036.

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JiMin aún seguía aterrado.

Aterrado de sí mismo. De lo que podía llegar a ser y de lo que podía llegar a cometer. Mirar dentro suyo le daba miedo, mirarse al espejo era ojo inimaginable, encontré ese destello rojo en sus ojos no era algo que JiMin deseara hacer otra vez.

JungKook iba en el asunto del acompañante del auto de NamJoon, mirando cosas en su celular y computadora mientras que JiMin estaba recriminándose todo en el asiento trasero.

—Podemos hacer explotar el pastel...—sugirió JungKook—Sería divertido..—esbozó una sonrisa socarrona mientras daba una chupada al popi de cereza en sus dedos.

—Agrégalo, agrégalo—dijo NamJoon con emoción, ambos parecían niños pequeños planeando una travesura.

—JiMin ¿quisieras agregar algo?—JungKook miró al pelirubio por el retrovisor, este último le miró un poco perdido.

—¿Que? Ah..no, no, así está bien...

—No has visto si quiera lo que tenemos planeado...—replicó NamJoon parqueando el auto frente a la casa de JungKook.

—Yo...—JiMin se miró los muslos, las manos sobre ellos le temblaban—Lo siento...

JiMin abrió la puerta del auto, la cerró de golpe y salió corriendo hacia la casa de JungKook. No conocía mucho de aquella enorme casa, pero podría esconderse en un lugar.

Subió las escaleras corriendo, buscó rápido esa puerta y se escondió cerrando la puerta con llavín.

Mientras tanto, NamJoon y JungKook parecían idiotas. Con las bocas abiertas, al igual que los ojos, totalmente estáticos y mirándose entre sí.

—¡¿No harás algo rata imbecil?!

—¿¡Que se supone que haga cuando un chico sale corriendo de un auto NamJooon!? ¡Y más que todo un chico como JiMin!—NamJoon le pegó un golpe a JungKook en la quijada, por imbecil.

—¿Estas loco o que? Nunca he tenido un una pareja tan fuerte como JiMin, tampoco me he enamorado nunca, pero te puedo asegurar que JiMin corrió de aquí para que le sigas, no para que lo dejemos solo ahogándose—JungKook levantó una ceja, aún estupidizado.

—¿Que? ¿¡Si queria que lo ayudará por que corrió lejos de mí!?—NamJoon se palmeó la frente.

—No se que diablos pasó en ese contenedor con HoSeok, pero estoy seguro de que JiMin siente vergüenza y culpa por algo. TU DEBES SOLUCIONAR ESO COMO SU NOVIO—NamJoon golpeó el pecho de JungKook con su dedo índice.

—Estas jodiendome ¿cierto?—JungKook entendió a que se debía esto, era obvio que JiMin se sentía mal, pero de todas formas ¿por qué huía de él?

—Si no me entiendes, te lo explicaré a la manera salvaje—dijo NamJoon suspirando—Vas a entrar a tu estupida vas de niño lindo, vas a encontrar a JiMin y vas a hacer que su día se vuelva color de rosa ¿¡entendido rata de alcantarilla!?

—¿Debo hacer que deje de sentirse culpable?—NamJoon asintió, tratando de que JungKoo entendiera las cosas a su manera. Tal vez el mundo del amor era bastante nuevo para el.

JungKook se bajó del auto, percibiendo el olor de sufrimiento de JiMin desde ahí, mientras seguía el rastro de su omega el aroma se convertía cada vez en algo empachoso y casi asfixiante. Vaya que tenía que estar preocupado por JiMin.

Siguió la escensia del rubio hasta su habitación, al intentar abrir la puerta de la habitación no pudo ya que estaba trabada.

—JiMin...déjame entrar ¿si? Hablemos por favor..—JungKook no era delicado, pero debía serlo al tratar con un JiMin dolido consigo mismo.

My Boy ; KookMinWhere stories live. Discover now