuenta de lo que había ocurrido entonces, Taehyung había perdido el control gracias al plan de aquel alfa desagradable, todo lo que ocurrió el primer día que se conoció con su destinado fue culpa de ese alfa...

—Y tú te quedaste embarazado, ¿No es así Jungkook? —preguntó el señor Wang con una sonrisa, agachándose para ver al omega a los ojos— Respóndeme.

—Eso no es de tu importancia, maldito cerdo —respondió Jungkook en un susurro, mirando desafiante a ese alfa frente a él.

—Muy rebelde, me gusta. Me imagino que tú y tu alfa tuvieron días interesantes juntos antes de intentar huir, y por tu bien espero que hayas quedado en cinta esos días, porque de lo contrario, seré yo quien ponga a ese bebé en ti...

—¿Qué? —preguntó Jungkook asustado, sin creer lo que estaba escuchando.

—Lo que oíste, mi pequeño omega. No te necesito a ti, solo necesito un hijo tuyo, y si tu alfa no fue capaz de dártelo, otro alfa deberá cumplir esa importante tarea...

—¡Tú no puedes...!

—Mañana vendrá un doctor a revisarte y comprobar tu estado, y si no estás preñado, te llevaré conmigo a China donde me encargaré de darte un lindo cachorro —respondió Wang con un tono de diversión—. Pero no te preocupes, aun si no lo disfrutas por estar vinculado con otro alfa, yo si voy a disfrutarlo, y eso es lo único que importa... Llévenselo, manténganlo bien vigilado hasta mañana y preparen un barco para nosotros, me lo llevare después de saber su valoración física...

Sintiéndose aterrorizado, pero sin poder decir una sola palabra, Jungkook solo pudo permitir débilmente que esos hombres lo obligaron a ponerse de pie, y que lo llevaran nuevamente fuera de la habitación en dirección a su celda.

***

En medio de sus gritos desesperados, Jimin fue llevado al sótano de aquella vieja mansión, donde entre risas de sus captores, le quitaron la ropa y limpiaron su cuerpo a la fuerza con agua helada. Jimin intentó resistirse, pero ante los golpes y la forma en la que tiraban de su cabello, el omega finalmente se quedó quieto y completamente dócil, temeroso de que lastimaran a su cachorro.

Después de ser limpiado de esa forma tan cruel y dolorosa, obligaron a Jimin a vestirse con un extraño uniforme de color gris, y nuevamente entre golpes y burlas, fue obligado a entrar en una extraña habitación, donde había varios omegas encerrados, los cuales estaban en completa obscuridad.

—¡No! —gritó Jimin aterrado, cuando la puerta finalmente fue cerrada detrás de él— ¡Sáquenme de aquí!

El omega ya no pudo ocultar lo asustado que estaba, golpeando la puerta con sus puños de forma inútil, llamando a su alfa con sus pensamientos. En medio de una situación tan triste, Jimin tenía mucho miedo de que llegaran a separarlo de su cachorro, queriendo salir de ahí cuanto antes, verdaderamente asustado por todo lo que estaba ocurriendo a su alrededor.

—Tranquilo, está bien —dijo una voz suave a su lado, consolándolo con amabilidad.

Muy asustado, Jimin se giró en dirección a esa voz, encontrándose con otro omega, el cual le sonreía de forma amable y acariciaba su espalda con cariño, intentando calmarlo.

—¿Que...? ¿Dónde...? —balbuceó Jimin asustado, mirando a ese desconocido.

—Todo está bien, ven conmigo —dijo el amable omega, manteniendo la calma en todo momento—, puedes llamarme Jackson, y soy de la policía de Hong Kong, te llevaré a una cama para que puedas descansar un poco.

—¿Policía? —preguntó Jimin aún muy aturdido— Yo soy el agente Park, investigador especial de la agencia central de Seúl.

—Es un gusto, agente Park —respondió el omega sin dejar de ser amable—, yo soy el agente Wang, déjeme ayudarlo a recuperarse, y después de eso todas sus preguntas serán respondidas...

Asintiendo con la cabeza, aún muy débil, Jimin se apoyó en Jackson, y con su ayuda caminó a una de las camas que había en ese extraño sótano, esperando que alguien pronto responderá sus dudas.

Save meWhere stories live. Discover now