FLORES DE CEREZO

CAPÍTULO 64. ÁRBOL XUYU

Cuando Lin Rufei regresó a la posada, Fu Hua estaba discutiendo con Yu Rui sobre qué desayunar a la mañana siguiente. Cuando vieron a Lin Rufei entrar por la puerta, ni siquiera tuvieron tiempo de saludarlo antes de notar que la persona lo seguía, y ambas se congelaron en su lugar.

"¿No es una sorpresa?" Lin Rufei bromeó: "Acabo de salir a comer un panqueque y terminé recogiendo a una persona."

"Soy He Wanxiang de la familia He, ¿puedo saber los nombres de estas dos damas?" He Wanxiang sonrió y preguntó mientras se inclinaba ante Fu Hua y Yu Rui.

Fu Hua dijo: "Mi nombre es Fu Hua, y su nombre es Yu Rui, somos las doncellas del joven maestro". Tan pronto como escuchó el nombre He Wanxiang, ya había adivinado que debía tener algún tipo de relación con la familia He, "Este gongzi, ¿qué eres tú para la familia He?"

"Soy el tercer hijo de la familia He". He Wanxiang dijo: "He Xieyi es mi hermano mayor".

La familia He era muy conocida y el más famoso era He Xieyi, que ya estaba en el octavo nivel de cultivo. Se dijo que durante el año de su nacimiento, el nogal de oro y hierro de la familia He dio tres nueces de oro y hierro, cada una de las cuales fue recogida por sus propias manos. Después de consumir las nueces, He Xieyi tuvo un gran aumento de poder. Pasó del sexto nivel directamente al octavo nivel.

Cuando se trata de la familia He, siempre se debe mencionar una persona y una cosa; He Xieyi era esa persona y el nogal de hierro y oro era esa única cosa.

Se rumoreaba que el nogal de hierro y oro fue plantado por el mismísimo Gobernante Celestial hace cientos de años y dio frutos una vez cada pocas décadas. Cada vez daba sólo dos o tres frutos y cada uno de ellos era precioso. Estas nueces de hierro y oro eran muy beneficiosas durante el cultivo, pero solo la persona querida por el nogal podía recogerlas. Contando los cien años de la familia He, el nogal de hierro y oro solo había dado tres frutos. Y fue gracias a estas tres frutas que He Xieyi pudo lograr un talento sin igual.

Lin Rufei luego les dijo a Fu Hua y Yu Rui que He Wanxiang se dirigía en la misma dirección que ellos y que su próximo viaje sería el de los cuatro juntos. Fu Hua sonrió y asintió con la cabeza, pero Yu Rui parecía un poco avergonzada. Probablemente todavía estaba pensando en el malentendido de hace unos días. He Wanxiang tampoco obligó a Yu Rui a hablar y en realidad no dijo mucho. Además, con ese cuerpo robusto y alto, lo hacía parecer inaccesible mientras estaba sentado en silencio. Sin embargo, después del incidente anterior, Lin Rufei sintió que este He Wanxiang era una persona interesante.

Al tercer día, He Wanxiang fue al puesto para devolver su caballo y Lin Rufei subió al carruaje. El carruaje era muy espacioso, incluso con tres personas sentadas adentro, no se veía abarrotado en absoluto. Sin embargo, Yu Rui estaba muy nervioso. Se encogió en un rincón y no se atrevió a moverse ni a hablar. Era como un pequeño ratón que se había encontrado con un gato grande y, de vez en cuando, miraba en silencio a He Wanxiang. Esa mirada suya era realmente linda y divertida.

Lin Rufei sabía que Yu Rui era una oveja con piel de lobo, por lo que no le puso las cosas difíciles a su pequeña sirvienta. En cambio, él y He Wanxiang conversaron casualmente sobre los asuntos de la familia He.

Pero cuando He Wanxiang mencionó a la familia He, parecía un poco vacilante y sus palabras también tenían algo de vacilación.

Lin Rufei pensó que era un poco extraño, así que preguntó directamente: "He gongzi... hacia la familia He... ¿Tienes algo que no puedas decir?"

He Wanxiang respondió: "Lin gongzi es muy inteligente, de hecho... el estilo de nuestra familia He es un poco extraño."

¿Extraño? Xuan Qing parecía haber mencionado esto antes, pero Lin Rufei no se lo tomó en serio. Cuando conoció a He Wanxiang, pensó que era muy considerado, y aún más, no podía pensar en qué sería extraño en la familia He.