Capítulo 26

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(-Narra Adam-)

Descubrí que cuando uno está en una relación y no ve a la persona por una cantidad grande de tiempo, extraña a esa persona demasiado y no puede evitar pensar en ella todo el día y en lo mucho que quiere verla. 

Eso es lo que me está pasando en éste momento con Emma, y eso que solamente ha pasado un día desde la última vez que nos vimos. Es por eso que decidí escribirle para que nos veamos. Necesito verla y pasar tiempo con ella. Y ahora que sé que la voy a ver en la noche luego de que me respondió al mensaje, las horas pasan más lento y la desesperación dentro mío crece.

Por suerte ahora mismo mis clases en la universidad acaban de terminar. Mañana tengo un examen importante pero voy a aprovechar de estudiar un poco en la oficina para así poder tener la noche completamente libre. Ahora es momento de pasar  a la siguiente fase del día, que es ir al edificio de mi padre, almorzar con él y luego comenzar con el trabajo. 

Avanzo hasta el estacionamiento hasta finalmente llegar a mi auto. Me subo en éste e inmediatamente arranco fuera de ahí en dirección hacia las Empresas White. 


Una vez que llego, conduzco hasta llegar al espacio de parqueo que tengo reservado para mí y después detengo el auto y me bajo de éste. Camino directamente a la entrada del enorme edificio y me subo al ascensor privado que sólo puede ser usado por los altos ejecutivos y socios. 

Presiono el piso de la oficina de mi padre y el elevador comienza a ascender, hasta que finalmente se detiene en el piso indicado. Las puertas se abren dejándome salir al enorme y ajetreado pasillo. Avanzo a través de éste y en el trayecto saludo a todas las personas con las que me cruzo. Paso al frente de la secretaria de mi padre, Emily, y la saludo con una gran sonrisa a lo que ella me ve extrañada. Es sólo que me encuentro realmente de buen humor el día de hoy y me es imposible ocultarlo, y eso debe parecerle raro en mí, ya que por lo menos el último año me lo pasé de mal humor.

Pero eso se acabó. Por primera vez en mucho tiempo siento que todo está yendo bien en mi vida, y me estoy dando la oportunidad de ser feliz junto a una persona en la que estoy verdaderamente interesado y a la que verdaderamente quiero. De ahora en adelante no voy a dejar que nada cambie eso ni me quite la alegría que estoy sintiendo en éste momento.

Abro la puerta de la oficina de mi padre y cómo siempre me lo encuentro sentado detrás del monitor de su enorme computadora, concentrado en el trabajo y aislado del resto del mundo. Cierro la puerta detrás mío produciendo un sonido, lo que causa que mi padre levante la mirada y me mire. 

-Buen día- saludo con formalidad mientras camino hacia él.

-Buen día- responde mientras se pone de pie y camina hacia dónde yo estoy.- Pensé que hoy también faltarías.

-Por qué pensaste eso?- le pregunto.

-Porque me dijiste que estabas enfermo, pero ahora que te veo noto que ya te sientes mucho mejor- dice observándome de pies a cabeza.

-Cierto, si...- hablo recordando la mentira que le dije ayer para poder faltar y pasar la tarde con Emma.- Ya me siento mucho mejor, almorzamos?- hablo señalando la enorme mesa de caoba que se encuentra en el centro de la oficina.

-Claro, Emily no debería tardar en traer la comida.- dice y mira su reloj mientras tomamos asiento alrededor de la mesa.

Cómo si la hubiera invocado con la mente la puerta de la oficina se abre dejando ver a Emily, quién sostiene una gran bandeja con dos platos de lo que parece ser un tipo de carne con ensalada acompañado de dos vasos de Whiskey con hielo. Camina hacia dónde nosotros nos encontramos y deja la comida y la bebida frente a cada uno respectivamente. Luego de eso se despide y sale de la oficina cerrando la puerta con mucho cuidado.

Ladrona, yo?Where stories live. Discover now