Hasta Que La Muerte Nos Una [Mensajeros De La Muerte I] (LGBT+)

El Final: Parte 1

Welcome to the final show
Hope you're wearing your best clothes
-Harry Styles

FÉLIX:

Cuando los pájaros volvieron a cantar en mi ventana, desperté y lo valoré. 31 de agosto, mi ultimo día de vida. Eran las 6 de la mañana cuando desperté gracias al angelical canto de unas aves, y recordé que alguna vez dije que quería ser una de ellas. Supongo que hoy volaré al cielo como ellas lo suelen hacer.

Una vez que me levanto de la cama, sé que cualquier cosa puede pasar. A partir de ese momento en cualquier instante puedo abandonar este mundo. Pero en momentos me pasaba por la mente la ilusión de que todo fuera una tontería, de que Robin no fuera real, de que no moriré. Enfrentar la realidad a veces resulta bastante doloroso.

Trato de relajarme mientras tomo lo que parece ser mi ultima ducha mientras el agua recorre cada parte de mi cuerpo, en ese momento cierro los ojos pero una ola de imágenes algo abrumadoras llegan a mi mente. Las mil maneras que tengo de morir hoy me provocan escalofríos. Jamás debí llegar a ver "Mil maneras de morir" de pequeño, gracias a ello puedo imaginarme que mi muerte puede ser de lo mas épica hasta lo mas estúpida. Puede que mi madre me pudiera pedir que salga de casa por un mandado, y al poner un pie fuera un camión gigante me atropelle. O que si llego a ir al baile por accidente una de las copas para las bebidas se rompa y me trague un vidrio que me corte todo el interior. O que del zoológico se escape un oso que justamente llegue a mi casa y me despedace solo porque tiene hambre. No lo se, todo puede pasar. Pero de pronto recuerdo que solo estaba sobre pensando, anda, relájate un poco.

Al salir del baño recibo la llamada de Luca. Al contestarle sé que solamente llama para asegurarse de que sigo vivo. Aún sigo viviendo por él.

Bajo las escaleras y miro a mi madre, tan hermosa que se ve preparando mi desayuno. Lleva una playera roja con varias perlas alrededor del cuello que le quedan a la perfección. Ella me mira y me sonríe, como siempre lo hace, esa sonrisa de mamá que te alegra los días incluso cuando es el ultimo de ellos. ¿Qué será de ella cuando se entere de todo? ¿Qué pasará cuando ella lea la carta que he dejado para ella en mi habitación?

-Que yo recuerde, el día de los milagros ya ocurrió, y fue hace un mes. -Me menciona mi madre.

-¿Por qué lo dices?

-Despertaste temprano en un día sin clases, eso no se ve todos los días.

-Bueno, hoy será un nuevo día lleno de milagros. -Noto como ella se ríe cuando le digo aquello. -Empezando por esto. -Me acerco a ella y le planto un beso en la mejilla, para luego susurrar:-Gracias por ser mi madre.

De pronto se escuchan los pasos de Farah bajando las escaleras. Ya se había tardado por estar peinándose tanto. Su cabello luce hermoso como siempre.