Enamorado de mi Mejor Amiga ©

31. No estoy seguro

JADE

Lo miré incrédula mientras que mi corazón latía con fuerza. No podía creer que después de tanto tiempo deseándolo, por fin esas cuatro palabras que tanto quería salieron de su boca.

— ¿Qué dices? —pregunté en un susurro, apenas audible.

—He querido preguntarte esto desde hace mucho tiempo, pero nunca encontré la forma de decírtelo —admitió, sonriéndome —. Yo quería saber si en algún momento yo te llegara a preguntar aquello, ¿me dirías que sí?

Asentí sin dudarlo dos veces y él me abrazó. Caí en la cuenta que no me había pedido para ser su novia, solo me había preguntado cuál sería mi respuesta si aquel momento llegara a suceder.

Mi móvil comenzó a sonar, haciendo que me separara de él. Vi que era mi padre así que lo conteste rápidamente.

— ¿Sí, papá?

—Jadeline Sophia Lancaster. —Hice una mueca, nada bueno sucedía cuando mi padre me llamaba por mi nombre —. ¿Por qué me acaban de llamar de la dirección, diciéndome que ha ocurrido un accidente en tu habitación?

Miré a Chase y él solo se limitó a reírse. Besé su mejilla entre risas a lo que depositó un beso sobre mi frente.

—Sophia, estoy esperando una respuesta.

—Papá, verás, ocurrió un problema con Maya. Todo ha sido un malentendido.

— ¿Con Maya? ¿Qué sucedió? Ustedes nunca pelean.

—Todo ha sido un malentendido, pero ahora todo está bien —mentí en la última parte, no quería preocupar más a mi padre.

—Eso espero, Jadeline. Bien, te veo el fin de semana. Llámame cualquier cosa, ¿bien? —Respondí un «sí» y lo escuché reír —. Bien, adiós estrellita.

—Adiós papá. —Chase me abrazó entre risas y depositó un beso en mi mejilla.

— ¿Nerviosa por lo del viaje a Cuba? —Negué con una sonrisa —. Será asombroso, Jade.

— ¡Lo sé! Imagínate, La Habana —comenté emocionada —.  ¡Será increíble!

Chase me miraba con una sonrisa en los labios, poniéndome nerviosa. Fue entonces en el que me besó, sorprendiéndome por completo.

— ¡Pues lo siento! —Ambos nos separamos al ver a Maya en la puerta. Negué con la cabeza mientras una sonrisa estaba en mis labios —. No entiendo el por qué siempre tengo que agarrar a la gente de esta manera. Lo mismo me acaba de suceder con Daniela y Brandon.

— ¡¿Qué?! —Chase y yo la miramos incrédulos, a lo que la rubia asintió.

—Según ellos, estaban "practicando" para su obra y tienen que besarse —comentó Maya, haciendo comillas con sus dedos —. Claro, y yo soy rubia con mi dinero.

Los tres reímos y fue dónde Maya me abrazó, haciéndome sonreír.

—Lo siento, lo siento mucho —dijo, a lo que yo asentí —. Estaba cegada por las palabras que Cintia me había dicho, había jugado con mi mente y me la agarré contigo. No pienso que seas una enferma, Jade. En serio jamás diría algo así de alguien que tiene algún problema.

Asentí y ella me volvió a abrazar. Chase nos rodeó a las dos con sus brazos, haciéndonos reír a ambas. Plantó un corto beso en mis labios para luego besar la frente de su hermana, quien le sonrió.

—Ahora que estamos los tres de esta manera, yo quiero saber... —Nos miró con ambas cejas alzadas —, ¿qué sucede entre ustedes? ¿Jase es real?