A Sky Full Of Stars | +18 | L1

Capítulo 29

Siempre trate de ver que todo lo que mis padres hacían por mí era por amor, cada decisión y consejo era porque deseaban verme con bien. Cuando les dije que las chicas me gustaban me apoyaron y nunca los ame tanto. Claro que decirles que deseaba estudiar cocina fue como si les hubiera dicho lo peor del mundo.

Desde ese momento sentí que fallaba como hija, ahora me encuentro debatiendo entre volverá a casa para vacaciones y decirles que no deseo continuar la carrera aunque me falte solo un semestre para terminar. Las vacaciones de pascua estaban a nada, era cuando aprovechaba para regresar a casa y visitarlos.

Es la primera vez que no deseo que llegue marzo aunque este a tan solo dos días para terminar el mes de febrero e iniciar el tercer mes que es como un mes de sorpresas para mí, porque siempre tiene que pasarme algo bueno o malo, pero me pasa algo.

«Y no sé si quiero que me pase algo»

Camino con Tay a mi lado en silencio mientras seguíamos la multitud de estudiantes que iban al auditorio porque habría una obra de parte de los estudiantes de la facultad de arte dramático. Era las seis de la tarde del día domingo e íbamos varios de mis compañeros con cara de aburridos pero teníamos que asistir obligatoriamente toda nuestra clase.

«Es algo que no entiendo porque nuestras carreras ni se cruzan»

A lo lejos noto a Ophelia con Lili con cara de sueño, como si se les hubiera hecho tarde pero sabían que no podíamos faltar. Toda la semana pase viendo películas con Isabella mientras me hacía preguntas y trataba de responderlas. Eso me hizo pensar en que ya no quería estudiar y solo deseaba seguir mi sueño, mi meta.

«Es más fácil pensarlo, que decirlo»

Isabella estaba feliz porque viajaríamos devuelta a casa donde pasaríamos siete días con nuestras familias, bueno serian siete días donde ella la pasaría en mi casa o yo en la suya, pero a diferencia que si estaba en su casa, Charlie estaría molestándome para que la ayudara con sus tareas.

Esa chica me sacaría temprano de mi casa para que la acompañara al bosque porque no la dejan ir sola y como yo amo el bosque, por obvias razones iría con ella. Siento como mi celular vibra y al sacarlo veo el mensaje de Casey, bueno más bien es una foto.

No tengo un espejo pero sé que mis ojos brillan mientras contemplo la foto. El viernes después de ver películas con Isa y dejarla dormida en su cama había tomado mi chaqueta con rumbo hacia la casa de la ojiazul. Tenía la necesidad de verla y sabría que me regañaría por salir tan tarde pero la necesitaba.

Y como lo predije me dio un sermón sobre lo irresponsable que había sido por conducir en la madrugada pero no importo, pase días soñando con ella y ahora la tengo frente a mí. Así que la callé con un beso acercándola a mí para saber que es real, que no era un sueño.

El primer toque de sus labios siempre me desarmaba, la hice olvidar de todo como ella lo hacía conmigo. La bese como si fuera la primera vez, mi corazón la reconocía era como si el desgraciado supiera que ella lo cuidara. Era como si nunca fuera a estar solo.

Cuando me aleje solo me miro embobada mientras me tartamudeaba sobre lo que estaba diciendo. Pero solo la bese de nuevo y fuimos a su habitación para que pudiéramos dormir. El sábado desperté como la mujer más feliz del mundo, bueno tenía a la chica que me gustaba y quería, era feliz y no pedía nada más.

― ¿Qué piensas? ―la voz de Taylor me saca de mis pensamientos mientras me doy cuenta que estamos frente a las puertas del auditorio.

― En que esto no estaba en mis planes para terminar mi fin de semana.

― Créeme, el de nadie ―dice James que ni siquiera lo había notado.

Entramos directo a los últimos asientos para así poder dormir en la presentación que siempre dura de dos a tres horas. ¿Mucho tiempo? ¡Claro que es mucho tiempo! Pero bueno, todo sea por obtener los puntos que darán. Me siento en medio de los dos mientras James se pone la capucha para dormirse un rato y Taylor lo imita.