Save me

Capítulo 9.

Jadeando y gimiendo con fuerza, Jungkook tímidamente giro su rostro en las almohadas, intentando buscar su comodidad, y queriendo ver a su alfa aunque fuera de reojo. Taehyung estaba haciéndolo muy duro y muy rápido, haciendo rebotar su cuerpo en la cama, pero dándole mucho placer al rozar de esa forma todos los puntos sensibles de su interior.

—¿Qué sucede Jungkook? ¿Me miras fijamente por qué estás asustado? ¿O por alguna otra razón? —preguntó Taehyung, notando la mirada de su omega sobre él.

—Alfa... —susurró Jungkook en un susurro— Me gusta mucho...

El omega sintió sus mejillas sonrojarse al pronunciar esas palabras. No sabía de donde había encontrado el valor para pronunciar esas palabras, pero finalmente había sido sincero, y le había dicho a su alfa lo mucho que gustaba tenerlo en su interior.

—¿En verdad? Entonces lo haré más fuerte, para que te guste aún más...

Cerrando los ojos, Jungkook tuvo que soportar las embestidas de su alfa, que se volvieron frenéticas, tan fuertes y rápidas, que pronto ocasionaron que el omega quisiera venirse, añorando su orgasmo.

—Por favor... Ya no puedo... —suplicó Jungkook desesperado.

—Estas estrechándome tanto... Es como si quisieras tentarme a hacerlo cada vez más y más fuerte —dijo Taehyung presionando las caderas de su omega entre sus dedos con fuerza—. Pero tienes razón, yo también estoy en mi límite.

Llevando una de sus manos al miembro del menor, para masajearlo entre sus dedos, siguiendo con ese ritmo de penetración tan fuerte y rápido.

Jungkook hizo sus gemidos más dulces y fuertes, pero se sentía demasiado estimulado en ese instante, así que no pasó mucho hasta que terminara viniéndose, tensando su cuerpo entero, y estrechando su interior aún más.

Pero la reacción de su alfa no fue la usual, quien lo tomó del cabello con fuerza, y nuevamente le bajó la cabeza contra las almohadas de la cama. Antes de que el placer abandonara su cuerpo, Jungkook solo un grito de sorpresa, sintiendo como los fuertes dientes de su alfa comenzaban a morder su nuca, estableciendo el vínculo finalmente, mientras que un líquido tibio lo invadía y su interior comenzaba a expandirse.

Sintiendo el agradable placer después del vínculo, Taehyung cuidadosamente lamió el cuello de su omega, limpiando así las últimas gotas de sangre después de la mordida.

Estaba hecho, ahora Jungkook sería suyo, para siempre.

Sin embargo el omega no parecía tan feliz, llorando y gimoteando lleno de dolor, se removía incómodo, intentando soltarse de las dolorosas manos de su alfa. Algo que no pareció desapercibido por parte de Taehyung, quien se dio cuenta de que había ido demasiado lejos en esa ocasión.

—Por favor para... —suplicó el omega con una voz muy suave.

—No te muevas, dolerá más si te mueves —aseguró Taehyung, masajeando con sus manos las piernas temblorosas de su omega, intentando darle alivio.

—Es tan grande... Sácalo, voy a morir, por favor...

Sin darse cuenta, Taehyung había anudado dentro de su omega. En medio de aquel momento tan placentero, Taehyung había perdido por completo el control de su alfa, y dándose cuenta finalmente de todo el dolor que le causaba a su omega, intentó remediarlo.

Aun sin salir de su interior, Taehyung rápidamente desató las muñecas de su omega, y luego puso una de las almohadas de la cama debajo de su abdomen, ayudando así a finalmente poder relajar su cuerpo entero.

—Está bien, solo respira, pasara en un momento, te lo prometo —aseguró Taehyung, abrazando a su omega en la cama y besando una de sus mejillas con suavidad.

Jungkook se sentía mareado, la mordida del vínculo también le había resultado placentera, sin embargo todo aquel agradable sentimiento había abandonado su cuerpo por el nudo. Aquel gran ensanchamiento en su interior, era lo más doloroso que cualquier persona le había hecho, así que el omega había roto a llorar, y no podía dejar de temblar.

—¿Qué hiciste? ¿Por qué esta tan grande? —preguntó Jungkook muy confundido, perdido en el dolor.

—¿Acaso no lo sabes? Es el nudo, mi dulce omega. Lo lamento, sé que debe doler mucho cuando no se hace de la forma adecuada...

—¿Forma adecuada? No creo que haya alguna manera en la que un omega pueda disfrutar de eso, duele tanto que creo que voy a desgarrarme, voy a morir —insistió Jungkook muy asustado, aun sin comprender lo que ocurría—. ¿Todos los alfas lo hacen?

—No, solo lo hacen cuando quieren poner cachorros en sus omegas. Y te lo aseguro, cuando se hace de la forma correcta, el nudo puede sentirse muy bien...

A Taehyung le gustaba la inocencia de su omega. Jungkook había nacido en una familia importante, no se juntaba con otros alfas que no fueran de su propia familia, y había acudido a escuelas exclusivas para omegas o betas de la alta sociedad. Así que él había sido criado alejado de todo lo relacionado con el sexo o el placer, criado en la inocencia que un omega de su "alcurnia" debía tener.

Pero esto no le había molestado a Jungkook antes, él en verdad despreciaba a los alfas, no le gustaba la forma en la que muchos lo miraban al saber que sería el heredero de las compañías de su padre, y en un momento de su vida pensó que nunca se casaría. Así que esa lejanía con el otro sexo, a quienes consideraba inferiores y una molestia, a Jungkook solía agradarle.

Claro que el omega nunca había considerado la posibilidad de encontrar a su alfa, su destinado.

Y ahora al lado de Taehyung, él debía aprender todo lo que se había privado esos años.

Siendo abrazado y consolado por su alfa, pronto Jungkook dejó de sentir dolor, y solo se quedó en silencio, recibiendo las caricias de Taehyung, hasta que el alfa finalmente pudo salir de su interior. Ambos entonces se quedaron abrazados en la cama, mientras que Jungkook somnoliento se apoyaba en el fuerte pecho de su alfa, aun procesando todo lo que había ocurrido.

—Te vinculaste conmigo —dijo el omega después de varios minutos en silencio, mirando la oscuridad de la noche que se filtraba por las ventanas de la habitación.

—Lo hice.

—Eso significa... Que tendrás que casarte conmigo, ¿No es verdad?

Sin poder evitarlo, Taehyung se rió un poco de las palabras inocentes de su omega, quien ni siquiera sabía la verdadera razón de por qué un omega o un alfa establecen el vínculo, siendo tan inocente como era usual.

—Sí, me casaré contigo. Haré todo lo que quieras, ya que tú y yo tendremos que estar juntos por siempre —explicó Taehyung con paciencia.

—Tendrás que venir a casa conmigo, no creo que mi padre esté contento, pero creo que estará feliz de saber que tengo un alfa, eso lo hará feliz. Pero mi hermano... Él tal vez quiera matarte —dijo Jungkook pensativo, aun sin comprender por completo la importancia del vínculo—. Pero debes prometer no hacerlo de nuevo.

—¿No hacer qué?

—No puedes hacerlo tan rudo de nuevo —se quejó el omega—. Tomar mi cabello con furia, morder mi piel, intentar ahogarme contra las almohadas... No quiero, debes ser más dulce.

—¿En verdad? Creí que te gustaba que fuera rudo contigo —dijo Taehyung en un susurro, rozando con sus dedos las perforaciones de su omega en sus labios—, creí que te gustaba ese tipo de cosas...

—Si me gustan... ¡Pero no debes excederte! Yo también quiero que me abraces, y que me acaricies la espalda cuando lo hagas, no quiero todo tan rudo y fuerte como hoy.

—¿Quieres que tenga sexo vainilla contigo entonces?

—¿Qué es eso? —preguntó Jungkook curioso.

—¿Quieres que te muestre?

Muy dudoso, aun sintiendo su cuerpo muy adolorido, Jungkook asintió con la cabeza, mirando a su alfa de reojo.