DARKNESS MY SORROW |SOUKOKU

Demasiado bueno

¡ADVERTENCIA!

En este capitulo tenemos escena +18 (trío). Por favor, si no te agrada este tipo de temáticas espera a la siguiente actu. Juro que no tardaré tanto en subirla esta vez XD

Por el contrario, si ya la veías venir, y hasta la estabas esperando... te guardo lugar en el infierno my friend <3 

Loviu.  

oooooooooooooooooooooooooo

Chuuya estaba realmente apenado con Atsushi por la actitud de Verlaine. Y es que el europeo le había hecho llorar la última vez que el joven detective fue por documentos a la oficina de Akutagawa para que el mafioso trabajara desde casa, y en el pasillo había topado con el rubio. Sin importar cuánto se disculpó —de mala gana y obligado por Chuuya—, el mayor no libró el regañó al saber, por boca de Dazai, que Atsushi estaba moralmente destruido por Paul.

Así que intentó hacerle ir al departamento para hablar, con el objetivo de disculparse a nombre de su bruto autoproclamado "hermano mayor", y convencerlo de que no era realmente un mal tipo... siempre y cuando no respirara el mismo aire que él.

Akutagawa le contó por mensaje que Atsushi le cuidaba cada que podía, pues la situación en la Agencia era más que deprimente. Que él intentaba subirle el ánimo, obteniendo nula respuesta; y no porque el detective estuviera en depresión total, sino porque Akutagawa no era el más apto para tal tarea. Así que Chuuya, tomando como siempre ese rol tan parental que lo caracterizaba, pidió al dúo más joven ir a su departamento para cenar algo.

Al inicio accedieron. Pero finalmente, Atsushi se echó atrás con la invitación lo más cortés que pudo.

—Atsushi-kun dice que no pueden venir —avisó Dazai, acostado cuan largo era en el sofá, con el móvil en mano—. Dice que Akutagawa tiene diarrea explosiva.

—¿Diarrea qué? —Chuuya salió de la cocina con el bowl de palomitas en una mano mientras, entre los dedos de la otra, cargaba con las copas para el vino puesto previamente sobre la mesa—. Estás inventándolo —Dazai negó con la cabeza antes de mostrarle la pantalla. Chuuya leyó el mensaje—. ¿Qué demonios es eso?

—Es cuando tienes diarrea y hace ¡pum! por todos lados al salir —explicó.

—¡Qué asco! —respondió con una mueca—... ¿Y es contagioso?

—A quién le importa. No dejaré que Akutagawa entre a nuestro baño teniendo diarrea explosiva.

—MI baño, querrás decir.

—Somos pareja y lo tuyo es mío, así como lo mío es tuyo —observó con orgullo.

Chuuya le miró incrédulo antes de soltar un suspiro.

—Eso no me genera ninguna ganancia. Al contrario, creo que salgo en números rojos.

—Chibi es demasiado cruel.

—¿Qué haremos entonces? —cambió el tema de la obvia diferencia de ingresos—. Alek se ha ido con Ane-san y tu médico, dijo que llegaría tarde. Por eso invité a esos dos —lo pensó antes de caer en cuenta—: ¿Crees que debamos ir a verlos? Akutagawa debe sentirse muy mal. Creo que nunca le ha dado diarrea.

—Él no está enfermo, Chuuya —se movió para que el más bajo tomara asiento a su lado—. Deberías aprender a leer entre líneas. Atsushi-kun te tiene miedo.

—¿A mí? ¿Por qué?

—Por Verlaine.

—¿Qué tengo que ver yo? —reprochó—. Hasta obligué a Paul a disculparse.