Una Noche, Para Toda La Vida

10- 😮 Revelaciones y...

Una bolsa cubrió mi cabeza, aunque podía respirar bien no pude evitar asustarme, mi voz no salia por mas que intentaba gritar, de unos brazos me pasaron a otro y sentí como alguien más me cargaba, me subían y me dejaron caer. Aterrado endurecí mi cuerpo pero otros brazos me sostuvieron y escuche como cerraban una puerta de coche para que este mismo saliera a gran velocidad.

—¡¿Quiénes son?! ¡Dejen me ir! – logre decir mientras forcejeaba de las manos en mis brazos. Mi voz salia asustada, me sentía muy asustado.

«Estas cosas no pasan todos los días, ni de la mejor manera». Pensé.

—¡Cállate! No me hagas romperte la boca – grito uno a mi costado mientras me coge de la nuca.

—¡Cálmate! El jefe dijo que lo quería vivo, tu eres un animal cuando te enojas – la voz de una chica al frente le hablo.

—Vivo, no ileso – dijo burlón, su voz se dirigió a mi después: – así que no te hagas ilusiones de que eres intocable, unos huesos rotos no te hacen muerto ¿Entendiste? – susurro la pregunta a mi oído.

Un escalofrío horrible me recorrió el cuerpo, un "si" logre murmurar y con eso no salio una palabra de mi en todo el trayecto, pude sentir como pasamos baches, topes, nos deteníamos un momento y dábamos vueltas mas veces de las que yo quisiera. Fue hasta que sentí mis piernas dormidas que el auto se detuvo y me sacaron a rastras del interior, no logre poner bien los pies sobre el suelo cuando me volvieron a cargar como saco de papas, hice un quejido pero nada más – me seguía doliendo el cuerpo, sobre todo la cadera – , escuché como se abrían un par de puertas.

— ¡Jefe! Aquí esta su encomienda. – el tipo que me cargaba me bajo brusco y tropecé con mis propios pies para luego caer al suelo. Ni las manos pude meter a tiempo.

—Muy bien Leroy, deja verlo – un jalón de la maya en mi cabeza y los colores pintaron nuevamente.

Ahora, sobretodo el negro. Lo primero que vi fue una gran rosa negra que se  posaba en el fondo de la pared, tan hermosa, pero al mismo tiempo. Tan impotente.

—Mucho gusto, Yuuri Katsuki. Bienvenido al clan Chernaya Roza, y una más por entrar en la mafia – un hombre de algunos 60 años, cabello gris por las canas y piel clara se posaba en un sillón frente a la pintura en la pared, la rosa.

La luz estaba clara, podía ver que había a lo mucho díez personas, entre todas resaltaba esa persona, todos los demás a excepción de los cuatro que estaban detrás de mi vestían de traje negro y sus rostros eran de personas rudas, sin miedo a que les levanten un arma en su frente y estén a punto de jalar el gatillo... Esperen... Mafia ¿mafia?.. ¡¿Acaso dijo mafia?! Mi boca se abrió e intente decir algunas palabras pero ningún sonido proveniente de mi ni remotamente algo parecido, sentí mis ojos casi sacados de sus cuencas mientras lo miraba fijamente, mi cuerpo sudaba frío y comencé a temblar del miedo. Vale, ¡Estoy aterrado! Nunca en mi vida pensé encontrarme con alguien de la mafia aunque se sabe por las noticias que hay dos bandas en este país causando algunos infortunios en ocasiones pero ¡¿Enserio estaba metido hasta la garganta en esto?!

—¿Ma... Mafia? ¿Qué...? – pude murmurar finalmente oraciones incompletas.

Pude ver como al parecer el jefe volteaba su rostro y soltaba un suspiro aburrido se levantaba y caminaba a mi dirección. Sus zapatos negros bien lustrados con un dije de rosa negra a sus costados hacían juego con un traje grisáceo, camisa blanca y corbata negra, traía un pañuelo blanco.

—¿Acaso no sabias donde estabas metida pequeña puta? — tomo mi mentón y lo alzo para girar mi rostro – mira nada mas esos chupetones... – susurro y me soltó – Aquel bastardo que te montaba es mi enemigo en mi hermoso negocio y ¿sabes que? Pensar que el correría por ti y te llevaría a su organización para poner te un ojo cuando casi te vio muerto... Me impresionó bastante, quien pensaría de el gran Víctor Nikiforov estaría tan perdido entre el culo de un niñato como tú – se inclino hacia mi mientras decía aquellas palabras con asombro y burla. Pude ver en ese momento sus ojos azules, me tomo con una de sus manos y alzó otra vez mi mentón, él siguió: – pero sabes, eso es una ventaja para mi. Si te tengo y te valora mucho, pueda cambiarte por algo grande, sino, vas a nadar con los peces. ¿Qué piensas? ¿Vales lo suficiente como para ello? – me soltó rudamente haciendo que cayera de lado, se levantó y yo no pude decir nada, mis ojos picaron, oí como el daba ordenes pero eran como murmullos a mi alrededor.

Sentí como me paraba y era llevado a algún lado, parecía zombie sin donde poder poner atención. ¿Qué si valía lo suficiente? ¡Por el amor de dios! ¡Solo soy un chico que esta preocupado por terminar la universidad y no quedar embarazado! Estoy seguro que mi respiración es cada vez mas grande y pesada. ¡¿Cómo carajo cree que yo valgo para un truque entre mafiosos?! No tengo nada de valor a excepción de mi propia vida y mi móvil, que por cierto ni se donde esta... Soy conducido a un cuarto media mente claro y dejado ahí, se cierra la puerta fuertemente y es cuando reaccioné.

—oh por... – «ya no, ya no más por favor... No...» Pensé. Mis lágrimas caen como ríos en mis mejillas, pase mis manos por mi cara ¿y mis lentes? Posiblemente cayeron al ser secuestrado. Lloraba en silencio, como temiendo a molestar y por gusto me maten; no se cuanto tiempo paso pero me agote de tanto llorar, tenía frío y me sentía muy cansado, hambriento pero no tenía fuerzas para levantarme de aquella pequeña cama.

¿Qué va a ser de mi? ¿Enserio iba a morir así? Toque mi vientre, no tome la pastilla hace algunos días, me había llegado mi calor y, podría ser que ya este en estado cuando me la quiera tomar, ¿seré madre? Un hijo de un mafioso, de un criminal, de una persona a cual no conozco y ¿por el simple hecho de conocerla he llegado a esto? No, no lo quiero.

No, no quiero un hijo así, no de él.

[***]

Muchas gracias por esperar, nos vemos en la siguiente publicación. 💗

Sin más...

10-07-18😐✨