Capítulo 26:"Las noticias viajan más rápido que los caballos"

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Las gotas de lluvia chisporroteaban al contacto con la piel ardiente de Drev. Unas llamas blancas envolvían su cuerpo por completo. Jadeante, observaba el cuerpo inerte de Áin ante él:


-Podríamos encontrar una forma de devolverte a tu cuerpo - .

La voz de Áin habló en su interior y resonó en su cabeza:

Mi tiempo entre los vivos ya expiró hace diez años. Se me ha dado una segunda oportunidad dentro de ti para guiarte en tus horas más oscuras. Devuelve mi cuerpo a la tierra

Drev se cargó dos cadáveres al hombro y otros dos bajo ambos brazos. Se apartó a un lugar del camino y cavó una tumba con sus propias manos. El agua incesante hacía ruido al golpear contra las hojas y contra los charcos. La oscuridad de la noche ya había caído por completo cuando Drev enterró el último de los cadáveres y se disponía a coger el cadáver de Áin. Drev se miró las manos ardientes y luego miró al lobo de fuego blanco. Compañero inseparable de Drev y la marca que utilizó su padre para sellar el elemento de fuego dentro de él:

-La marca... -.

La marca del lobo grabada en el pecho de Drev había cambiado de color. Ahora era de un blanco intenso que brillaba con la fuerza de las llamas:

Tu padre sabía que si no hacía algo por ti, tu enfermedad crónica te acabaría matando. Utilizó la estrella de Ítria para darte la fuerza necesaria que combatiera tu enfermedad. Sin embargo era peligroso albergar tanto poder, por eso utilizó el sello del lobo. Drev, tu padre encerró su propia energía vital en el sello del lobo para protegerte de lo que Lival pudiera hacerte. Estas llamas blancas que ves ahora son la voluntad de tu padre

Drev empezaba a comprender las cosas que su padre había hecho por él:

-Áin, mi padre... -.

Tu padre fue el adepto del fuego que protegió la estrella de Ítria junto al maestro Flam. Pero entonces sucedió algo maravilloso. Anlianne quedó embarazada de Lival y Martins tuvo que abandonar su puesto como guardián para cuidarlo. Comenzó sus labores de investigador cuando Lival cumplió los cinco años. Pero las cosas se torcieron y Lival desapareció sin dejar rastro. Años mas tarde llegaste tú y... Ya conoces el resto de la historia

-¿Pensabas decirme esto algún día? -.

Te lo diría llegado el momento

-¿Sabes algo más? -.

Se lo que debo saber

No hubo mas preguntas por parte de Drev, pero siempre era reconfortante saber algo más acerca de su padre.

Drev cogió el cuerpo de Áin y caminó bajo la lluvia incesante a través del bosque. Las llamas de Drev no quemaban el cuerpo de Áin, eran unas llamas cálidas y sin un ápice de maldad. Era como si su padre lo abrazara en un cálido abrazo. Las bestias del bosque abrían paso a Drev, que caminó con determinación hasta un árbol gigante. Se arrodilló en la base y cavó una tumba:

-No te mereces estar junto con la escoria -.

Drev cavó profundo. Mientras, un círculo de bestias de todas las clases se amontonaban entorno a Drev; Lobos, tigres gigantes, osos... Hasta los más pequeños seres se agolpaban para mirar con cautela. Terminó de enterrar a Áin y se quedó un rato mirando el gigantesco árbol que se alzaba ante él. Con el dedo, comenzó a trazar letras a fuego en la corteza del árbol:

"Que en paz descanse tu cuerpo. Fuiste un amigo, fuiste un maestro y fuiste un padre. Ahora, parte en pos de la mayor de las aventuras"

Seguramente fuera el epitafio más tosco que jamás se hubiera, pero ninguno significaba tanto como aquel. Drev retiró el dedo y las letras humeantes quedaron grabadas como surcos ardientes en la corteza del árbol. Se retiró y notó que las bestias se apartaban de su camino:

Drev: El Cazador de Fuego.Where stories live. Discover now