Capítulo 107

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Personajes Utilizados en esta historia no me pertenecen, los créditos son para sus respectivos creadores.

¿Celosa? una vena de rabia se marcó en la frente de Rias. Esta chica estaba logrando sacarla de sus casillas, por meses se ha cuestionado la identidad de la posible primera novia de su marido, y ahora que la tenía frente a sus ojos parecía que el destino se burlaba de ella.

—No lo estoy.—Dijo Rias dibujando una sonrisa. —De hecho, siento un poco de decepción.—cruzándose de brazos cerró sus ojos en señal de tranquilidad. —considerando que eres hermana del patán de Raiser no me sorprende.—Finalizó con esa conclusión.

—¡Mira quien habla!—respondió Ravel desafiante. —En primer lugar tú lo utilizaste para librarte del matrimonio con mi hermano y lo obligaste a casarse contigo, solo está contigo por esa razón.— señaló con su dedo a la princesa Gremory, insinuando la supuesta falsedad de esa relación.

—¿Y qué si es así? ¿acaso harás algo para cambiarlo?—respondió Rias y luego la hija de Baraquiel caminó a su lado para apoyar las palabras de su ama y compañera.

—No sé cuales hayan sido sus intensiones al venir aquí, pero algo es seguro, él no quiere verte.—Akeno afirmó, insinuándole que debería irse, porque ni ella misma pensaba soportarla, aún así la fénix se mantuvo tranquila.

—No lo creo.—contestó la rubia y les ignoró con la vista agitando su cabeza. —Saben qué aún me quiere, y por eso evitan que me vea a toda costa.—sus palabras esta vez ya no solo afectaron al par de diablesas, logró provocar al par restante de mujeres que se cansaron de escucharla.

—Oigan ¿acaso cree que Gokú va a fijarse en ella?.—Kalawarner interrumpió y con su estatura superior miró a la princesa fénix desde arriba. —Entiende tu posición, Ya tiene a una verdadera mujer a su lado que lo hace feliz de muchas maneras.—aclaró y resaltó su voluptuosa figura con la cual podría atraparlo y seducirlo, aún cuando Ravel tenía lo suyo, los dotes de la caída le superaban, y eventualmente la fénix dudó de ella misma.

—Tampoco necesita a una niña ricachona y mimada, para eso basta con Rias.—Reynare añadió y le tomó de su mentón obligándola a verle. —Además, a mi no me importa si eres una demonio de clase alta, si te acercas a él te mataré ¡¿Me escuchaste?! —vociferó y sin mucho respeto empujó a la chica contra la pared.

Indignada la princesa le señaló con odio y sacudió su ropa. —¡No me toques! —exclamó y apartó las manos de Reynare.—¡Tú no sabes nada de mi insolente caída!— miró a los alrededores comprendiendo que la escena estaba siendo vista por Serafall, continuar con esto no era algo favorable. —está bien, ignoren el hecho de que yo soy más importante que ustedes, no tengo por qué soportar su ignorancia.—exclamó y con un último gesto de fastidio caminó hacia un sello mágico que se formó en una pared cercana, no obstante, antes de desaparecer se detuvo.

—Esto no ha terminado Rias Gremory, no ha terminado para ninguna de ustedes...—aseguró aún con su tono desafiante, y eventualmente desapareció.

Incredulidad y exasperación prevalecieron. —Diablos ¿Cómo es que Gokú pudo enredarse con esa? —Kalawarner masculló cruzándose de brazos, apenas asimilando que una niña acababa de hacer tal escena en su propia casa, ella no parecía ser mayor que Asia.

—Y tú ¿Por qué mencionaste esto hasta ahora? —Reynare reclamó y junto a sus compañeras acorralaron a Akeno por una respuesta.

—Bueno, no pensé que fuera tan importante, él demostró odiarla.—Akeno explicó y luego recordó que había alguien más en la sala, inmediatamente notando a la Leviatán.

Mal de Amores.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora