Cap. IV

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Dos semanas después, viernes, 19:30h

Aunque Natalia había llamado al teléfono que le había dado María, justo esa tarde, no le habían dado cita para la prueba hasta dos semanas después. Y allí estaba, en la puerta del local, con su guitarra a cuestas. El sitio era grande y estaba decorado en plan alternativo, no se podían encontrar dos sillas iguales – "¿por qué harían eso?, Dios... me perturba profundamente".

Natalia entró y se sorprendió de lo grande que era el local, tenía varias salas con distintos ambientes, había un escenario bastante grande, incluso un piano de cola en una zona que parecía una cafetería. También vio lo que parecían dos estanterías con libros.

- ¿Eilan? – pregunta un chico trajeado que se le acerca tendiéndole la mano.

- Eh... sí, soy yo – Pablo debía haber dado su nombre artístico, el que usaba sólo cuando hacía bolos en solitario - ¿qué tal?

- Muy bien, encantado de conocerte, yo soy Joan, pasa – dijo el chico con una sonrisa mientras le señalaba la sala del piano.

¿Por qué le sonaba tanto aquel tío?, ¿dónde le había visto antes?... la verdad es que era bastante mono, y tenía un culo impresionante. Tenía la sensación de que hacía mil años que no le veía el culo a un tío... bueno, quitando la semana pasada, cuando Dave, después de perder una apuesta, tuvo que salir a hacer footing en tanga... Sonrió mientras sacudía la cabeza para intentar borrar esa imagen.

- ¿Te parece bien aquí? – dijo Joan, señalando una mesa.

- Sí, claro, donde quieras – contestó Natalia

Después de una media hora, Joan ya le había explicado a Natalia todo lo que necesitaba sobre el trabajo. El negocio tenía dos socios, Joan y una chica. Tendría que ir tres noches en semana: viernes, sábado y otra a elegir, el sueldo era mucho más que aceptable, y aunque no le hacía gracia lo de cantar, le habían prometido ampliar los bolos si tenía buena acogida.

- Bueno, y ahora que nos conoces un poco... ¿te importa...? – dice Joan señalando la funda de la guitarra.

- ¡Oh, sí!, claro – Natalia saca la guitarra de la funda y pregunta - ¿algún estilo en especial?

- No, tú misma, elige algo con lo que te sientas cómoda – dice Joan sonriendo

Natalia se toma su tiempo y canta una versión acústica de "Feel it Still". Parecía que no iba mal del todo porque Joan sonrió durante toda la canción. Después, animada por esa reacción, Natalia se atrevió con una versión de "Diamonds" de Rihanna.

- Genial, ¿tocas algo en castellano? – pregunta Joan que había terminado aplaudiendo con la última canción.

- Sí, claro - contesta Natalia mientras piensa rápido en una canción.

Finalmente, se decide por "Complicidad" de Vanesa Martín. Justo al terminar, y sin dejar que Joan abra la boca se escucha una voz que viene desde arriba, de unas escaleras, detrás de una de las barras:

- JOAN, ¿QUIÉN CANTA?

- EHM... EILAN BAY – contesta Joan ojeando previamente sus papeles.

- QUE VENGA ESTA NOCHE, A ESO DE LAS 21.00H

- OK... bueno, pues ya has escuchado a la jefa – dice Joan sonriendo - ¿tienes planes para esta noche?

- Pues parece que ya sí, ¿no? – dice Natalia sonriendo.

- ¡Genial!, pues nos vemos esta noche

De vuelta a casa, Natalia no puede creerse la suerte que tiene, ¡¡¡gracias al destino por esa voz gritona de las escaleras!!!. Si esto va bien, incluso podría dejar alguna de las clases de violín y de piano, y dedicarse más a componer. Por fin, parece que todo va cogiendo forma.

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