La historia de un gran amor.Arthur y femMerlin.

LA LLAMADA DEL DRAGÓN 2

CAPÍTULO 2 - LA LLAMADA DEL DRAGÓN 2

Los guardias la escoltaron hasta las mazmorras donde descansaría en una celda hasta que Arthur la considerara lista para irse; sabía que se podía matar a personas por actos traidores contra la realeza, por lo que esperaba que él perdonara un poco. Cuando se vio obligada a entrar en su húmeda y sucia celda que olía a orina y heno mohoso, se encontró en el suelo, con las rodillas contra su pecho y lágrimas en los ojos. Su cabeza golpeó contra el muro de piedra detrás de ella; había esperado que el dolor la dejara inconsciente, pero solo la dejaba un poco mareada. Merlynn se mordió el labio y trató de dormir para no tener que estar consciente de su entorno por mucho tiempo.

A la mañana siguiente, su cuerpo estaba congelado de adentro hacia afuera con una fina capa de hielo que cubría el heno a su alrededor. Estaba temblando violentamente, el heno no le había dado mucho calor, y el calor que su cuerpo había soportado del sol hacía mucho que se había acabado. Merlynn estaba más fría que nunca; y ella había sobrevivido a los inviernos con sólo un par de mantas delgadas. Esto fue absolutamente congelante.

Merlynn, la voz del día anterior llamó. Sin embargo, aunque todavía era un eco débil, estaba más cerca, como si ella estuviera, de hecho, más cerca de la fuente.

Merlynn se incorporó, sus músculos adoloridos y su cuerpo helado protestaron, y buscó la voz; estaba empezando a volverla loca. "Me estoy volviendo loca en serio", murmuró, ahora frustrada por ella misma y por toda la situación. Solo había estado en Camelot durante dos días y medio y las cosas ya le estaban yendo muy mal.

Merlynn.

"¿Seriamente?" Ella gritó a los cielos. No había nadie allí, pero había esa voz; era diferente a cualquiera de la que había oído hablar, y estaba empezando a molestarla. Tal vez todo estaba en su cabeza? Mayo -

"Merlynn?" Ahora, ella conocía esta voz. El áspero sonido de la puerta de la celda de hierro forjado abierta irritó sus oídos y luego Gaius apareció detrás de los guardias. Entonces él suspiró. "Lo único que debías hacer era mantener la cabeza baja y evitar los problemas, ¿y qué haces en su lugar? Te comportas como un idiota. ¿Heriste al príncipe y lo insultaste? Merlynn, tienes suerte de que no lo hiciera. ¡Hazte decapitar! "

"¡Me provocó!" ella defendio Merlynn tuvo que usar la pared para apoyarse y ponerse de pie. Gaius se dio cuenta de lo delgada y frágil que era, su rostro era extraño, como un elfo u otra criatura mística, pero era evidente que no comía tanto como debería. A lo que no podía culparla; muchos aldeanos no comían a menudo, y algunos reaccionaron físicamente. Incluso con su ropa holgada podía ver lo dolorosamente delgada que estaba.

"Y lo provocaste," le recordó, rompiendo sus pensamientos.

Merlynn bajó la mirada al suelo. Sus acciones fueron ciertamente groseras, pero su mente obstinada razonó con ella que el príncipe merecía el tratamiento que había recibido: había mostrado tal falta de respeto hacia Morris y todos en general, y no era algo que ella simplemente pudiera ignorar. ¿Pero, para golpear al futuro rey de Camelot? No está bien. "Lo ... lo siento".

Gaius suspiró: "Tienes mucha suerte, pude mover algunas cuerdas para liberarte".

Ella sonrió y corrió a abrazarlo con fuerza. "Oh, gracias", suspiró ella. "¡Gracias!" Él apartó suavemente a la chica de él con desaprobación, luego comenzó a llevarla por la escalera hacia el patio. "No olvidaré esto. Seré bueno y respetuoso y mantendré la cabeza baja, lo prometo. Tenía tanto miedo, ¿sabes? Que pasaré mis días en esta prisión congelada y tendré ratas". comeme de adentro hacia afuera ".

Hizo una mueca ante la imagen que creó en su cabeza. "Si bien eso es una, er, cosa encantadora de imaginar, solo hay un pequeño precio que pagar", dijo y, mientras lo miraba para ver si le decía cuál era el "precio", notó una pista. de alegría en sus ojos que la hizo un poco aterrorizada.