82. La subasta del juego

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Kurapika cayó enfermo al día siguiente, tenía una fiebre muy alta que no parecía disminuir con un ningún método que probáramos, incluso Senritsu intentó con una melodía especial de su flauta sin ningún éxito, por lo que deducimos que debía deberse a alguna consecuencia del estrés de los últimos días.
Debido a esto tanto él como Leorio se "mudaron" temporalmente a una casa que consiguieron en la misma zona donde vivía Zepile, ya que era mucho más fácil cuidar de Kurapika ahí.

Mishi se estaba quedando con Alizee en el hospital, ya que al parecer el gato se encariñó bastante con ella decidido dejarlo allá para que Liz no estuviera sola en lo que le quedaba de tiempo en el hospital.

Por nuestra parte, Gon supuestamente tenía un plan para conseguir más dinero en la subasta, sin embargo yo no me llegué a enterar acerca de qué trataba su dichoso plan, y sinceramente no me daba mucho interés preguntar así que decidí esperar a ver para sorprenderme.
Probablemente su plan tuvo que ver bastante con el hecho de que curiosamente decidiera que iríamos a la subasta el primer día, en que únicamente se iba a subastar una copia del juego, iríamos los tres acompañados de Zepile.

Claro que al ir a una casa de subasta teníamos que ir vestidos formalmente... y eso significaba tener a Killua media hora arreglándome con ropa que me había comprado de un día para otro.

- ¿Ya terminaste de acomodarte la camisa?

- Ya casi, son muchos botones

Rezongué un poco mientras me terminaba de poner la camisa blanca formal que Killua me había hecho usar. Los pantalones oscuros y los zapatos del mismo tono no estaban nada mal, pero está camisa era algo asfixiante.

Killua regresó del armario con algo más (oscuro también) entre las manos, aunque al verme de inmediato me regañó.

- Tonto, esté botón también se abrocha

- Pero me asfixia

A pesar de que me quejé, dejé que mi novio se acercara y me abotonara el botón más cercano al cuello de la camisa.
Cuando terminó me pasé un dedo por el borde del cuello mientras sacaba la lengua, aprieta bastante.

- Te acostumbras rápido, ¿No ves?

Killua se señaló a si mismo, él ya se había vestido y era IMPOSIBLE dejar de verlo. Se veía increíblemente lindo con ese traje oscuro, además de que el moño negro que está usando le da un toque muy atractivo a mi parecer.

- Ten, ponte esto también. Y esto, y esto

Suspiré mientras él me pasaba un chaleco, un cinturón y un moño ya hecho y con un resorte para asegurarlo alrededor del cuello, igual que el suyo.
Me los puse sin quejarme demasiado, aunque me negué rotundamente a usar saco.

- Se me ve mal, y me va a dar calor

- Claro que no se te va a ver mal, y lo del calor...

Killua pensó un poco pero cuando no se le ocurrió nada terminó accediendo a que dejáramos el saco.
Se acercó un momento para acomodarme adecuadamente el moño, después me dió un pequeño beso en la frente y me indicó que me diera la vuelta.

Me giré de espaldas a él, por lo que podía sentir estaba ajustando un par de tiras que tenía el chaleco en la parte trasera, de manera que me quedó algo más ajustado.

- ¿No te aprieta demasiado?

- Nope

- Perfecto

Apenas dijo eso Killua me rodeó la cintura en un abrazo repentino, solté un pequeño respingo y levanté un poco los brazos instintivamente.
Killua apoyó su cabeza en mi hombro y me habló en el oído con voz baja.

Siento Que Me Gustas /-Killua X Male Reader-Where stories live. Discover now