Siento Que Me Gustas /-Killua X Male Reader-

Prólogo III / III

- ¿Hoy tampoco puedes dormir?

- No, lo lamento, ¿Te desperté?

Alizee negó con la cabeza mientras se subía a mi cama para sentarse a mi lado, acaricié brevemente su cabello revuelto antes de volver a mirar a través de la ventana.

- ¿No te parece que hoy se ven más estrellas que ayer?

- Hmmm, realmente no

Mi hermana recargó su cabeza en mi hombro con lentitud antes de mirar también en dirección a la ventana.
Antes, cuando no podía dormir, me ponía a contar las estrellas de alguna zona en específico del cielo nocturno, pero con el paso de los años me terminé limitando a simplemente observar la lluvia de brillantes puntos que manchaban la oscuridad perfecta de la noche.

- Mañana voy a ir con Issey a esa ciudad, creo que es la del casino, seguramente querrá que pague algo

- Entiendo, ten cuidado. ¿Cómo sigue tu espalda?

- Está bien

Mentira, me duele cada vez que me muevo demasiado, y ni se diga al intentar acostarme. A menos que me logre dormir sentado o recargado de lado en una pared dudo seriamente que pueda conciliar el sueño hoy.

- Liz, ¿Tu crees que...? Oh

Al voltear para intentar mirar a mi hermana me di cuenta de que ya se había vuelto a quedar profundamente dormida. Sonreí y la hice acostarse en mi cama para arroparla con las delgadas sábanas.

En verdad me alegra que una de las pocas promesas que cumple mi padre hasta la fecha es que no va a hacerle nada a Liz mientras yo haga lo que él me pide. Ella es tan linda... seguramente entre nosotros dos podría pagar muchas más de sus deudas, pero no creo que podría soportar que le hicieran algo a Alizee.

Si alguien le pusiera un solo dedo encima con la intención de lastimarla... le arrancaría la mano entera sin dudarlo.

Dormí cerca de una hora, antes de que los pasos de mi padre saliendo de su habitación me hicieran despertar. Escuché como se metía al baño de inmediato, como siempre hacia después de levantarse.

Alizee seguía dormida, por lo que salí en silencio de la habitación y me dispuse a preparar algo pequeño de desayunar. Llevé el plato que tenía mejor pinta a la habitación y lo dejé en la mesita de noche de Liz.
No tardé mucho en escuchar el sonido del agua bajando por el escusado seguido de la puerta del baño abriéndose.

- ¡Pequeño bastardo! Será mejor que te apresures a prepararte, ¡Y hazlo bien!

- ¡Sí!

Elegí uno de los tres conjuntos de ropa que tenía preelegidos para cuando iba a hacer un pago, los tres consistían básicamente en un short o pantalón corto semi ajustado acompañado de un crop top o alguna playera corta que dejara piel a la vista.
Tomando en cuenta el último comentario de mi padre decidí usar un top grisáceo en particular, cuyas mangas cortas dejaban los hombros expuestos.