006.

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El lunes en la escuela, hubieron muchas cosas que por mucho tiempo fueron normales, pero ahora a JiMin no le parecían para nada.

Además de llevar puesto el regalo de JungKook, este último no le dirigió si quiera la mirada cuando se lo encontró por causalidad en el baño.

—Hola JungKook—dijo JiMin cuando se acercó al lado del alfa para poder lavarse las manos.

El pelinegro hizo como si el más pequeño no existiera. Terminó de lavar sus manos, las secó y salió del baño sin dirigirle ni una mísera mirada a JiMin.

—¡Ah!—JiMin pataleo y dio un pequeño grito de frustración.

Ahí estaba Jeon JungKook, ignorando por segunda vez a JiMin en el baño de la escuela.

JiMin odiaba a ese odioso muchacho tan bipolar, pero había cierta necesidad en su interior de conseguir su atención a toda costa.

"¡Vamos! ¡Haz que te preste atención JiMin!"

Eso era lo que gritaba su lobo interior a todo volumen dentro de JiMin, y por primera vez sentía que ese maldito animal dentro suyo tenía razón...o por lo menos una parte de ella.

Comenzó por mirarse al espejo. Mirar la sudadera que andaba puesta. Esa maldita sudadera que olía tan bien y no quería quitársela nunca de encima. Era de ese maldito chico que no podía ser su chico.

JiMin salió del baño, se sentía...¿bien? Tal vez podía sentirse más motivado, a buscar esa atención que le faltaba.

• • •

JiMin entró en su salón de química, y ahí estaba JungKook. Sentado en su lugar habitual al fondo del aula mirando hacia la ventana.

JiMin no dudó ni cinco segundos en acercarse y sentarse en el escritorio a su lado. El pelinegro, volvió a ignorarle a niveles olímpicos. JiMin frunció el ceño.

—Hola JungKook—pero este no respondió y JiMin volvió a enojarse—¿Por que te sientas atrás?

JungKook solo le miró. Durante cinco segundos, JiMin pensó que lo estaba logrando, pero cuando JungKook sonrío arrogante y volvió a ignorarle, hizo un puchero con el ceño fruncido y miró hacia el frente donde el profesor ya había llegado.

JiMin aún trataba de pasar por alto el echo de que todo el mundo en el salón le miraba extraño, al igual que lo hicieron cuando le vieron entrar con una sudadera nueva y con olor a alfa en la mañana.

Sin previo aviso, JungKook se levantó de su asiento arrastrando la silla y dirigiendo todas las miradas hacia el.

—Iré al baño—anunció a su profesor.

—Señor Jeon..-

—Iré, al baño, dije—repitió JungKook en un tono más fuerte, el profesor solo asintió y continuó con la clase como si no se hubiera dejado intimidar por un estudiante.

JiMin volvió a fruncir sus labios rosados con frustración. ¿Que hacía a JungKook tan especial? Solo que era un total y completo troglodita, pero JiMin quería la atención de ese troglodita.

Al terminar la clase de química, JiMin recogió sus cosas y las de JungKook, que las había dejado después de la escena en medio de clase.

Salió del salón sin problema ya que al todos nos tar que llevaba las cosas de JungKook, prefirieron abstenerse a tocarle si quiera un cabello a JiMin.

Le buscó por toda la escuela, no había rastro del alfa. JiMin bufó, era normal que Jeon se escapara de la institución, pero ahora más que nunca le importó, y mucho.

My Boy ; KookMinWhere stories live. Discover now