44.- Una Mentira

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—Gracias, cuando lo confeccioné no sentí que fuera para mí, pero ahora que lo veo puesto, me agrada —dije mientras veía mi creación, un vestido en color mostaza con estampado de mini flores, con algo de vuelo, manga larga y un escote poco pronunciado por delante.

Tras haber pasado tres meses, Chris y yo nos hicimos muy unidos, no puedo decir que con Henry pasó igual, ya que siempre está ocupado, así que Chris es el que siempre estaba conmigo. Comencé a trabajar de inmediato en diseñar y confeccionar prendas, lo que hacía lo vendía por internet, vivía bien.
En cuanto a mi familia, los extrañaba mucho, y Dante, después de un mes dejó de ir a mi casa, a veces llama a mamá, pero solo eso. Tal vez ya se haya olvidado de mí.

Chris y yo íbamos a salir, me convenció de ir a comer, pero prácticamente ya era cena. Asi que salimos de mi departamento, condujo algunos minutos y al llegar era un lugar muy lindo. Él tenia gustos muy diferentes, cuando piensas que le gusta solo una cosa, ya te muestra otra.

Cenamos en ese lugar, platicábamos y bromeábamos, salimos y dimos una vuelta por un pequeño parque.

— ¿Te gustó la cena?

—Sí, me encantó, gracias —dije sonriente mientras seguía caminando, de repente sentí como entrelazaba su mano con la mía

—Lucy —dijo Chris y me giré para verlo.

— ¿Sí? —contesté ya estando de frente.

Me tomó de la cintura y rápidamente unió sus labios con los míos, al principio no seguí el beso, pero luego un impulso dentro de mí reaccionó y seguí. Me besaba muy lentamente, sin prisas. Luego a mi mente vino Dante y puse mi mano sobre su pecho separándonos un poco.

—Chris, yo.. no.. —agaché mi cabeza, no sabía que decir.

—Lo sé —sonrió—, sé que es muy pronto para ti, ni siquiera sabes que va a pasar con la investigación de Trenton en New York.

—Sí, lo siento mucho, de verdad, no creo estar lista para algo nuevo.

—Entiendo, no te preocupes.

Chris me llevó a mi departamento, me quedé pensando toda la noche, ¿estará mal que comience una nueva vida aquí?, ¿Dante se cansó?, realmente es egoísta querer que el me espere, si yo fui la que se fue sin decir nada.

***

—Creo que nuestros padres están muy ocupados, ¿y si vamos al jardín? —dijo Alex a Dante, este asintió y la acompañó.

Caminaron al jardín, Alex con una copa de vino y Dante con un whiskey.

—Luces muy guapo —dijo Alex y se acercó a él.

—Gracias —contestó Dante desinteresado.

—Te he extrañado mucho sabes, no ir a la oficina para poder verte me mata —dijo acercándose más al muchacho.

—¿Enserio?

—Sí, ¿sabes?, podríamos salir algún día, ir a comer algo o al cine.

—En realidad estoy muy ocupado, no creo poder —dijo Dante, luego dio un trago a su whiskey.

Alex dejó su copa de vino en una de las bancas del jardín, terminó de acercarse a Dante y lo besó, lo rodeó con sus manos, lo besaba muy efusivamente, y para él no era nada agradable aquello.
Él se separó de ella.

—Alex perdón, no quiero ser grosero, pero tengo novia —dijo él.

—Sí, que por cierto ya no la he visto contigo, se fue lejos ¿no? —dijo Alex en un tono un poco burlón.

Dante volteó a verla muy extrañado, ¿Cómo sabía que Lucy había desaparecido?.

— ¿Tú tuviste que ver con eso cierto? —acusó a la pelirroja, se exaltó y la apretó de los hombros estrujándola— ¡dime, maldita sea!

—Suéltame antes de que vean nuestros padres que me estas violentando —dijo con una sonrisa burlona—, Dante, yo puedo hacerte muy feliz, si me dieras la oportunidad, ella de seguro ya encontró a alguien que la pueda hacer más feliz de lo que tu la hacias.

—¡Cállate! Te vas a arrepentir Alex, te lo juro —dijo Dante y le dio la espalda para salir de ahí.

—No la vas a encontrar, tengo contactos en la policía y jamás te harán caso —dijo Alex a Dante quien se apresuro en entrar a la casa del amigo de su padre.

—Me largo —dijo Dante y salió de la casa, subió a su camioneta y se fue a su casa, sin darle explicaciones de nada a su padre.

Conducía furioso, llegó a casa de sus padres, y se tiró en la cama.

— ¿Dónde estás Lucía? —se dijo a si mismo, tallando la cara con sus manos.

***

Las Vegas, Nevada
Lunes 14 de octubre.
Oficina Stark.

—Buenas tardes, vengo con el señor Stark —dije a su secretaria. Sí, era un fastidio tener que pedir llamar asi a Trenton, no lo conocían de otra manera, más que Stark.

—Él.. —su secretaria y antes de que pudiera decirme algo escuché gritos en su oficina.

— ¿Está con alguien? —pregunté.

—No, está en una llamada.

“Carajooo Adam, ¿sabes algo respecto a estás malditas fotos?... Es una estupidez, me las mandaron mis agentes..”

Trenton se escuchaba realmente enojado, y a esta distancia con puerta cerrada no debería escucharse nada, pero cuando se enoja, realmente se enoja y todo Nevada se entera. Decidí entrar, escuché que hablaba con Adam, y quería ver si alcanzaba a saludar. Entré y él estaba de espaldas, con un sobre amarillo en sus manos.

—No sé si sea una confusión pero debes de averiguar eso tú —dijo Trenton, me sintió y volteó.

— ¿Todo bien? —pregunté—, ¿Adam está bien o pasó algo con mis papás?.

—Está aquí —dijo Trenton al teléfono— investiga eso, nos vemos en unos días. —colgó.

—Trent, ¿Qué pasa? —al  preguntar esto me senté en su escritorio y él aventó el sobre amarillo con fuerza al escritorio.

—Te juro que si no es falso, voy a matarlo yo mismo con mis propias manos, y a ella también —dijo Trenton y se giró de espaldas, viendo hacia la ventana.

Yo lo observé, muy confundida, pero viendo su semblante realmente estaba furioso.
Tomé el sobre que había arrojado a su escritorio, lo abrí y saqué lo que había dentro, eran unas fotos.

La primer foto era solo de Dante, la segunda foto igual, pero con una mujer, de noche en un jardín tomando un whiskey, la tercera foto, era él, con ella, besándose. Ella lo tenía prácticamente abrazado. En mi corazón solo sentía una enorme presión, pasé a la cuarta foto, igual, besándose, pero con zoom. Mis ojos comenzaron a cristalizarse.

—Ya está con alguien más —afirmé.

— ¿La reconoces? —preguntó Trenton—, es la estúpida que te tiene amenazada.

— ¿Alex? —genial, está consiguiendo lo que quería esa maldita.

—Adam va a investigar, si está o no con ella, de ser asi, créeme que hoy mismo iría a matarlos a ambos.

—No, está bien Trenton, yo me fuí asi, sin decir nada..

—Pero por culpa de ella, lo va a pagar muy caro, nadie amenaza con lastimar a mis padres, mucho menos a mi hermana —dijo muy seguro de sus palabras, almenos por un lado me sentía protegida.

—Gracias, yo ya me voy, solo venía a traerte algo de comer, lo dejé en recepción para ti.

—No tenías porque hacerlo.

—Cállate y come, deseguro no has probado bocado alguno.

—Realmente no

Salí de su oficina y él detrás de mí, yo me fui directo y antes de que se cerrará el elevador, vi que sonriente agarró la lonchera del escritorio de la recepcionista. Ya no nos llevamos tan mal, pensé.

...

Finally Falling | EN EDICIÓN.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora