43.- Comenzando ¿de nuevo?.

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—Primero que todo, Lucy aún no está segura, tienes que ponerle seguridad Trenton —dijo Adam a mi hermano.  

—Tiene seguridad desde el momento en que supe que estaba aquí.

—Espera, ¿Qué? —dije sorprendida—, todos estos dias he estado con alguien oliendome el trasero y yo ni enterada.

—Desde que volviste a ver a Trenton volviste a ser la grosera de hace años —dijo Adam riendo.

Rodeé mis ojos poniendolos en blanco. Ellos comenzaron a idear planes, me aterraba todo lo que estaba ocurriendo, por mi cabeza solo pasaba “¿que pensará Dan de todo esto?”.

A lo que acordaron, Adam regresaría a New York, necesitaba cuidar a Andy y a mis padres, Trenton se encargaría de regresarlo seguro, claro y con seguridad.

—Lucy —me llamó mi hermano y se acercó a mi—, esto es para ti, papá lo armó especialmente para ti antes de que te fueras pero, tu huiste molesta y jamás te lo dijo, estoy seguro que el quisiera que lo tuvieras ahora —dijo poniendo un llavero con algunas llaves y alarmas de seguridad sobre mi mano.

— ¿De qué es esto? —pregunté curiosa.

—Descubrelo tu misma mañana, en el celular que te dí, en las notas hay una que dice “D1”, está la dirección ahí, las llaves largas son para abrir y la alarma es la de color negro, la nota “C1” es de las llaves cortas, y la alarma es la plateada, en las notas tambien vienen el codigo de las alarmas.

—No entiendo de que hablas, pero mañana lo investigaré.

— ¿Quieres que te lleve a tu hotel o te quedas a dormir aquí con Adam?

—Creo que me quedaré Trenton —hice una pausa—, gracias.
Él me sonrió y se acercó a la puerta de salida. —Si necesitas algo más, mi contacto es Stark.

—Me lo imaginé —dije burlona. Él salió con su gente y se fue, di un gran suspiro y me senté junto con Adam en el sillón—. Dime, ¿Cómo está?.

—Histerico, desesperado, no sabe absolutamente nada de ti —contestó Adam, yo me quedé callada—, estos días ha ido a tu casa, pensando que obtendrá una respuesta, él sabe que no la tendrá y aún asi va.

Nos quedamos callados y Adam continuó.

— ¿Fue Alex verdad? —preguntó Adam.

Asentí con mi cabeza en silencio, luego me levanté el vestido hasta mi torso, debajo traia un short corto, y con él tenía la confianza total, sé que no veia como algo más, asi que le mostré mis heridas.
Vi como él apretó sus manos en forma de puño, furioso.

—Ese día, cuando me contestaste, ya me habian hecho esto, pensé que iba a morir ahí, todo porque me enamoré de un hombre del cual una psicopata tambien se enamoró.

Adam me abrazó fuerte.

—Lo extraño tanto Adam, como no tienes una idea —de nuevo comencé a llorar, luego se me ocurrió una idea—. ¿Podrías hacerme un favor cuando regreses?

Adam aceptó y fue ahí donde le dije de mi idea, al rato nos fuimos a dormir. A la mañana siguiente me despedi de
Adam muy temprano y me fui a mi hotel, despues de verlo me quedé más tranquila, me arreglé y me dispuse a visitar el lugar de las llaves misteriosas que me entregó Trenton. Al revisar la dirección, era un edificio de mi padre, donde rentaba departamentos y algunas oficinas, curiosamente la direccion de las dos notas era la misma, solo diferente piso. Al llegar avisé a la señorita y ella me indicó que era el elevador del final, pasé a ese elevador, “D1” era el ultimo piso. Subí y al llegar con el pequeño aparato de alarma, puse el codigo y la desactivé, despues use las llaves largas, eran 3, quite los seguros y abrí.

Era todo un departamento, todo ese enorme piso, había una nota en el centro de la mesa en la estancia.

“Querida hija, ya eres toda una mujer, y deseo que este sea el departamento de tus sueños, con amor, papá”.

Supongo la escribio desde entonces, debajo de esa nota, venia algo adicional.

“Cancela la horrible swit en la que te estás quedando y mudate aquí”. Claro, ese era Trenton y la nota adicional la escribio hace horas o dias.

El piso que está justo debajo, estaba conectado con esté, bajé y abri las mil cerraduras que tenía al igual que el departamento, al entrar casí me da un infarto de la emoción, era todo una bodeja, tenia demasiada ropa colgada, muchas telas, de un lado era tipo oficina, en el centro habia unos 3 escalones hacia abajo, era una pequeña estancia, y a la derecha estaba una mesa de corte, habia todo para confeccionar ropa. Y justo en la mesa habia otra nota.

“Sé que este es el sueño tuyo y de tu madre, aquí podran nacer las mejores prendas de todo el país, las amo”.

No sabía todo lo que mi padre quería para nosotras, claro una nota adicional de Trenton. “La niña mas chiflada, tienes todo para hacer tu propio negocio y sobrevivir sin usar el dinero de la loca.”

Sonreí, mi corazón por un lado estaba feliz, pero del otro necesitaba a mis padres, mis amigos, y a Dante conmigo.

No lo pensé y ese mismo día me mudé, llamé a Trenton para agradecerle.
Se pasó el día de mi cumpleaños, Henry,  Chris y Trenton se encargaron de llevarme a cenar y casi me obligaron a embriagarme.

3 meses después.
New York
Viernes 11 de octubre.
Departamento de Ezra.

—Dante, que bueno que llegas hermano —saludó Ezra a Dante.

— ¿Por qué?, ¿hay alguna novedad? —contestó Dante sentandose junto a Ezra frente a la computadora.

—Uno de mis agentes acaba de rastrear en una llamada una voz parecida a la de ella, no era ella al teléfono, si no al fondo de la llamada.

— ¿Y quién es el que hablaba?

— Sólo sabemos que es Chris Calley, ya mandé investigarlo, asi podremos saber desde dónde se rastreó la llamada. También me mandaran el audio, y asi tu puedas verificar que sea ella, tu la conoces más que nosotros.

—Claro, me parece perfecto Ezra, al fin hay una posibilidad —dijo Dante muy sonriente, luego se le borró la sonrisa—. Bueno, yo tengo que irme.

— ¿Tienes un compromiso? —preguntó Ezra apagando la computadora.

—Sí, mi padre me obligó a ir a una cena con sus amigos aburridos de negocios, lo peor es que es muy probable que vaya a ir Alex, aún no sé si ella tiene que ver en lo de Lucía, ahorita mu prioridad es encontrarla primero.

—Sí, luego a investigar a Alex.

—Nos vemos primo —Dante se despidió de Ezra y se fue a su casa a arreglarse.

***

—Luces fantástica —dijo Chris detrás de mi. Vi su reflejo en el espejo y me giré a él.

Finally Falling | EN EDICIÓN.Where stories live. Discover now