Si vuelvo a verte │Charles Leclerc│

CÁPITULO 8

El tiempo había pasado, las semanas lo habían hecho y ya estábamos a mediados de marzo. A punto de iniciar una temporada de fórmula 1, a punto de irnos a Bahrain, mi primera experiencia en esto y admitía que estaba bastante emocionada al respecto. Me había puesto a investigar un poco sobre este mundo, habían muchas cosas y esperaba que conforme pasaran las carreras, aprendiera mejor.

Mi tío me había dicho que todos los que fuéramos con él tendríamos acreditación por la FIA para poder entrar y salir de Boxes y Paddock cada vez que quisiéramos, sí, ya había aprendido esos términos ahora.

Agarro la camiseta de la escudería de Ferrari que hasta ahora no había usado, doblándola de forma prolija y guardándola en la maleta. Agarro la gorra roja, viendo la firma en negro allí y no podía evitar sonreír.

Charles.

Me siento en mi cama soltando un suspiro, la última vez que lo vi fue en aquella cafetería a la que me invitó luego de haber salvado mi examen. Había escuchado por parte de mi prima que había estado de viaje, pero también sabía que ellos habían coincidido en algunas ocasiones y habían estado saliendo. No sabía si creerle todo a Magda, pero según ella pareciera que en cualquier momento le pedía matrimonio.

No sabía por qué Charles nunca se había interesado en pedir mi número tal vez o encontrar la forma de saludarme. Se supone que seriamos amigos o eso me había dicho él mismo. De alguna forma me había acostumbrado a su presencia de vez en cuando en mi vida y era chistoso, jamás creí que nos volveríamos relativamente cercanos.

Bueno, así lo sentía yo, tal vez lo estaba exagerando y él apenas recordaba mi existencia ahora.

Había estado viendo algunas cosas por visitar en Bahrain, después de todo jamás había estado ahí, no sabía si tenía tiempo para eso aunque suponía que si, después de todo yo solo iba a acompañar y vivir la experiencia supongo.

-¿A qué sonríes? –cuestiono a Gina que estaba acostada en mi cama, con el celular en la mano, escribiendo y sonriendo como tonta.- siento que me ocultas algo.

-Nada, solo veo memes.

Me acerco a ella quitándole el celular de la mano rápidamente, corriendo por la habitación mientras intentaba leer.

-¡Maldita Ivy! –grita intentando quitármelo, aunque era imposible no reírnos.

-Gasly con un corazón –digo viendo el nombre de contacto, seguidamente viendo algunos de sus mensajes en el chat- ¿Quién es Gasly?

Alzo una ceja, los mensajes eran bastante cursis e inclusos algunos con doble sentido. No sabía cómo sentirme al respecto.

-Es...Pierre se llama. Pierre Gasly –le entrego el celular siguiéndola con la mirada mientras ella se sentaba nuevamente en la cama.- Nos conocimos en el casino, él frecuentaba ahí varias veces.

-O sea que me estuviste ocultando que sales con alguien por no sé cuánto tiempo –me doy la vuelta caminando hasta mi maleta, cerrándola y apoyando mi rodilla encima para poder cerrarle el cierre sin molestias.

-No o sea sí, pero no es porque no confíe en ti.

Me quedo en silencio, caminando hasta mi baño y sacando un neceser de allí, guardando algunos elementos personales. Me sentía traicionada, molesta y triste justo ahora.

-Ivy, de verdad te digo. Solamente que no podía decir...

-¿Yo si te cuento todo pero tú me escondes algo tan importante? –Me doy la vuelta para observarla de frente, ella solo se queda en silencio bajando la mirada.- Genial, no quiero hablar contigo ahora.