Enamorado de mi Mejor Amiga ©

67. Enamorado de tu mejor amiga

TRES AÑOS DESPUÉS

CHASE

— ¡Vamos Alex! Ábrelo —lo alenté, sonriendo.

—Ya, creo que lo gengo, tío ChaCha —dijo Alexander, sonriéndome.

Alexander abrió su regalo y abrió su pequeña boca al verlo. William estaba nervioso, demasiado diría ya. El regalo era una foto de Jadeline con Alexander cuando él era un bebé.

—Mamá... —susurró Alexander, y su labio inferior empezó a temblar.

—Oh campeón... —susurró Diego.

Alexander se acercó a William y lo abrazó. A pesar de todo, el castaño había tratado de tenerla cerca a toda costa para que el pequeñín no se olvidara de ella.

—No la conocí ni un copito, ¿era bonita? —preguntó el pequeño, mirándonos con una sonrisa.

—Era bella Alex, te amaba mucho—respondió William, sonriéndole.

— ¿Y te amaba a ti, tío ChaCha? — preguntó Alexander.

Le sonreí y sentí mis ojos llenarse de lágrimas. Conversar de Jade era un tema delicado para mí a pesar de que habían pasado tres años.

—También me amaba —respondí, sonriéndole.

—Mi mami, mi mamá —dijo Alexander, abrazando el cuadro —. A veces sueño con ella...

— ¿Y qué te dice? —le preguntó Tyler, sentándose en el piso.

—Me dice que me quiere, y me abraza... —susurró Alexander —, y dice que cuide a mi apá.

—Exacto campeón, tu mamá siempre está contigo —dijo Tobias, con lágrimas en los ojos —. Siempre Alexander, siempre lo estará.

El pequeño castaño nos abrazó para luego limpiarse sus pequeños ojos. Nos informó que se iba a ir a jugar con la pequeña Maya, así que William le dio un beso en la frente para dejarlo ir. Maya y Diego habían tenido una hija, a los dos meses de la muerte de Jade. Mi hermana se enteró que estaba embarazada de tres meses, lo cual fue la alegría que todos necesitábamos.

La pequeña Maya tenía dos años, mientras que Alexander tenía tres y medio. Ambos son muy unidos y me alegraba aquello. Cada vez que los veía, era cómo verme a Jade y a mí juntos.

— ¿Crees que tengan una historia cómo la nuestra? —me preguntó Adam, a lo que yo lo miré —. Ya sabes, enamorarse de su mejor amiga.

Me reí al igual que todos.

—De seguro, ya sabes lo que dicen: «hasta los mejores amigos pueden enamorarse» —dije, y Nick asintió.

—Sí —susurró Sabrina, abrazándose a sí misma.

Sonreí ante el comentario de Adam, ya que no pude dejar de pensar en ello toda la tarde. Era verdad sobre ello, Jade y yo éramos mejores amigos y decíamos que nunca nos enamoraríamos, pero mírennos, terminamos amándonos.

Los chicos y yo nos fuimos a un club en la noche, hacía mucho tiempo que no salía a divertirme. A William, básicamente lo arrastramos a el local, él no salía mucho desde lo de Jade.

Ya tenía veinticuatro años y era momento de que volviera a tomar mi vida. Era tiempo de que saliera a conocer nuevas personas para así encontrar a una nueva mujer que me llenara de felicidad. Maya y las chicas se quedarían con Alexander aquella noche, ellas también querían que William y yo consiguiéramos a alguien más.