klance «One Shots» [Voltron]

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Donde es la primera vez de Lance.
Dedicado a: zari554466

Lance disfrutaba estar con Keith en el sofá. Se sentaban y acababan tumbandose. Keith acababa con la cabeza de Lance en el hombro, casi cuello. Siempre acababa acariciándole el brazo con sus uñas, asi, con lentitud, causándole unas cosquillas muy agradables.
Lance suspiró y se acomodó en su hombro.
En la televisión salió uno de esos anuncios donde publicitan páginas de citas seguras. Y Lance, que no era de estar callado, se rió en voz bajita.

-Qué te hace gracia. -murmuró Keith, mirando aún la tele.

-Que la gente que se mete ahí va a lo que va.

-Seguro que tu tenías un perfil de esos.

-Si. Ponía Lance McClain. De cuba. 18 añitos. Podemos jugar a juegos de mesa como tú y yo, en la mesa, las fichas son estas. -Keith soltó una carcajada en una pedorreta. -¿Que?

-Que eres un payaso. Si hasta hace nada sólo eran pajas.

-Y vaya pajas. -Keith le golpeó la nuca. El cubano se echó a reír y se pegó al cuerpo del coreano. Tan fuerte, tan firme, tan duro... si es que estaba buenísimo. -Oye.

-Qué. -bufó con algo de desgana.

-Quiero intentarlo. - Keith le giró el rostro confundido.

-¿El que, el juego de mesa? - Lance se echó a reír y negó. Algo más nervioso, clavó sus ojos en los violetas.

-No. Lo de hacerlo.

-Pero nosotros ya...

-No no. Keith... ya sabes. -desvió su mirada. Keith frunció el ceño y se echó a pensar.

-Lance, no se que quieres decir.

-Keith, que me... me lo hagas tú. - Keith abrió la boca. Iba a decir algo, pero se tragó las palabras.

-Vale vale. Pues... cuando tu quieras.

-Ahora.

¿Asi, ya?

- Si. Estoy preparado.

No estaba preparado. Tenía en la orilla de la cama a Keith quitándose la camiseta. El mismo coreano de había encargado de desvestir al latino.
Se acercó a gatas a Lance y fundió los labios en los ajenos. La mano de Lance, que se coló en su nuca, le indicó y prácticamente obligó a que siguiera. Y entraron las lenguas al juego. A Lance le ponía mucho ver como dominaba Keith en ese juego.
Y claro, se empalmó. Keith se dió cuenta al notar como ambos sexos comenzaban a rozarse, y como Lance, entre beso y beso y espacio para respirar, soltaba suaves gemiditos.

Vino la parte divertida: prepararle. Es ironía, no es nada divertida.

-Con cuidado. - se quejó el cubano. Volvía a aferrarse a su cuello para sentir esa seguridad. Y sintió como los dedos de abrieron suavemente. Soltó un gemido alargado y agudizado.

-¿Lance? -preguntó algo divertido. El mencionado gruñó y le estiró de la melena.

-¡Que no hagas cosas raras!

-¡Lance tengo dos dedos dentro de tu culo, ese aviso llega tarde! -Lance le movió la cara hacía la suya.

-Cállate. -y volvió a besarle.

Y llegó la segunda parte de la diversión: entrar.

-Voy... -susurró Keith cerca del oido de Lance. Asintió y se abrazó a su cuello.
Y sintió la presión. Y se quejó.

-No...

-Lance, esta saliendo mejor que nunca. Aguanta. -y jadeó al sentir la presión del coreano en aquel agujerito.

-No... no no... -clavó la uñas en la espalda y cuello del coreano. Y Keith gimió de dolor. -Perdón...

-Lance por favor. -dijo en un súplica algo molesta.
Colocó su frente en la ajena. Y observó la situación.
-Entro. Ya. Si o si.

- Vale vale... -y Keith hizo presión. Entró la punta y Keith jadeó en voz baja. Lance gimoteó.
Y se fue deslizando lentamente. Lance comenzó a gemir y quejarse en voz alta. Clavó sus uñas en Keith otra vez. Miró los ojos del cubano.

-Ya está. Dentro... -jadeo. Besó sus labios y miró sus ojos. Le limpió las lágrimas. -Ya está.

-Duele. Duele mucho. -dijo en una queja en voz alta. Se tapó la cara.

-No me digas... -susurró. Lance miró hacía otro lado, agobiado. -Esto se pasa en seguida.

-Duele. Escuece. Duele y escuece. ¡Seguro que hay algo que va mal!

-Lance, que no. Está todo bien. -besó su cara para calmarlo.
Keith se movió lentamente en un leve gruñido. Y Lance chilló de dolor. Se abrazó a Keith mientras se retorcía y le murmuraba constantes duele al oído.
Al final pudo empezar a moverse. Keith le trató con todo el mimo y cuidado del mundo. Lance, al empezar las estocadas, se quejaba y se mordía la mano. Pero entonces Keith tocó ese puntito, ese lugar tan sensible. Y gimió.

- Que has...

-Esto es lo bueno. -y trató de repetir el movimiento.

Todo acabó bien. Lance terminó corriendose, un poco tarde, pero terminó.
Se abrazó al chico.

-¿Bien? -susurró Keith. Lance asintió. Peinó el pelo del coreano y esbozó una sonrisilla.

-Si.

-No era para tanto...

-Ha dolido mucho. -dijo con una expresión que pedía la razón.

-Duele pero por que es la primera vez. -un silencio.

-Así que ya no soy virgen...

-No. -murmuró suspirando. Le abrazó y beso su hombro. -Te vas a cortar las uñas.

- Si si. -susurró. No era virgen.
No soy virgen, pensó.

Que bien le sonaba.

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[💜 Nota de la autora porque puede y porque quiere oír a los lectores(?) :
Si queréis segundas partes de algún One Shot de los publicados, comentarlo y lo tendreis.
Si tenéis alguna idea que os hace ilusión, comentarla y se pondrá en marcha. 💜 ]