La historia de un gran amor.Arthur y femMerlin.

Sir Gwaine

Capítulo 71: Sir Gwaine

Gwaine nunca había sido mucho para los sentimientos.

No había estado cerca de muchas familias durante la mayor parte de su vida. Desde el momento en que murió su padre y su propia familia se hizo pobre y se crió en grande, dio todos sus hallazgos de lo que robó, lo que pudo encontrar, a su madre y su hermano pequeño, y se fue.

Lo necesitaban, mucho más que él.

Tenía quince años cuando se fue de casa.

Gwaine experimentó gran parte de sus habilidades de lucha con espadas de su padre; el caballero Especialmente el truco que lo hizo famoso en Camelot, con máscara o sin máscara.

Reflexionó mientras se sentaba en la taberna.

Las mujeres siempre le enviaban miradas sugestivas.

Había sido así durante mucho tiempo, por lo que ahora, Gwaine estaba muy acostumbrada a todas las miradas apreciativas que recibía del sexo opuesto, ya veces del mismo sexo. Lo aceptó, lo acogió incluso en algunas ocasiones. Pero, había una parte de él, una parte muy pequeña, que deseaba más que una simple noche en la cama con un pájaro que estaba dispuesto a hacerlo.

Ya, Camelot ya había hablado de los retoños de Gwaine. Solo había dormido con tres mujeres desde su llegada; Fue sorprendente, de verdad, para él. Por lo general, Gwaine terminaría con una cantidad mucho mayor de mujeres en ese período de tiempo.

Gwaine se preguntó qué estaba haciendo su madre en este mismo momento, mientras tomaba un trago de aguamiel. O su hermano pequeño. ¿Estaban vivos ahora?

Deseaba regresar a su pueblo natal, ver a su familia si todavía estaban peleando como solían hacer todos los miembros de su sangre. Pero, ¿aceptarían al hijo que tenía que irse? ¿O se habían olvidado de él?

"Estás particularmente malhumorada hoy, Gwaine", dijo una voz ligera y amistosa cuando había un cambio a su lado.

Sus ojos oscuros se volvieron hacia Merlynn, y sonrió, estirándose para enredar sus dedos en su pelo rizado, deleitándose con él por unos momentos antes de revolver los mechones de manera burlona.

"¿Puedo tener una pinta de aguamiel, por favor?" Le preguntó a Evoric, quien asintió y comenzó a preparar su orden.

"¿No eres un poco joven, princesa?"

Merlynn puso los ojos en blanco y le dio un codazo en el brazo. "Sabes que no, Gwaine. Ahora estoy", ella puso una cara dramática, " una dama". Entonces, ella le sacó la lengua. "Y no hay nada que puedas hacer al respecto".

"Oh, sí, absolutamente como una dama", dijo sarcásticamente, tomando un sorbo espumoso de hidromiel. Ella sonrió con diversión y se adelantó para limpiar con su pulgar la sustancia blanca y burbujeante de su boca. Gwaine la miró por un momento; ¿Por qué tuvo que hacer esto? La inocencia, el olvido, lo estaba matando.

Ella necesitaba no tocarlo. Nunca.

O un día, puede perder el control, inclinarse hacia adelante y golpear sus labios contra los de ella. Merlynn respondería, él sabía que ella sentía lo mismo que él, pero no tanto. Gwaine había rogado, rogado, a los dioses que enviaran a su enamoramiento, pero nunca lo hizo. Sus pensamientos siempre estaban plagados de Merlynn.

Ella era una droga.

Merlynn era una persona adictiva, como la gravedad. Él se sintió atraído por ella. Cada movimiento, tacto, caricia, sonrisa. Gwaine lo tomó todo. Pero nunca pudo revelar completamente en sus más profundas fantasías; ella amaba a Arthur más. Él lo sabía. Él odiaba eso. Si solo hubiera estado allí, un poco antes, antes de que se desarrollaran sentimientos entre ellos, ¿serían diferentes las cosas?