Capítulo 14.

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Jungkook abrió los ojos al sentir como el coche se detenía.

Ya era casi mediodía, y sintiéndose muy cansado, el omega escuchó a lo lejos a su alfa, hablando con otro hombre de un puesto fronterizo, y tras decir un par de palabras, el coche volvió a arrancar, avanzando por la carretera.

Después de que Taehyung se asegurara de que su hermano se hubiera marchado de la granja, el alfa comenzó con su plan de marcharse de ese sitio cuanto antes. Jungkook apenas tuvo tiempo de ponerse otra ropa e ir por última vez al baño, antes de que Taehyung lo sacara corriendo del lugar.

La verdad era que Taehyung estaba asustado, temía que su hermano lo delatara con los mafiosos que querían llevarse a su omega, así que quería llevarlo a casa cuanto antes, su seguridad era lo más preciado para el alfa.

Ya que no había dormido toda la noche por tener sexo con su alfa, Jungkook estaba agotado, por lo que Taehyung preparó una cama improvisado para su omega en el asiento trasero de su coche, donde lo ayudó a acostarse y lo cubrió con frazadas para ayudarlo a dormir cómodamente.

Y después de varias horas de viaje, Jungkook se despertó, sentándose en el asiento trasero y mirando a su alfa.

—Buenos días, mi dulce Kook —dijo Taehyung mirando a su omega por el espejo retrovisor— ¿Tienes hambre? Te compré algunas golosinas...

—Sí, tengo hambre... —respondió el omega, tras bostezar suavemente.

Con ayuda de su alfa, Jungkook se cambió al asiento delantero del coche, sentándose en el copiloto para ver a su alfa. Jungkook no podía evitar estar preocupado, y mientras comía unos cuantos chocolates, miraba fijamente a Taehyung.

—Tae... ¿Dormiste? —preguntó Jungkook con seriedad.

El omega podía sentir el cansancio de su alfa, no estaba seguro si eso ocurre por el vínculo que ambos recién habían establecido, pero Jungkook podía ver que detrás del semblante tranquilo de su alfa, Taehyung estaba realmente cansado. Después de todo, ambos no habían dormido toda la noche, y ahora estaban iniciando un largo viaje.

—Estoy bien Kook, no debes preocuparte —dijo Taehyung con una sonrisa, intentando tranquilizar a su omega—, debo llevarte a casa, eso es lo importante.

Priorizando la seguridad de su omega antes que su propio bienestar, Taehyung no quería pensar en dormir o descansar, solo quería llevar a su omega a un lugar seguro para finalmente estar a salvo.

Taehyung no sabía si podía confiar o no en su hermano, ya que si Namjoon le había dicho lo ocurrido a sus jefes, la mafia de los tres hermanos ya estaría detrás de ellos para recuperar a Jungkook. Pero si su hermano mantuvo el secreto, Taehyung probablemente tendría más tiempo para poder escapar.

Y sin importar el escenario que sea, Taehyung no quería confiarse en su suerte, mientras más pronto llegarán al hogar de su omega, más pronto estarían a salvo.

—Debes descansar, estar agotado... —reclamó Jungkook, comenzando a molestarse.

—Debo llevarte a casa, es lo único importante.

Frunciendo el ceño, Jungkook se sintió molesto ante las negativas de su alfa, pensando en alguna forma de hacerlo dormir.

Entonces pensó que si su alfa no se sentía tan cansado como para dormir, Jungkook tenía que hallar una forma de cansarlo para que Taehyung sintiera la necesidad de dormir.

Y Jungkook solo tenía una idea sobre cómo conseguir que su alfa se quedara dormido.

Taehyung estaba concentrado en el camino frente a la carretera, así que no se dio cuenta cuando su omega se acercó a él de forma cuidadosa, abriendo sus pantalones.

—Hey... Jungkook... ¿Qué haces? —preguntó el alfa sorprendido, sintiendo los dedos de su omega en su ropa interior.

El avergonzado omega no respondió, y tomando la iniciativa por primera vez desde que lo había conocido, Jungkook pudo acariciar el miembro de su alfa con sus dedos, sintiéndose muy avergonzado pero a la vez excitado al poder hacer eso.

Con su corazón palpitando fuertemente en su pecho, Taehyung no podía mantener la concentración, apenas pudiendo mirar la atestada carretera frente a él, mientras sentía los dulces y tímidos toques de su omega en su sexo. Algo que se volvió más intenso cuando tras algunas caricias, Jungkook le bajó la ropa interior con suavidad, haciendo el toque más íntimo.

—Oye... Jungkook, de verdad... —susurró Taehyung, tras soltar un jadeo de placer— Eres un conejito muy travieso, ¿Te lo había dicho?

—No... En realidad no me lo habías dicho... ¿Lo soy?

Sonriendo con suavidad, Jungkook se agachó sobre las piernas de su alfa, y en un rápido movimiento, introdujo la hombría de su amado en sus labios, comenzando a estimularlo con suaves movimientos.

Taehyung cerró los ojos por un segundo, soltando un ronco suspiro de placer. No le preocupaba que los demás coches a su alrededor pudieran ver lo que ocurría entre ambos, ya que las ventanas de su vehículo eran polarizadas. Sin embargo con tal distracción, el alfa no podía conducir de una forma adecuada, algo sumamente peligroso en una carretera de alta velocidad como en la que se encontraban.

Así que sin tener otra opción, Taehyung comenzó a bajar la velocidad, dispuesto a estacionarse afuera del camino lo más pronto posible.

Concentrado en sus acciones, Jungkook siguió estimulando con sus labios el miembro de su alfa. Se sentía algo dudoso con las cosas que hacía, ya que era su primera vez, sin embargo Taehyung si se lo había hecho en los días anteriores, así que el omega solo tomaba el ejemplo de su alfa, esperando hacerlo bien.

Sintiéndose desesperado, Taehyung finalmente consiguió estacionar su coche fuera del camino, y tomando los cabellos oscuros de su omega, volvió a soltar un ronco gemido de placer, comenzando a marcarle un ritmo para prolongar su placer.

Esto causó una gran felicidad en el omega, quien se dio cuenta de que sus acciones causaban placer en su alfa, así que Jungkook se esforzó aún más, queriendo darle más placer a su amado.

Tras varios segundos, en los cuales solo se escucharon los masculinos y roncos gemidos del alfa, Jungkook sintió como la fuerza de los dedos de Taehyung en su cabello incrementar, y mientras el cuerpo de su alfa se tensaba, un líquido caliente invadió sus labios.

—Lo siento... —susurró Taehyung con una suave sonrisa de satisfacción en sus labios— Puedes escupirlo si quieres, no tienes que...

—Lo tragué... —dijo Jungkook avergonzado, levantándose de las piernas de su alfa y mirándolo a los ojos.

Mirando el rostro de su omega, tan avergonzado pero a la vez excitado, Taehyung no pudo evitarlo y soltó un par de risas suaves, acercándose a él para besar sus labios con delicadeza.

—Puedo preguntar... ¿Por qué? —preguntó Taehyung, acariciando suavemente la barbilla de su omega.

—¿Estás lo suficientemente cansado para dormir? —preguntó Jungkook sin irse por rodeos.

—Si quieres hacerme dormir... Tendrás que esforzarte mucho más...

—Lo haré, me esforzaré —dijo Jungkook decidido—. Lograré que descanses, lo prometo.

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